El Archipiélago recibió en 2018 la solicitud de asilo de 2.079 personas, más del doble el año anterior, en el que se registraron 820 casos. La mayoría de las peticiones fueron de personas procedentes de Venezuela que sufre en la actualidad una crisis humanitraia, seguido de países como Colombia, Marruecos, Sahara Occidental, República Democrática del Congo y Rusia. Por provincias, en Las Palmas se presentaron 1.059 solicitudes y en Santa Cruz de Tenerife 1.020, según explicó el coordinador territorial de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Juan Carlos Lorenzo, durante la presentación del informe anual sobre personas refugiadas en España y Europa.

El año pasado solo se tramitaron seis estatutos de refugiados en Canarias, apuntó Lorenzo, quien detalló que en los cinco primeros meses de 2019 la comunidad autónoma ya ha recibido 1.232 solicitudes, lo que apunta a que se volverá a superar la cifra del año anterior.

España, en 2018, lideró en la UE la acogida de migrantes irregulares llegados por vía marítima y terrestre con 65.383 entradas, casi el triple que en 2017. En total, las costas del país recibieron el 51% de las llegadas marítimas a Europa y, al menos, 811 personas murieron tratando de alcanzar el litoral español, 2.299 si contabilizamos las fallecidas de camino a algún punto de las costas europeas. "Se tiende a adoptar políticas migratorias de externalización y blindaje de las fronteras en lugar de fomentar la solidaridad y la humanidad", afirmó Lorenzo, quien criticó que el caso del Acuarius "debió ser una norma y se convirtió en una excepción", por lo que España "no facilita el derecho al asilo y el acceso a un país seguro".

Con respecto al número de solicitudes de asilo, España recibió 54.065 peticiones, un 74% más que el año anterior, con un 8% del total de las solicitudes presentadas en el continente, que alcanzaron las 637.895. El coordinador territorial de CEAR afirmó que la cuota de protección internacional de España es de un 24%, es decir, que solo se protege a una de cada cuatro personas que lo solicitan, dato que está muy por debajo de la media europea que se sitúa 14 puntos por encima. Las solicitudes pendientes de resolución siguen aumentando y, actualmente, "hay más de 100.000 personas pendientes de una respuesta por la que tendrán que esperar hasta dos años", detalló Lorenzo.

Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), en junio de 2018, 70,4 millones de personas se vieron obligadas a huir de sus países para poner a salvo sus vida. La realidad más dramática es la de Siria, con casi 6,5 millones de refugiados y con más de un millón de niños sirios nacidos como refugiados. El 52% de las personas que piden asilo son niños, un porcentaje que se ha multiplicado por diez en la última década. "Muchos se desplazan sin compañía de sus familias y sufren a menudo situaciones de abuso y violencia a lo largo de su trayectoria", recalcó.