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Nuevo equilibrio político | Negociaciones para conformar el Gobierno de Canarias

Génova cortocircuita el empeño de Asier Antona de pactar con el PSOE

Malestar en el entorno de Casado por los intentos del líder canario de actuar por libre l El PP avanza acuerdos con CC y Cs en el Cabildo de Tenerife y la capital de la isla

El presidente nacional del PP, Pablo Casado, abraza a Asier Antona en un acto electoral en Telde el pasado mayo.

La dirección general del PP ha tomado cartas en el asunto y ha respondido al empeño del presidente del partido en Canarias, Asier Antona, de buscar pactos de forma indiscriminada en las Islas con el PSOE, máxime cuando el objetivo final y principal de ese entendimiento con los socialistas es el propio Gobierno regional. La cúpula de la calle Génova se vio ayer obligada a puntualizar el sentido de algunos de los acuerdos ya alcanzado entre populares y socialistas canarios en gobiernos locales e insulares, como el cerrado para el Cabildo de Lanzarote, y descartó por completo que haya nada cerrado entre ambas formaciones y menos aún que se pudiera extender al ámbito regional.

La respuesta a la estrategia de Antona por parte de la cúpula popular se concretó en primer término en unas declaraciones del secretario general del PP nacional, Teodoro García Egea, pero fuentes del partido aseguran que había intención de trasladar de forma directa y personal al dirigente canario los ya conocidos reparos a los pactos con los socialistas en las Islas pese a que en la operación se pretende blanquear con la inclusión de Cs en esos acuerdos. García Egea afirmó que "no hay nada" en el horizonte que haga pensar en ningún acuerdo importante con el PSOE, y que esa tentativa unilateral contradice la estrategia del partido en todo el Estado de buscar pactos de centro-derecha y liberales con Cs, y rompe el discurso y la línea política que ayer mismo el propio presidente nacional, Pablo Casado, concretaba en su 'no' a la investidura de Pedro Sánchez, candidato socialista a la Presidencia del Gobierno central, en la reunión mantenida entre ambos en el Congreso.

Las declaraciones del número dos nacional del partido en esRadio dejaban claro que la autorización que tiene Antona por parte de a dirección nacional y de la Comisión de Gobernabilidad, creada para coordinar el proceso de negociaciones en todo el Estado, es exclusivamente para que se siente a hablar con todo los partidos, incluido el PSOE, no para cerrar acuerdos que, en todo caso, tienen que ser avalados en Madrid. García Egea contextualizó todas las conversaciones que está teniendo Antona en Canarias en esa estrategia de "hablar con todos", pero "por supuesto no hay nada cerrado ni hay nada en esta línea de gobierno con el PSOE", afirmó.

Sin posibilidades

Fuentes cercanas al secretario general señalaron ayer a este periódico que no se contempla ningún escenario de "pacto con el PSOE para el Gobierno de Canarias", y circunscribieron los encuentros al respeto por parte de Antona al ámbito de los contactos formales como los que el PP está llevando a cabo en otros territorios. "Es el mismo tipo de contacto que el que ha mantenido la candidata de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, con el candidato del PSOE, Ángel Gabilondo", afirmó un responsable del equipo de García Egea. Otras fuentes insisten en que el tipo de acuerdos políticos por el que apuestan en la sede nacional es el que se está trabajando con CC y Cs para el Cabildo de Tenerife donde las tres fuerzas avanzan ya hacia un pacto de gobierno para los próximos cuatro años que mantendría al nacionalista Carlos Alonso en la Presidencia. En el ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife hay también contactos entre las mismas fuerzas aunque sí es verdad que ahí hay conversaciones avanzadas de populares y naranjas con el PSOE de Patricia Hernández para arrebatar el bastón de mando a José Manuel Bermúdez (CC).

El propio Pablo Casado se refirió a ayer de forma indirecta a esta cuestión al referirse a CC como "socio" con el que piensa que puede alcanzar un acuerdo para el Gobierno regional al señalar que aceptaría que las dos diputadas nacionalistas en el Congreso, Ana Oramas y Guadalupe González Taño, se abstuvieran para permitir la investidura de Sánchez, aunque ambas formaciones pactaran el Ejecutivo canario. De hecho, consideró que Sánchez debería intentar un acuerdo con CC o con UPN para su investidura y no solicitar la abstención del PP.

Varias fuentes y portavoces de la formación conservadora expresaron ayer su sorpresa por el anuncio por parte de la secretaria general del PP canario, Australia Navarro, de un acuerdo con Cs para explorar de forma conjunta "como primera opción" de gobierno regional en Canarias un acuerdo de "cambio" con el PSOE para echar a Coalición Canaria del poder tras 26 años de gobiernos dominados por los nacionalistas. "No es eso es lo que estamos pensando" aseguran desde la calle Génova.

Otros portavoces parlamentarios en el Congreso también se mostraron ayer extrañados por la posibilidad de un pacto con el PSOE en Canarias, recordando que la línea política y estratégica del partido a lo largo de la legislatura en la Cámara será la de una dura oposición al futuro Gobierno socialista si Pedro Sánchez logra finalmente superar la investidura y conformar un Ejecutivo que, aseguran, irá en la dirección contraria de la que defiende y propone el PP. Aseguran que un pacto de esta naturaleza, el único que se suscribiría en el conjunto de comunidades autónomas y grandes ciudades, sería utilizado por los socialistas para romper el discurso del partido.

Las mismas fuentes recuerdan, de un lado, que será en cualquier caso el núcleo duro de la calle Génova y la comisión de pactos creada al efecto quienes controlarán todo el proceso, y, de otra parte, se muestran recelosos de la tentativa de Antona, a la que no le dan demasiadas opciones de prosperar.

La oposición de la dirección nacional del PP a un pacto con los socialistas canarios ha venido plasmándose internamente en las últimas semanas en distintas ocasiones aunque de momento no se ha querido desautorizar de forma tácita al líder regional del partido. El malestar sin embargo, según distintas fuentes, va in crescendo en la medida que aumenta la sensación de que Antona está yendo por libre en la estrategia de pactos y de forma manifiestamente contraria a la estrategia estatal.

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