Fernando Clavijo acusó ayer a Pedro Sánchez de estar haciendo un uso torticero de los "instrumentos" del Estado. El presidente regional se alineó así con quienes reprochan a Sánchez haber convertido el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), Televisión Española (TVE) e incluso el mismo Consejo de Ministros en aparatos al servicio del PSOE. El nacionalista se revolvió con esta dura acusación contra la bancada socialista en el pleno que celebró ayer el Parlamento autonómico. Clavijo, que se quejó de que el PSOE y Nueva Canarias (NC) plantearan sus preguntas en la sesión de control en términos de balance de legislatura solo un mes después del Debate sobre el estado de la Nacionalidad, defendió que el Archipiélago está hoy "mejor" que en 2015. En el grupo parlamentario socialista la visión es diametralmente opuesta. Clavijo "lo ha tenido todo" para mejorar la situación de la Comunidad Autónoma "y no ha hecho nada".

Manuel Marcos Pérez, el ayer portavoz del PSOE en sustitución de la titular Loly Corujo, se expresó con especial dureza contra el Ejecutivo de Clavijo, del que los socialistas formaron parte durante el primer año y medio del mandato. A pesar de ello, Marcos Pérez fue contundente al calificar de "muy pobre" el balance de los cuatro años del nacionalista al frente del Gobierno regional. El histórico representante del PSOE en La Palma argumentó que el Ejecutivo ha contado con 4.000 millones de euros más en los presupuestos y que, sin embargo, persisten los problemas de las listas de espera sanitarias y de las muchas personas dependientes desatendidas. "Y la pobreza y la exclusión social están en cifras inasumibles", agregó. En definitiva, el portavoz de la bancada del PSOE le espetó que a pesar de tenerlo "todo" -estabilidad política gracias al pacto con su partido y estabilidad presupuestaria por la mejora económica-, Clavijo es responsable de poner "en entredicho" la "cohesión" social de Canarias. Pérez terminó su discurso preguntándose retóricamente si puede el presidente seguir "mirando a los ojos" a los ciudadanos, lo que terminó de encender al nacionalista.

Clavijo siguió el esquema del socialista. Si este calificó su labor de "muy pobre", el mismo calificativo le dedicó él a los nueve meses de Pedro Sánchez en la Moncloa. "¿Están ustedes para dar lecciones? No lo creo", continuó el presidente del Archipiélago, que enumeró a su vez la lista de incumplimientos del Ejecutivo central en los compromisos contraídos con la Comunidad Autónoma y algunos de los malos números que sufre el país. Los "peores" datos de desempleo desde 2013, la cifra más baja de ventas al por menor desde el año 2000, el "engaño" a los agricultores isleños en la polémica del agua para el regadío, los "recortes" en el Posei adicional, los fondos para carreteras que no terminan de transferirse... Y especialmente, agregó el jefe del Gobierno canario, el olvido del Estatuto de Autonomía -apenas tres meses después de aprobarse con el del PSOE- en los presupuestos estatales que finalmente no salieron adelante. Unas cuentas en las que ni se atendían partidas que prevé el Estatuto ni se respetaban las especificidades fiscales de las Islas. "Son ustedes los que no pueden mirar a la cara a los canarios", sentenció.

Con todo, fue cuando Clavijo acusó a Sánchez y su Gobierno de usar el aparato estatal para sacar provecho de cara a las elecciones cuando más se torcieron los rostros en el PSOE. "Ustedes están usando los instrumentos del Estado para beneficiarse electoralmente", enfatizó el nacionalista, que se sumó así a las muchas voces críticas con una pretendida utilización partidista de las instituciones. Críticas que se han producido por cuestiones como el abuso del decreto ley -pese a que Sánchez antes apostaba por restringir su uso-; por haber reunido a los pesos pesados del PSOE en la Moncloa, que es residencia oficial de los sucesivos presidentes; por la supuesta utilización de TVE en beneficio propio -la tele pública emitió en directo la presentación de su libro-; y hasta por convertir el Consejo de Ministros, dicen, en instrumento político para aprobar medidas electoralistas con la legislatura ya agotada.