Telefónica ha recuperado entre el mes de enero de 2018 y el de junio de 2019 más de 324 toneladas de materiales y equipos obsoletos en Canarias (entre baterías, teléfonos móviles, routers y decodificadores), además del cableado de la transformación de su red de fibra óptica.

La compañía destaca que ha sido clave la colaboración del cliente, que han llevado a sus tiendas Movistar y de proveedores los aparatos antiguos, pero también a su apuesta de por la digitalización de esa gestión a través de una herramienta pionera de gestión de residuos de Telefónica (Gretel).

Subraya que el objetivo es fomentar la economía circular como nueva forma de entender la economía, enfocada en mejorar la eficiencia en el uso de recursos, disminuir la dependencia de materias primas y mitigar el cambio climático.

Telefónica apunta que en 2018 generó en todo el mundo 26.295 toneladas de residuos, un 4% menos que el año anterior, y destinó a reciclaje el 97%.

Del total de residuo generado, casi el 64 por ciento proviene de residuos de cable como resultado de la migración de la red a fibra óptica, y comenta que gracias a la recuperación de los cables y dispositivos electrónicos, ingresó más de 32 millones de euros.

En 2018, Telefónica recogió más de 800.000 móviles y facilitó la reutilización de dispositivos a través del 'leasing' o la venta de segunda mano en algunos de sus mercados, como en el Reino Unido con el programa O2 Refresh.

Igualmente la compañía recuperó casi 4 millones de routers y decodificadores usados, y apunta que gracias a los routers reutilizados en un año en España, la empresa evita la emisión de más de 7.300 toneladas de CO2 y la energía que consumen 886 casas.

El año pasado Telefónica recicló, sólo en España, más de 10.000 toneladas de residuos, el equivalente al peso de la torre parisina Eiffel.