La globalización y la digitalización son los caminos por los que habrá de transitar la economía del Archipiélago para ampliar su tamaño y expandirse por otros países. También son herramientas claves para que el capital extranjero se convenza de la conveniencia de instalarse en las Islas. Ahora bien, ¿y qué se consigue si luego no hay personas formadas para ocupar los puestos de trabajo que se creen? La consejera de Economía, Empleo y Conocimiento del Gobierno de Canarias, Carolina Darias, señaló la necesidad de generar movimientos precisos en el ámbito de la formación para desterrar la necesidad de importar los recursos humanos.

Hasta el punto de establecer políticas activas de empleo "casi a la carta, detalló Darias, para reintegrar al mercado laboral a los colectivos que tienen más difícil salir del paro. Por ejemplo, parados de larga duración que pasaron toda su vida laboral desarrollando labores que han caído en desuso y ahora no tienen aptitudes para encontrar otro empleo. A ellos se unen colectivos como los menores de 25 años y las mujeres, cuyas tasas de desempleo superan la ya de por sí alta media existente en las Islas.

En este mismo contexto, puso como ejemplo el de los jóvenes que abandonaron de manera temprana la formación académica y que volverán a contar con una oportunidad de formarse a través del Plan Integral de Empleo de Canarias (PIEC).

"El mercado laboral es altamente ineficiente, la oferta y la demanda no se ajustan, por lo que necesitamos políticas activas de empleo", expuso Carolina Darias. Esas acciones tienen como objetivo dotar a los trabajadores isleños de las capacidades necesarias para cubrir las necesidades que surgen al calor de la economía circular, verde o azul.

La consejera incidió en los 273 millones de euros de presupuesto con que contará el año próximo el Servicio Canario de Empleo (SCE), la mayor cuantía "desde 2012", detalló. El incremento es de 38,7 millones de euros con respecto al ejercicio en curso, o del 16,5% si se toma en términos relativos.

Darias no ocultó que el crecimiento de la población activa registrado en los últimos años es uno de los factores que impiden reducir la tasa de desempleo en la comunidad autónoma, si bien matizó que ese movimiento no es un mal síntoma, ya que significa que las Islas "son polo de atracción". En otras palabras, quienes buscan empleo se dirigen a los lugares en los que estiman que pueden lograr dicho objetivo.

En línea con lo expuesto por el presidente canario, Ángel Víctor Torres, en su discurso de investidura, Darias destacó la necesidad de que el crecimiento promovido por su departamento sea "equitativo, justo y sostenible".

Incluso la propia financiación pública sufrirá ajustes. Así sucederá, por ejemplo, con el Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan). Esta herramienta, dotada con la suma que hasta hace unos años las Islas debían enviar a Madrid para satisfacer la pérdida de recaudación de las arcas estatales por la desaparición del Impuesto sobre el Tráfico de Empresas (ITE), se vuelca en la actualidad en la financiación de pequeñas obras de infraestructuras demandadas por cabildos y ayuntamientos.

La voluntad de la consejera es incrementar su eficacia en el contexto de "especialización" que se busca para la economía del Archipiélago.

En varias ocasiones a lo largo de su discurso, Darias San Sebastián, insistió en que la estrategia de activación del empleo que pretende no tendrá una implantación vertical con la cúspide en su despacho, sino que contará con "participación directa de los agentes económicos y sociales".

De ese modo, expresó la necesidad de dotar de mayor valor a la negociación. Ahora bien, expuso que algunos integrantes de los agentes sociales ya en retirada le hacen llegar la inexistencia de cuadros capaces de tomar el relevo en el ámbito de la negociación. Al respecto, abogó por la creación de una escuela con el diálogo como asignatura única.