La Dirección del Área de Salud de La Palma del Servicio Canario de la Salud realiza una toma de muestras para el diagnóstico del coronavirus de alrededor de 30 al día entre la población de la Isla, lo que representa un total que rondaría las 800 desde que comenzó la crisis de Covid-19, por el servicio de Coronhado, a las que hay que sumar las 1500 realizadas en las residencias de mayores de la Isla.

Este servicio se realiza de manera descentralizada en el Centro de Coordinación de Coronavirus, una instalación ubicada en el acuartelamiento El Fuerte, para garantizar la intimidad de los pacientes y evitar que las personas que acudan a hacerse la prueba estén en contacto con pacientes y trabajadores del centro hospitalario.

En cuanto a las llamadas telefónicas, desde el Hospital se realizan actualmente una media de 80 diarias, tanto para dar los resultados de las pruebas como para informar a los familiares sobre el estado de los pacientes ingresados. Estos datos llegaron a alcanzar las 100 llamadas diarias durante las dos primeras semanas de la crisis, cuando se realizó el estudio epidemiológico en la Isla.

Desde el pasado mes de febrero, cuando se activó este dispositivo para dar respuesta a la pandemia de COVID-19, solamente ocho pacientes que acudieron a este dispositivo requirieron de derivación al servicio de Urgencias del Hospital General de La Palma. Además, únicamente se realizaron 10 analíticas de control totales y se solicitaron 25 radiografías, lo que evidencia la optimización de recursos llevada a cabo por la Dirección del Área de Salud y la gerencia de los servicios sanitarios.

Por su parte, y de manera coordinada entre los trabajadores de Atención Primaria y Atención Especializada, diariamente se realiza el seguimiento de los pacientes con Covid-19 que siguen su tratamiento en su domicilio en régimen de aislamiento.

Control en residencias de mayores

Según el protocolo establecido por la Dirección General de Salud Pública del SCS, en La Palma se ha realizado un estudio que cuenta con alrededor de 1500 test de muestreo entre usuarios y trabajadores de las residencias de mayores de la Isla para realizar un cribado de casos de coronavirus Covid-19 y conocer a realidad de estos centros.