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Casa África Seguridad, cooperación y desarrollo

Maman Sambo Sidiko: "La ayuda que demandamos para el Sahel no es limosna, es sensatez"

"Si Burkina Faso cae, Costa de Marfil caerá. Los terroristas llegarán al mar. Dios sabe lo que pueda pasar"

El Sahel es hogar de yihadistas, nido de redes de tráfico de personas y una de las principales rutas de inmigrantes, ¿qué es más necesario en estos momentos: dinero, armas o educación?

Nuestra estrategia, la del G5 Sahel, es desarrollo y seguridad.

Antes el desarrollo que la seguridad.

En 2015 el G5 decidió desarrollo y seguridad. Después llegaron los problemas de terrorismo y la seguridad empezó a tener más espacio. Empezamos a buscar armas y todo tipo de instrumentos para la Fuerza Conjunta del G5 Sahel, que solo tiene dos años de existencia y es necesario reforzarla. Son cinco países, los más pobres del planeta, diría, que se tienen que organizar entre ellos. Cualquier gobierno que no pueda proteger a su población, que no pueda darle lo mínimo como la educación o el acceso al agua, pierde legitimidad. Desarrollo y seguridad tienen que complementarse.

¿Qué garantías hay de que los gobiernos de Mali, Níger y Burkina Faso, cerca del derrumbe como usted advierte, puedan impulsar el desarrollo y la seguridad de sus países?

El G5 es un espacio de solidaridad. Hay unos países que tienen menos recursos que otros. Níger, por ejemplo, tiene problemas en varias fronteras. Por un lado tiene a Libia, luego a Boko Haram en Nigeria y Mali está como ya sabemos. No se puede pedir a Níger que funcione como cualquier país que no tenga esos problemas.

¿Es preocupante esa contaminación?

Es muy preocupante. El G5 debe responder, pero también es necesaria una respuesta más regional. Ya tuvimos una reunión en septiembre con la Cedeao para ver cómo podemos trabajar juntos. Ghana, Burkina Faso y Togo están juntos en una iniciativa, en la que también Mali y Níger van a participar, para trabajar en la vigilancia de fronteras. Asimismo, la Cedeao ha decidido poner recursos para la lucha contra el terrorismo.

¿Hasta dónde podría llegar el efecto dominó? ¿Podría afectar a Canarias, España y Europa?

Somos como una barrera. Tome el caso de Burkina Faso. Si cae hoy, Costa de Marfil automáticamente tendrá problemas. Esa gente va a llegar al mar y tendrán más armas, más recursos y más posibilidades para el tráfico de drogas. Dios sabe lo que pueda pasar.

¿La UE ha amortiguado lo esperado sus problemas?

Trabajamos mucho con la UE, que ha entendido que también necesitamos reforzar nuestras capacidades en cuanto a análisis. Pero hay que reconocer que hemos tenido promesas de ayuda de algunos países que no han venido tan pronto como esperábamos. Por eso a nuestra fuerza armada le falta equipamientos, pero la cosa va cambiando.

¿Cuánto queda para que los países del G5 y del Sahel, en general, puedan caminar solos?

Tras la II Guerra Mundial, Europa estaba en ruinas. ¿Qué pasó? El Plan Marshall, que le ayudó a salir de esa situación. Nosotros venimos de mucho más lejos. La colonización, las guerras y todo lo demás. Todo es cuestión de paciencia para ayudar a una parte del mundo que necesita tomar su destino en sus manos. Hay que formar, entrenar y demostrar solidaridad. Además, si no lo hacen, lo siento. Nosotros nos vamos a derrumbar, pero quienes provocaron ese derrumbe, puede que intenten venir por aquí.

Quiere decir que es posible que se abran rutas terroristas.

Por Europa en general. Somos un poco una barrera contra eso.

¿Y que se intensifiquen los flujos de inmigración?

Si la gente puede trabajar y vivir en su país, ¿por qué vendrían aquí? Yo prefiero tener un jardín con mis vacas en mi país que correr el riesgo de morir en el Mediterráneo o en el desierto. Hay que dar oportunidades, particularmente a nuestra juventud. También se olvida que hay más inmigración interna en nuestra región que a Europa. Níger es un país muy pobre y recoge gente de todas partes que viene a establecerse. La ayuda que pedimos no es limosna, es sensatez.

Una de las conclusiones de la reunión es que la violencia, en vez de aminorar, crece pese a los diferente planes de acción.

Sí, porque quizás no estamos tan cerca como deberíamos de las poblaciones para ver sus necesidades. Voy a traer soldados para hacer eso, eso y eso. ¿Y qué más?

Quiere decir que hace falta algo más que adiestrar a soldados.

Hace falta muchos más recursos para el trabajo al desarrollo y a veces no es mucho lo que se requiere. Hay que trabajar para tener mercados, casas de salud, escuelas, mataderos... Son cosas que nos han dicho la gente que necesitan. Hay que estar más cerca y no solo tener grandes planes donde la población está desvinculada.

La violencia y el terrorismo son solo la punta del iceberg.

Tenemos muchos problemas entre las comunidades porque los recursos naturales son cada día más escasos, la demografía explosiona y hay una pobreza generalizada. Ese el problema real de esta región y a eso se le añade el terrorismo y todo lo demás.

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