Ciudadanos no cede y mantiene el veto a Fernando Clavijo. La formación naranja apoyará un Gobierno presidido por el PP con la condición de que el dirigente nacionalista, investigado por el caso Grúas, no forme parte de él. Vidina Espino, diputada regional electa, reiteró ayer que la línea roja de su partido es que ningún imputado forme parte de las instituciones, por lo que considera imprescindible que Clavijo se aparte para que la alianza propuesta por los propios nacionalistas -en la que son indispensables los dos votos a favor de Cs y los tres de ASG- llegue a buen puerto.

El complicado escenario postelectoral canario dio un vuelco hace dos días. CC ofreció al PP la Presidencia del Ejecutivo regional a cambio de que la formación popular revierta los pactos que ha alcanzado o negocia con el PSOE en cabildos y ayuntamientos. La política de acuerdos seguida por los populares en municipios y corporaciones insulares asfixia a los nacionalistas, que buscan salvar algunas de sus plazas históricas como Santa Cruz de Tenerife y el Cabildo tinerfeño. Además de esta condición, en la que el partido de Pablo Casado está dispuesta a ceder, quieren que el líder del PP, Asier Antona, dé un paso al lado y sea Australia Navarro la presidenta. La formación popular ve innegociable que Antona sea el presidente y ya tanteó a Cs, que le ha brindado su apoyo.

La hoja de ruta diseñada por la ejecutiva nacional de Ciudadanos para la negociación de los pactos señala al PP como socio preferente, pero el decálogo también recoge el rechazo a gobiernos en los que estén presentes personas investigadas. "Cs apoyará una investidura con un presidente del PP, pero siempre y cuando Clavijo se aparte y no esté en ese Gobierno", apuntó Espino. Esto implica, por tanto, que el actual presidente en funciones -investigado por delitos de prevaricación, malversación y tráfico de influencias- no ocupe ningún asiento en el nuevo Ejecutivo que se forme en caso de sellar una alianza. Ni como vicepresidente, ni como consejero, ni como nada. "No se trata de una cuestión en contra de Clavijo", recalcó, "sino de cumplir con el decálogo que aprobó la ejecutiva nacional del partido para cualquier tipo de negociación en toda España".

La formación de Albert Rivera no ha exigido ningún requisito más. Ni siquiera formar parte de él porque están dispuestos a apoyarlo desde el Parlamento. Espino sostiene que quieren ser "coherentes" con su mensaje de regeneración política y que no es "indispensable" estar en ningún Ejecutivo. "Lo que nos importa no son los sillones, lo que queremos hacer son políticas útiles para los ciudadanos en Canarias", subrayó.