El Rey llamó ayer a peninsulares, europeos "y los que hagan falta" a visitar las Islas para reactivar el sector turístico del Archipiélago. Durante su recorrido por diferentes puntos de Canarias para "simbolizar" el protagonismo de la región en la crisis sanitaria del Covid-19, la Casa Real puso de relieve que España ya está "en marcha" tras el fin del estado de alarma. El Archipiélago fue la primera comunidad que reportó un caso de coronavirus y ahora es, dada su dependencia al turismo, una de las autonomías con mayores dificultades para salir adelante. Felipe VI y doña Letizia escogieron las Islas como primera parada de su gira por todo el país en la denominada nueva normalidad para hablar "de lo más urgente y de los más necesario para España y para toda Canarias: el turismo". "Ya estamos en marcha, abriéndonos, recuperando por lo menos el ánimo y enfrentándonos a una situación muy difícil, a una cuesta arriba muy empinada para empezar a ver la recuperación de verdad en la economía", sostuvo el Rey en una recepción celebrada en el salón Palmeras del Santa Catalina Royal Hideaway Hotel en la que estuvieron presentes empresarios del sector turístico y del tejido empresarial isleño, además de representantes de los cabildos, municipios turísticos, el presidente del Parlamento de Canarias, Gustavo Matos; el presidente del Ejecutivo regional, Ángel Víctor Torres, y la ministra canaria de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, entre otros.

La fugaz estancia de los Reyes en Canarias arrancó con un guiño a la celebración del centenario de la muerte del escritor, dramaturgo, novelista y cronista canario Benito Pérez Galdós. Tras una rápida visita a su Casa Museo, enclavada en la zona de Triana de la capital grancanaria, Felipe VI y doña Letizia se trasladaron al Paseo de las Canteras para después acudir a la recepción con los representantes turísticos y políticos de las Islas. Tras almorzar, los monarcas pusieron rumbo a Tenerife, donde comprobaron en el aeropuerto Reina Sofía las medidas de seguridad sanitaria adoptadas y los retos a los que se enfrenta el sector primario con las visitas a la finca El Confital y a la planta de selección y empaquetado Las Moradas.

Levantar el ánimo

El Archipiélago, por su alta especialización en el turismo -sector que genera el 40% de los empleos y aporta un 35% del Producto Interior Bruto (PIB) de la región- es una de las comunidades más afectadas por el parón económico al que obligó la pandemia del coronavirus. Felipe VI y doña Letizia mostraron en el encuentro con empresarios turísticos su apoyo al sector, que en los últimos días ha mostrado su malestar con el Gobierno central por no incluir en el plan de apoyo a la actividad la prolongación de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE). Una extensión que los hoteleros quieren que llegue hasta fin de año y no solo hasta septiembre, como se ha planteado, por la atemporalidad del turismo en las Islas.

El Rey aludió a su paseo por la playa de Las Canteras, que no pudo probar "de verdad", para hacer un llamamiento a los turistas peninsulares, europeos "y los que hagan falta" a visitar las Islas. Su objetivo fue mostrar la imagen en la que España afronta su recuperación. "Tenemos que levantar el ánimo, con las ayudas que sean necesarias, con la solidaridad europea y empezar a levantar de nuevo el país", subrayó, tras la "triple crisis" económica, social y sanitaria que ha azotado a España.

José María Mañaricua, presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), habló ante los monarcas en nombre del sector turístico de las Islas. Y lo hizo para reiterar en la necesidad de prorrogar los ERTE al menos hasta fin de año para garantizar la supervivencia del sector y su empleo, para reclamar una potenciación de la conectividad de la región y para lograr incentivos a las vacaciones de los españoles en el territorio nacional.

"El sector turístico no es ni estacional, ni precario ni de bajo valor añadido", apuntó además como respuesta a las palabras que el ministro de Consumo, Alberto Garzón, lanzó durante una comparecencia en el Congreso de los Diputados en mayo y con las que se refirió al turismo en el sentido contrario. El representante de los hoteleros recalcó que Canarias posee un sector moderno, "líder a nivel mundial" en instalaciones y servicios.

Si bien recordó que el turismo constituye desde 1970 el "motor económico" de España y fue el sector que tiró de la recuperación del país en la pasada crisis, Mañaricua indicó que en esta ocasión necesita aliento. Más aún en Canarias al tratarse de un territorio ultraperiférico y fragmentado, situado a más de 1.500 kilómetros del continente y a más de 3.000 de sus principales emisores de turistas. El líder de la FEHT añadió que los hoteleros canarios abrirán las puertas de sus establecimientos este verano " a pérdidas", pues los asientos disponibles para este verano hacen inviable el negocio turístico. "Esa es nuestra contribución a la reactivación económica de España y a la supervivencia del destino", apuntaló.

