El PP de Gran Canaria celebró ayer la cuarta edición de sus Populares de Leyenda, un acto en el que el partido homenajea a quienes se han batido el cobre en la sombra durante décadas. Los 21 elegidos en esta ocasión, con dedicatoria especial para la vallesequense Pepita Viera, se llevaron sus correspondientes aplausos, pero ninguno tan sonoro, como el cosechado por el expresidente de la formación política en las Islas José Manuel Soria.

El evento se inició con notable retraso, suceso extraño entre las huestes conservadoras. El presidente insular del PP, Poli Suárez, pidió disculpas por haber superado la hora prevista para el arranque y explicó que uno de los agasajados se vio atrapado en un atasco que lo retuvo durante dos horas en la carretera. Soria prácticamente no tuvo que esperar.

El exministro también llegó tarde, cuando las luces del auditorio aún estaban encendidas y lo hizo discretamente o, al menos, lo intentó. Desde que se le detectó en el patio de butacas buscando acomodo, comenzaron a batirse algunas palmas que alertaban de su presencia a quienes aún no la habían notado.

En ese punto se agotó la discreción, si es que alguna vez se persiguió. La misma ubicación -primera fila y junto al pasillo-, las continuas alusiones nominales y hasta el requerimiento de su presencia en el escenario en el momento en que se terminaron de repartir los galardones impiden concluir que José Manuel Soria no fue ayer uno de los grandes protagonistas de la cita.

Por supuesto, las palmas terminaron por echar humo cuando el ex jefe de filas se sumó a Poli Suárez, la presidenta autonómica del PP, Australia Navarro, y la vicepresidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor.

Antes de llegar a ese momento, los 21 homenajeados fueron pasando, uno por uno, por el proscenio para recibir el cariñoso reconocimiento de sus amigos, compañeros de partido y familiares. "En dos horas se agotaron las entradas", señaló Suárez para dejar constancia del interés que este acto despierta año tras año.

En ocasiones anteriores fueron protagonistas de este día José Macías o María Eugenia Márquez, por ejemplo, al recibir el premio especial. Ayer le tocó a Pepita Viera, "una cazatalentos", en palabras del presidente insular de los populares, porque fue ella la que convenció a Dámaso Arencibia de que se enrolara en el partido. Es el alcalde de Valleseco desde el año 2007, tras encadenar cuatro mayorías absolutas consecutivas; con el partido de subida, de bajada, deprimido o exultante.

Viera y el resto de los verdaderos protagonistas del acto "son personas y leales. Son nuestros maestros y un ejemplo de política con mayúsculas", afirmó Poli Suárez, que tenía guardada una sorpresa. Repartidos todos los galardones, reclamó la presencia de "una amiga especial del PP de Gran Canaria", que fue como describió a Ana Pastor. "No me imaginaba que me iban a dar algo que no merezco", aseguró esta abrumada comparando la labor que ha desarrollado en el partido con la del resto de premiados.

Quizá por ello o porque lo tenía preparado, quiso corresponder relatando la emoción que le había producido poder subir minutos antes hasta el camarín de la patrona de la Islas. "Viva la Virgen del Pino", exclamó provocando el aplauso general.

Su discurso fue el que se mantuvo más templado en todo momento. "Somos un partido moderado que no quiere dividir, sino unir a los españoles" y "respetamos a los que no piensan como nosotros", afirmó. En contraposición a lo que, en su opinión, hacen los partidos que están en el Gobierno de España -PSOE y Podemos-, a los que evitó mencionar por su nombre.

También en la defensa de las mujeres consideró que han sido los populares los que más han trabajado, "aunque ahora otros tomen para sí la bandera del feminismo". En la formación conservadora, creen "en la libertad" y están convencidos de que todos los españoles deben ser iguales, es decir, "los canarios tienen que ser ciudadanos de primera".

Fue ministra de Fomento y en estos días en los que se habla largo y tendido de la movilidad y el descuento del 75% para el traslado de los residentes a la Península, se mojó en favor de garantizar la movilidad de los ciudadanos de las Islas.

Durante su etapa al frente del ministerio se produjeron algunos roces al llegarse a plantear la existencia de un precio máximo a partir del cual se abonaría el resto del precio sin ningún tipo de subvención. Fue la época en la que comenzó a exigirse a los ciudadanos de las Islas viajar con un certificado de residencia que demostrara su condición. Y fue también cuando se conoció que algunas aerolíneas hacían trampas para engordar sus cuentas de resultados con los impuestos de todos los españoles.

A los agasajados les agradeció estar "siempre" volcados con el partido. "Incluso cuando metemos la pata también están ahí", recalcó; labor sorda y poco lucida que permite construir sobre ella "este gran partido".

También Australia Navarro se deshizo en halagos. "Ustedes, queridos homenajeados, representan las raíces, los cimientos de nuestra organización, durante años y décadas", expuso la presidenta del PP en el Archipiélago. Sobre todo por protagonizar una "vida de entrega, de servicio, de generosidad desbordante, de mucha responsabilidad, ayuda y comprensión", enumeró, por lo que les consideró "ejemplos de entrega desinteresada a la familia y a los vecinos, dando lo mejor de sí mismos".

La otra parte de su discurso tuvo una fuerte carga política. Repasó todas las claves del enfrentamiento que, como oposición, los populares mantienen "con los gobiernos de izquierda de las Islas y de la nación". De nuevo PSOE y Podemos, y también sin nombrarlos, "están demostrando muy poco respeto" por las "leyes y especialmente por la Constitución".

En resumen, según Navarro, los partidos aliados aquí -junto a Nueva Canarias y Agrupación Socialista Gomera- y en el ámbito estatal -en solitario- no respetan "a las familias ni a la libertad de los ciudadanos. Quienes nos gobiernan hoy quieren decirnos cómo debemos vivir, cómo debemos educar a nuestros hijos y qué debemos sentir y pensar", enfatizó.

Poli Suárez animó a todos a seguir el ejemplo de los Populares de Leyenda. Personas que, en sus palabras, han mantenido "una trayectoria intachable que deja en evidencia" a quienes meten a todos los militante del PP "en un mismo saco de basura" y les "señalan y condenan sin piedad", aunque los errores solo los hayan cometido "algunos. Despotrican, nos insultan e incluso nos maldicen de manera inusitada por cuestiones de ideología", afirmó.