Cuenta atrás virtual para la elaboración de los próximos Presupuestos Generales del Estado. El cierre teórico del curso político marca el punto de partida para un calendario que hace varios años que no se cumple. Pero el Gobierno central de coalición de PSOE y UP sí tiene intención de presentar en fecha y forma, antes del 30 de septiembre, el proyecto de ley de nuevas cuentas con las que superar de una vez las todavía en vigor de 2018, elaboradas durante el anterior Ejecutivo del PP y prorrogadas durante dos años consecutivos. Los ministerios ya trabajan en los borradores que compete a cada uno de ellos, aunque en espera de conocer los fondos europeos de ayuda a la crisis que finalmente recibirá España, y de poder cerrar los acuerdos parlamentarios que garanticen su aprobación. Canarias mira ya ese horizonte porque de esos nuevos Presupuestos estatales, que pretenden ser de emergencia y de respuesta a las consecuencias de la pandemia de la Covid 19, dependerá que se habiliten o no las medidas y partidas necesarias para el rescate económico y social que solicita al Gobierno central como respuesta a la crisis sin precedentes que el cierre turístico está provocando en el Archipiélago.

El objetivo de partida del Gobierno regional, y de la mayoría de partidos y sectores económicos canarios, es que el proyecto que se remita al Congreso incorpore los elementos centrales del Pacto para la Recuperación Económica y Social . Pero sobre todo que eso se convierta en algo financieramente tangible. Y es aquí donde las visiones y expectativas de cada una de las partes involucradas discrepa respecto de las posibilidades reales de que los nuevos Presupuestos alcancen a concretar, no ya un verdadero rescate de la economía isleña, sino la suficiente aportación de fondos para hacer cumplir el REF y el Estatuto en los términos en que ambos se reformaron hace casi dos años.

Los partidos canarios coinciden en resaltar que Canarias necesita, en el contexto de la crisis provocada por la pandemia sanitaria, no sólo garantizarse la financiación ordinaria que cada año hay que pelear frente a Madrid, sino "todo lo que necesitamos ahora para abordar la grave situación en que nos encontramos por la crisis turística". El objetivo no será fácil dado el agujero económico que todas las medidas de escudo social y de ayudas a las empresas puestas en marcha por el Ejecutivo de Pedro Sánchez desde marzo ha provocado en las arcas del Estado. Pero gracias a los nuevos márgenes de déficit y endeudamiento con los que se cuenta, y a la previsible llegada del 'maná' europeo de 140.000 millones de euros para la reconstrucción, se abre una expectativa acorde con las necesidades.

De momento, el Gobierno se mantiene a la espera de que se despejen algunas claves en el ámbito político para empezar a negociar los apoyos, en concreto a que pasen las elecciones vascas y gallegas del domingo para comprobar los puntos de partidos de algunas fuerzas claves como el PNV y Cs. La entrada de la formación naranja en el juego de posibles alianzas parlamentarias abre una doble vía de mayoría en el Congreso, la del grupo que apoyó la investidura de Sánchez, con ERC como apoyo imprescindible, o la de un eje transversal, y muy heterogénea, que incluiría los dos partidos del Gobierno (PSOE y Unidas Podemos) Cs, PNV, Más Madrid y Compromís, y los regionalistas PRC y Teruel Existe. Estos ocho partidos suman los 176 escaños de mayoría absoluta necesaria para rechazar las enmiendas de totalidad, aunque es muy previsible que en ese bloque también se encuadrare el diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, quien, sin embargo, se mantendrá a la espera de ver si el Gobierno asume de verdad el documento para la reconstrucción elaborado en Canarias y lo nutre de los fondos necesarios

Eso debería concretarse, según las dos formaciones nacionalistas canarias, NC y CC, en elementos como el uso del superávit por parte de las administraciones canarias, la prórroga de los ERTE turísticos canarios hasta a normalización de la actividad, la aprobación de un ambicioso plan turístico específico para las Islas, o la dotación de los convenios de infraestructuras que están pendientes de actualizar o aún sin transferir. También la llegada de un mayor porcentaje de fondos europeos en atención a la condición de región ultraperiférica, o la garantía de que se cubrirán las necesidades de lucha contra la pobreza y la exclusión social que la crisis está agudizando en las Islas.

Cifra de partida 'real'

El punto de partida económico rondaría los alrededor de 800 millones que se consignaron en los Presupuestos de 2018 prorrogados y aún en vigor, de ellos 281 de inversión directa del Estado, y cerca de 500 de transferencias a la Comunidad Autónoma para convenios de infraestructuras. Pero en ambos casos para que se concreten en inversión real y no ficticia, y no se repitan situaciones como que el Estado deje sin ejecutar la mitad de lo que le corresponde, que no traspase los fondos de los convenios, o que el Gobierno de Canarias deje sin movilizar el 40% del dinero presupuestado, como ha ocurrido en los últimos años, tal como publicaba ayer este periódico.

En el mismo registro de demandas que NC se mueve CC, cuya diputada en el Congreso, Ana Oramas, muestra su "predisposición a negociar" su apoyo a los Presupuestos independientemente del tipo de mayoría que se conforme para su aprobación. Oramas cree más factible en estos momentos un acuerdo del Gobierno con PNV y Cs, que con ERC, por la incertidumbre que el horizonte electoral en Cataluña provoca en la estrategia y actuación de los republicanos catalanes en el Congreso. Pero Oramas también se muestra escéptica sobre la predisposición del Ejecutivo a asumir la agenda de rescate de Canarias, y la de negociar seriamente con CC a ese respecto, a la vista del rechazo de que han sido objeto sus enmiendas a la comisión de reconstrucción del Congreso.

Según ella, "cada vez que se ha puesto sobre la mesa una negociación o una medida sobre Canarias desde el inicio de la crisis, el Gobierno de Sánchez se ha salido por la tangente, diciendo que sí pero no dando pasos concretos para ponerla en práctica, o dando largas o directamente rechazándolo". Oramas cree que el rechazo a sus propuesta en la comisión para la reconstrucción estatal, que siguen vivas para el pleno en el que se aprobarán definitivamente las conclusiones, anticipa de alguna manera la nula intención del Ejecutivo de pactar con CC, y que eso cuestiona al mismo tiempo la voluntad de Sánchez de dar cobertura presupuestaria al pacto que en el mismo sentido se ha firmado en Canarias.

El desarrollo de esa agenda canaria en los próximos presupuestos se podría estudiar en la comisión bilateral entre ambas administraciones pendiente de celebrar y a la que tanto NC como CC urgen.

Desde el PSOE se insiste en que el Gobierno central está dando claras muestras que hay un tratamiento singular para Canarias en los planes de reconstrucción y que eso tendrá correspondencia en las nuevas cuentas estatales.

El PP descarta que se puedan repetir las macrocifras canarias de los Presupuestos del 2018. Considera que "la ausencia de una verdadera interlocución" entre el Gobierno canario de Angel Víctor Torres y el de Sánchez, así como la ausencia de una ficha financiera, "convierte en irrelevante el pacto canario por la recuperación", y augura unos Presupuestos estatales que "no van a responder a lo que Canarias necesita en estos momentos, señala la diputada popular Ana Zurita.