Comisiones Obreras considera que la educación en Canarias necesita "una gestión acertada, eficaz y rápida, negociada con las organizaciones sindicales representantes del profesorado canario", después de que el departamento cuente con la tercera consejera en un mes.

En un comunicado, el sindicato da la bienvenida a Manuela de Armas al frente del departamento, en donde le espera en los próximos días una tarea "ardua y densa" porque "es el momento de abordar decisiones clave que sirvan para planificar el próximo curso de manera acertada".

"Para superar estos difíciles retos que tiene por delante la educación canaria son imprescindibles el diálogo, la participación, la negociación colectiva y el consenso", dice CCOO, que pide que se paralice la constitución de las seis comisiones de trabajo para la planificación del próximo curso que excluyen "a los representantes del profesorado y al resto de miembros de la comunidad educativa".

CCOO pide un plan extraordinario de inversión en educación en Canarias para el próximo curso por 492 millones de euros que cubra aumento de plantillas, disminución de ratios, mejora de infraestructuras de centros, recursos digitales, formación y actualización del profesorado en competencia digital y educación inclusiva y planes de compensación educativa para evitar brechas socioeconómicas.

Entre sus demandas está un plan de empleo y de atención a las necesidades y condiciones laborales del personal de centros educativos.

De este modo, deben dotarse los servicios de prevención del departamento de educación, reforzar las plantillas de profesorado, personal de administración y del personal no docente, establecer planes de refuerzo de los servicios públicos y garantizar la cobertura de todas las sustituciones.

Evitar el bloqueo en la contratación de profesorado interino, regular las nuevas condiciones laborales del personal docente derivadas de la educación a distancia y la formación necesaria para hacer frente a este nuevo modelo educativo son otras de las demandas sindicales.

Para CCOO es preciso reducir la interinidad, facilitar la formación inicial y permanente del profesorado en inclusión y competencia digital y aumentar el número de orientadoras y de equipos de orientación.

CCOO plantea también a Manuela de Armas un "plan de choque educativo" para reducir las ratios a 15 personas por aula como máximo, poner en marcha programas de refuerzo, apoyo educativo y acompañamiento personalizado y avanzar hacia la equidad en la educación.

Se requiere acondicionar espacios, una organización curricular más transversal, coordinación y trabajo en equipo del profesorado reduciendo sus horas lectivas y eliminar la burocracia excesiva.

El sindicato plantea reducir el currículum seleccionando lo esencial y relevante, reducir la intensidad de la jornada escolar, ampliar la participación y colaboración con las familias e incrementar las horas dedicadas a tutorías.

También plantea una dirección de centros más democrática y participativa, intensificar el papel de apoyo, seguimiento y asesoramiento de la inspección educativa e introducir otras fórmulas para la formación en centros de trabajo (FCT) para los ciclos formativos de Formación Profesional.

Otro de sus planteamiento es un plan de actuación social, con la incorporación de otros perfiles profesionales que colaboren con la comunidad educativa, políticas sociales de apoyo a la infancia y la juventud, colaboración con los servicios sociales de las administraciones, canalización de ayudas a las familias y al alumnado y utilización de espacios ajenos a centros educativos para reforzar la falta de instalaciones.