Un grupo de 60 inmigrantes que había llegado a Canarias en patera o cayuco ha sido devueltos este lunes por las autoridades españolas en un avión rumbo a Mauritania, de donde habían partido hacia las islas, según ha informado el delegado del Gobierno, Juan Salvador León (PSOE).

El grupo estaba formado por 55 ciudadanos de Mali, tres de Senegal y uno de Mauritania y "son personas susceptibles de repatriación porque entran ilegalmente en España", ha dicho León.

El Servicio Jesuita de Migraciones denunció el viernes pasado que España puede estar vulnerando la legalidad internacional al devolver a ciudadanos malienses a Mauritania, ya que esas personas luego son expulsadas a su país, que está considerada zona en conflicto.

"Son seres humanos que se lanzan al mar buscando una forma de vida", ha admitido el delegado del Gobierno en Canarias, pero "desgraciadamente no tenemos capacidad para acogerlos a todos". "Todas las devoluciones se hacen legalmente", ha insistido el delegado del Gobierno, antes de recordar que Mauritania y España tienen un acuerdo de colaboración por el que este país africano acoge a todos los inmigrantes que salen desde sus costas.

Respecto a las protestas en cuanto a que los inmigrantes procedentes de Mali son devueltos a un país que está en guerra, el delegado del Gobierno ha destacado que "otros vienen huyendo del hambre" y ha subrayado que aquellos que son susceptibles de solicitar refugio pueden hacerlo, cosa que no lo le consta que hayan hecho los últimos expulsados a Mauritania.

En cuanto al campamento que el Ejército de Tierra había desplegado en Fuerteventura para acoger a los inmigrantes que llegan a Canarias, pero no se ha llegado a utilizar, León ha dicho que las tiendas se montaban en previsión de lo que podía ocurrir.

"Estamos desbordados por falta de espacios para alojar a los inmigrantes como se merecen" y probablemente las tiendas se queden en la isla por si fueran necesarias para alojar a los inmigrantes que puedan llegar, ha precisado.

El Centro de Internamiento de Extranjeros de Barranco Seco (Gran Canaria) tiene una ocupación del 75 por ciento, mientras que el de Hoya Fría (Tenerife) está al 77 por ciento, ha dicho el delegado del Gobierno.