El sector, que destacó su compromiso con el desarrollo sostenible, el patrimonio, el paisaje y la sociedad, también hizo hincapié en su protagonismo en el empleo. Mañaricua explicó que el clima del Archipiélago permite a las Islas tener abiertos los alojamientos turísticos durante todo el año y que al menos el 60% de los empleos que generan son indefinidos gracias a los acuerdos entre patronales y sindicatos. Precisamente el secretario general de CCOO en Canarias, Inocencio González, mostró su preocupación por el ritmo de recuperación que presente el sector. El 80% de las personas afectadas por un ERTE aún no han regresado su puesto de trabajo, lo que convierte a las Islas en la segunda región, solo por detrás de Baleares, con la tasa de incorporación más baja del país.

El sindicalista apuntó que hasta el último momento se negociará la prórroga de los ERTE. No solo para que se extiendan hasta septiembre, sino también para que se incluya alguna cláusula específica en la que se contemple su prolongación hasta final de año. El presidente del Ejecutivo regional, Ángel Víctor Torres, también insistió en la necesidad de que esta petición se cristalice para apuntalar la recuperación económica de las Islas. "Canarias debe tener una prórroga específica porque nuestros meses más importantes vienen después de septiembre y seguirá negociándose".

Torres, que agradeció al impulso de los Reyes al turismo en la nueva normalidad y el apoyo mostrado en acontecimientos como los de los incendios forestales del verano pasado, la quiebra de Thomas Cook o la tormenta de calima de este año, esgrimió que "hasta el último momento [es muy probable que se convoque un Consejo de Ministros para este viernes en el que se tratará este asunto] se seguirá negociando la mejor respuesta". "Es una herramienta fundamental", aseguró, que "da esperanza" a los afectados por los mismos.

El presidente canario confió, de igual modo, en el buen comportamiento de la población para evitar que se produzcan retrocesos en el desconfinamiento aplicado durante las últimas semanas. Torres expuso la importancia de mantener la exigencia con las medidas de higiene, con el uso de mascarillas y con el respeto al distanciamiento social para evitar los rebrotes que se han producido en algunos puntos del país y en otros estados europeos. Apuntó, asimismo, que la apertura al turismo internacional, que ha comenzado ya con la operación de algunos vuelos procedentes de destinos extranjeros, debe realizarse con las mayores garantías sanitarias. Torres insistió, a su vez, en la necesidad de "mover" el sector turístico dado que el 60% de la población canaria vive directa o indirectamente de esta actividad.

El presidente de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), Agustín Manrique de Lara, apostó, por su parte, por un manejo eficiente y eficaz de la situación actual para que el sector turístico pueda vivir "un invierno cercano a lo normal, razonable y sostener una parte del empleo". La visita de los Reyes a Canarias muestra, a su juicio, el apoyo que la región siempre recibe de la Casa Real, pero también las "enormes dificultades" por las que atraviesa el Archipiélago para volver a alzar el vuelo. Recuperar la marca Canarias y con ella la marca España es uno de los objetivos prioritarios a los que apunta el líder de la patronal y al que también responde, indicó, la visita a las Islas de los monarcas.

El presidente de presidente de la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) y de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat), Jorge Marichal, recordó también que la Casa Real fue una de las primeras instituciones en ponerse en contacto con el sector turístico. A principios de abril los Reyes mantuvieron un encuentro telemático con representantes de este segmento, por lo que agradeció de nuevo su apoyo y, en concreto, su visita a las Islas como primer destino de su gira por el país por la imagen de destino seguro que proyecta de la región.

Marichal, que reiteró también la importancia de que se prolonguen los ERTE "de una forma que le sirva al sector", señaló el "porvenir bastante dificultoso" que se avecina. Este segmento de actividad calcula, no en vano, pérdidas de 83.000 millones de euros para este año. La articulación de medidas para incentivar la demanda y la recuperación son fundamentales para el sector. El presidente de la Cehat y Ashotel garantizó, por ello, que la hostelería ha adoptado los protocolos necesarios para reforzar la seguridad sanitaria. "En ese eslabón de la cadena turística no vamos a tener problemas", aseguró.

En el encuentro también estuvo presente la vicepresidenta de la Asociación de Municipios turísticos de Canarias y alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, quien trasladó a los monarcas la repercusión económica del "cero turístico" de los últimos meses y la problemática a la que se enfrentan las administraciones locales como primer "muro de contención" ante esta crisis. Bueno expuso que muchos ayuntamientos no aguantarán más de dos meses así, por lo que pidió al Gobierno central claridad sobre la posibilidad de utilizar los remanentes y el superávit para hacer frente a esta situación.