Abogado, docente y empresario en distintos sectores económicos del Archipiélago. Padre de seis hijos y afiliado a Vox desde 2014. Alberto Rodríguez Almedia, nuevo diputado electo del partido por la provincia de las Palmas, habla un perfecto latín y presume de su extensa formación académica. El abogado se postulaba a los comicios del domingo como el candidato menos conocido, pero finalmente fue el indiscutible protagonista de la noche electoral canaria junto a su compañero en la provincia occidental, Rubén Darío. Ambos lograron ser los primeros diputados electos de Vox en Canarias. Con ello alcanzaron dos escaños más para su partido respecto a los resultados del 28 de abril, cuando la formación no obtuvo los suficientes apoyos para optar al reparto de puestos por las Islas.

Rodríguez ha pasado de anónimo a histórico en un abrir y cerrar de ojos. En el último suspiro de la campaña electoral, cinco días antes de la celebración de las votaciones y con los nervios a flor de piel, Vox tuvo que realizar un cambio de última hora en la lista al Congreso por Las Palmas. José María Vázquez, anterior cabeza de lista en la provincia, renunciaba a su puesto por cuestiones personales y Rodríguez ocupaba su lugar. Tras duros momentos de estrés e incertidumbre el partido continúo con la campaña, normalizando la situación e intentando que el revés no afectara a su idea de sacar un escaño por cada provincia. Y así fue. Ni horribles consecuencias ni malos resultados. Vox salió victorioso de su pugna en las Islas incluso contando con un candidato desconocido por los canarios. El tsunami nacional del partido arrasó Canarias donde la formación que lidera Santiago Abascal logró 117.495 votos, 47.881 papeletas más que en abril. Lo que la sitúa como quinta fuerza política con el apoyo del 12,44% de los votantes.

Desde el partido en las Islas aseguran que la ausencia de consecuencias tras el cambio denota "estabilidad" y además subrayan que en ningún momento el Consejo Ejecutivo Nacional se planteó "abandonar la candidatura en Las Palmas tras la renuncia de Vázquez". Desde Vox reconocen que la "marca" del partido ha influido de forma notable en los resultados en Canarias, pero apuntan que ocurre lo mismo en todas formaciones de implantación nacional.

Rodríguez, con 41 años, fue candidato a las elecciones municipales en dos ocasiones y también ocupó el número dos de la lista al Congreso por Las Palmas en los comicios de primavera. Es uno de los 30 primeros afiliados de la formación en la provincia y fue miembro de la primera ejecutiva del partido en Canarias. Ocupa el cargo de vicepresidente en la gestora que controla el partido en las Islas desde que en marzo de este año dimitiera Ricardo Baña, último presidente provincial de la formación en Las Palmas. Está previsto que en abril del próximo año se celebren elecciones para designar a la nueva dirección.

Rodríguez no ha formado parte de ninguna otra formación política y reconoce coincidir al 100% con las ideas del partido de extremaderecha. Defiende la unidad de España, la sustitución de las autonomías por un Estado más centralizado y acabar con gran parte de los cargos políticos para destinar ese dinero a "mejorar la calidad de vida de los ciudadanos", señala.

El diputado electo está casado, tiene seis hijos y es huérfano desde muy joven. Es el primero de su familia en interesarse por la vida política y actualmente concilia su ajetreada vida familiar con su trabajo como abogado y empresario. Dirige, además, una escuela infantil en Ciudad Jardín, en pleno centro de la capital grancanaria. El diputado prefiere no pronunciarse sobre su orientación religiosa y sobre su participación en organizaciones de otra índole que no sea política.

Desde el partido destacan la extensa preparación y experiencia del diputado electo y critican que otras formaciones no apuesten por "ocupar sus filas con políticos parecidos a Rodríguez".

Lo que está claro es que el gran beneficiario de la repetición electoral es Vox. Se ha convertido en la tercera fuerza política del país con más de 3,6 millones de votos, lo que se traduce en 52 escaños.

En el caso de Canarias, el partido de ultraderecha logró los dos puestos a costa del descalabro de Ciudadanos en las Islas, donde la formación naranja perdió un total de 104.922 votos respecto a los comicios del 28 de abril. Vox ha superado al partido que hasta ayer lideraba Albert Rivera en los 88 municipios de las Islas. Y en tres de ellos, Betancuria (Fuerteventura), La Matanza de Acentejo (Tenerife) y San Miguel de Abona(Tenerife), ha conseguido imponerse a su mayor rival, el Partido Popular.

Ascenso en Las Palmas

La provincia de Las Palmas ha notado en mayor medida el ascenso de la extremaderecha. En parte porque en las islas orientales el partido logró superar a la coalición NC-CC en 23 municipios. En algunas localidades como Agüimes, donde el bloque Roque Aguayro-NC ha arrastrado siempre un importante número de votos, Vox pasó por encima de los nacionalistas. Lo mismo ocurrió en Santa Lucía, Telde o La Oliva.

Esto, unido a la masiva pérdida de votos de Ciudadanos, se tradujo en un mejor posicionamiento del partido de Abascal en el cómputo total de la provincia, donde Vox se impuso como la cuarta fuerza con el apoyo del 13,3% de los votantes (64.197 votos). En la provincia de Santa Cruz, los nacionalistas tuvieron mayor peso, por lo que Vox quedó como quinta fuerza logrando el apoyo del 11,53% de los participantes (53.298 papeletas).

Al analizar los resultados por Islas destaca que el mayor crecimiento se ha producido en Fuerteventura, donde Vox logró 5.522 papeletas y un 15,71% del apoyo. Allí se impuso como tercera fuerza superando a Podemos, nacionalistas y Ciudadanos. Esta posición la ocuparon además en el municipio de Antigua, Puerto del Rosario y Betancuria, localidades donde recibieron la mayor cantidad de papeletas.

La creciente popularidad de Vox en el Archipiélago es innegable. El partido ha conseguido colocarse como la tercera fuerza más votada en 18 municipios de las Islas, once en la provincia de Las Palmas y siete en Santa Cruz de Tenerife. Ingenio, San Bartolomé de Tirajana, Santa Lucía de Tirajana, Tejeda, Valsequillo y San Mateo son algunos de los ejemplos donde el partido se ha impuesto como la tercera formación con mayor número de apoyos. Lo mismo ocurrió en los municipios de Tías y Yaiza en Lanzarote. En Tenerife, Vox logró ser la tercera fuerza más votada en Adeje, Arona, Granadilla, El Rosario, San Miguel de Abona y Vilaflor de Chasna. Y en Puntagorda en La Palma.

El único municipio donde Vox superó aún más las expectativas y logró alcanzar la medalla de plata, fue en la Matanza de Acentejo, en la Isla de Tenerife.

El partido que lidera Abascal ha entrado en Canarias sorprendiendo, ni el cambio de última hora en el candidato ha logrado frenar el avance de la ultraderecha. Eso en un territorio que hasta abril alardeaba de no haber apoyado al partido en las urnas. En siete meses han logrado dos escaños.