El PSOE y Sí Podemos en el Parlamento canario han apoyado sin matices el cóctel celebrado por RTVC con sus empleados por el 20 aniversario de sus emisiones, pero NC y ASG mostraron su rechazo, al igual que la oposición de CC-PNC, PP y Cs, que denunciaron el pago de una fiesta con dinero público.

El administrador único de RTVC, Francisco Moreno, que ha comparecido este miércoles en la Comisión de Control del ente a petición propia y de todos los grupos, ha justificado la iniciativa, pero también ha pedido disculpas por defraudar la confianza de muchos diputados y ha reconocido que se planteó poner su cargo a disposición del Parlamento ante las críticas recibidas.

"Quiero hacer autocrítica y reconocer los errores que haya podido cometer, pero espero que puedan entender las razones de este acto de comunicación interna, que se hizo con transparencia y sin secretismo", expuso Moreno, quien no entiende "la polvareda" que se formó.

El administrador del ente lamentó que un encuentro interno, el primero en veinte años, convocado para favorecer el conocimiento y la cohesión de una plantilla de 400 trabajadores dispersa en siete islas y hasta hace poco en ocho empresas distintas, se haya transformado en un "cóctel privado escandaloso", según "el relato" de algunos medios y grupos políticos.

Crear un clima laboral adecuado, cohesionar la plantilla, favorecer la comunicación interna y fomentar el sentimiento de pertenencia a un mismo grupo fueron las razones de esta iniciativa.

El evento se celebró el 13 de diciembre de 2019 en el acuario Poema del Mar, en Las Palmas de Gran Canaria, que se alquiló por 14.000 euros de los que 7.000 fueron descontados a cambio de compensaciones futuras en forma de eventos audiovisuales, no de publicidad.

También hubo un acuerdo con Binter para el desplazamiento de 123 trabajadores, que se hospedaron en más de 70 habitaciones de hotel, y se ofreció un "cóctel cena" para 280 personas.

El coste desembolsado fue de 22.444 euros, descontados los 7.000 euros por la rebaja aplicada por el acuario, detalló Moreno, y subrayó que para él es "una inversión" de 54 euros por trabajador que redunda en mejorar "el clima laboral".

Moreno se sintió satisfecho por este encuentro, hasta que vio "la desmesurada y negativa trascendencia" que tuvo entre los responsables políticos, a quienes reconoció que tienen derecho a sentirse defraudados.

Le faltó haber explicado mejor este encuentro, un asunto que para él es poco trascendente en comparación con los retos organizativos, tecnológicos estructurales y de programación de RTVC.

La celebración del cóctel fue defendida únicamente por PSOE y Sí Podemos, mientras que los otros dos socios del Gobierno, NC y ASG, lo consideraron un error, si bien valoraron las disculpas del administrador único y entendieron las buenas intenciones que le llevaron a convocarlo.

José Alberto Díaz-Estébanez, de CC-PNC, consideró muy imaginativo llamar "encuentro de comunicación" a "un fiestón para 300 personas" con cena, barra libre, traslados en avión y alojamiento en hoteles, todo sufragado por los contribuyentes.

"Le creo cuando dice que lo hace con la mejor intención, pero no reconoce el desafortunado error, solo le molesta la repercusión que ha tenido", le reprochó Díaz-Estébanez.

La diputada del PP Luz Reverón denunció la utilización de dinero público para "un ágape privado", una decisión "irresponsable" y ajena a sus funciones de administrador único, cuando además hay una normativa del Gobierno de Canarias que prohíbe cualquier tipo de cóctel o de ágape, encuentros o celebraciones en recintos privados.

Para la representante de Ciudadanos, Vidina Espino, se gastó dinero público en un cóctel privado con el que el administrador buscaba "ganarse el favor" de los empleados, y para ello se comprometieron "contraprestaciones" a empresas privadas que "no son gratis", en referencia al acuerdo con Poema del Mar.

Si los 34 entes públicos o las consejerías de Sanidad y Educación celebraran encuentros similares el gasto sería inasumible, advirtió.

En cambio, Yolanda Mendoza, del PSOE, consideró que solo se trató, "una inversión en recursos humanos", un acto de confraternización y de atención a trabajadores que no se conocían y que tienen derecho a un reconocimiento, a conformar una plantilla cohesionada.

Francisco Déniz, de Sí Podemos, consideró que se trató de una buena iniciativa para el reconocimiento y la cohesión de una plantilla que emprende ahora el camino de recuperar la calidad y el rigor de la televisión pública.

Luis Campos, de Nueva Canarias, agradeció las explicaciones, pero señaló que, por muy buena que sea la intención, el evento no está justificado porque en RTVC hay que aplicar los mismos parámetros de austeridad que al resto de entes públicos y departamento de la administración autonómica.

"Ya nos gustaría que todos los trabajadores del sector público pudieran reunirse, pero tendríamos un problema presupuestario", lamentó.

Melodie Mendoza, de ASG, también aceptó las disculpas de Moreno y sus buenas intenciones, pero añadió que una empresa pública debe actuar con austeridad, y por ello no era necesaria "la magnitud de ese evento" ni el gasto que se produjo.