La unanimidad en el actual contexto de bipolarización política que vive España resulta casi imposible de alcanzar. Ha tenido que ser Marruecos quien ponga a todos los partidos de acuerdo a la hora de oponerse sin fisuras a la apropiación de las aguas situadas al suroeste del Archipiélago. Ayer, el Parlamento aluí aprobó con el apoyo unánime de sus 165 diputados dos leyes que amplían la delimitación de sus aguas frente a España y Mauritania, y declaran jurídicamente su soberanía sobre las aguas territoriales del Sáhara Occidental. Todas las formaciones políticas no sólo en las Islas, sino también en el ámbito estatal, cerraron filas para defender el espacio marítimo perteneciente a Canarias y, por lo tanto, a España. Además, la oposición aprovechó para criticar la falta de contundencia del Gobierno de Pedro Sánchez a la hora de frenar la ampliación unilateral de los límites marítimos del Reino vecino y reclamó actuaciones en este sentido a la nueva ministra de Exteriores, Arancha González Laya, que mañana viajará a Marruecos para reunirse con su homólogo, Nasser Bourita, con quien piensa abordar este asunto.
Precisamente, fuentes del Ministerio español restaron ayer importancia a estas leyes ya aprobadas al asegurar que Marruecos asume que las aguas colindantes deben delimitarse de mutuo acuerdo. "España y Marruecos tienen pendiente la delimitación de todos los espacios marítimos y están de acuerdo en que, cuando se haga, será mediante acuerdo entre ambos estados y respetando la Convención de Derecho de Mar y el Derecho Internacional", aseguraron desde Exteriores, donde dieron por hecho que Marruecos coincide en que en materia de delimitación marítima no caben los hechos consumados ni las situaciones de hecho unilaterales.
Reacción unánime en las Islas
Unas afirmaciones que van en sintonía con lo que el ministro de Exteriores marroquí aseguró ayer en la Cámara de Representantes, donde explicó que su Gobierno "no tiene ninguna intención de imponer hechos consumados" a España en la delimitación de sus aguas territoriales. Bourita recordó que, además de ser un país vecino, España es un socio estratégico y aliado de confianza, por lo que aclaró que la definición del espacio marítimo es "negociable". De todas formas, Bourita añadió que a pesar de estar abierto al diálogo, Marruecos "se aferrará a su soberanía" y al marco de sus derechos estratégicos.
A pesar de los intentos de ambos países por rebajar la tensión, en Canarias las alarmas saltaron desde que el pasado mes de diciembre se aprobaron estas normativas en la Cámara Baja marroquí. El presidente del Ejecutivo regional, Ángel Víctor Torres, volvió a reiterar ayer tras la inauguración del pabellón de las Islas en Fitur que si Marruecos toca "un solo milímetro" de las aguas del Archipiélago "tendrá enfrente a los gobiernos central y autonómico". Torres destacó el consenso unánime compartido con el resto de partidos a la hora de adoptar una resolución en el Parlamento regional. Antes de ello, el Ejecutivo formado por el pacto de las flores tiene previsto aprobar hoy una declaración institucional en contra de la decisión marroquí.
En la misma línea se mostró uno de los integrantes del cuatripartito, el líder de la Agrupación Socialista Gomera, Casimiro Curbelo, que aseguró que la defensa de las aguas canarias se trata de "un tema de vital importancia que tienen que liderar el Gobierno de Pedro Sánchez y el Ejecutivo canario". Asimismo, el coordinador territorial de Nueva Canarias, Luis Campos, reclamó a la ministra de Exteriores que haga entender a las autoridades del país norteafricano que con Canarias "no se juega ni puede utilizarla" según sus intereses.
La oposición se sumó al rechazo a la actitud de Marruecos, pero también criticó la opacidad y pasividad del Gobierno central. El diputado del PP por Las Palmas, Guillermo Mariscal, lamentó que la próxima visita de la ministra se produzca "después de la aprobación de las leyes", pues "compromete la defensa de los intereses canarios". Una opinión que compartió Ciudadanos, que argumentó que González Laya debió haber dado explicaciones en España y haber escuchado a los grupos parlamentarios antes de partir. Por su parte, el secretario general de CC, José Miguel Barragán, instó al Gobierno de España a que "abra de forma inmediata una vía diplomática con el Reino de Marruecos para que desista de sus ínfulas soberanistas sobre el mar que rodea a las Islas".
Un conflicto que llega a las Cortes y los ayuntamientos
- Partido Popular y Coalición Canaria pretenden que la defensa de las aguas canarias se extienda por el mayor número posible de instituciones. De ahí que el PP registrara ayer mismo una petición de comparecencia de la ministra de Exteriores en el Congreso de los Diputados. "Queremos que se posicione claramente y con contundencia en la defensa del territorio nacional", explicó el secretario general del grupo popular, Guillermo Mariscal. Asimismo, el PP realizará una batería de preguntas para conocer si el Gobierno piensa tomar medidas o plantear alguna queja ante la actitud del Reino alauí. También los senadores de este partido por Canarias y por la isla de Gran Canaria, Asier Antona y Sergio Ramos, respectivamente, registraron una iniciativa en la Cámara Alta para que el Ejecutivo central aporte información. "No puede seguir postergando más su respuesta, que debe ser directa e inmediata para garantizar sin ningún tipo de titubeo los derechos de los españoles y hacer cumplir la legislación internacional", criticó Antona. Por su parte, Coalición Canaria-PNC comenzó a registrar también ayer en los 88 municipios de Canarias y en los siete cabildos una moción en defensa del mar canario. El secretario general de CC espera que todas las corporaciones, así como la sociedad civil, respalden el contenido de este texto, que recoge la exigencia al Gobierno del Estado de que, de forma inmediata, eleve una protesta ante la Naciones Unidas contra la aprobación marroquí de "una delimitación de su frontera marítima que se apropia de unas aguas jurisdiccionales que no le pertenecen", aseguró Barragán. Precisamente, la Federación Canaria de Islas (Fecai), que reúne a los presidentes de los siete cabildos insulares, mostró ayer su respaldo a los gobiernos de Canarias y de España en todas las medidas que adopten para evitar cualquier alteración unilateral de las delimitaciones marítimas fijadas actualmente. A. R. P.
