Canarias pisa el acelerador y pone a disposición del Estado suelo para la construcción de casi un millar de viviendas para el alquiler social. El Ejecutivo regional, a través de la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Vivienda dirigida por el socialista Sebastián Franquis, ofreció ayer al Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, en manos de José Luis Ábalos, la disponibilidad de terrenos en distintos municipios de las Islas que abarcan una superficie total de 92.897,25 metros cuadrados, dando así inicio al procedimiento de cesión de suelo para el levantamiento de 997 nuevas casas en régimen de alquiler a precios asequibles a familias y trabajadores que, por sus ingresos, no pueden pagar rentas elevadas.
Fomento promueve el Plan 20.000 para la construcción de 20.000 viviendas destinadas al alquiler social de la mano de la Sociedad Pública de Suelo (Sepes). El objetivo de este programa es paliar y corregir los desajustes del mercado del alquiler, principalmente en las zonas del territorio nacional en los que existe una dificultad creciente para el acceso a la vivienda en este régimen por la escasez de oferta y por el incremento de precios. El Ejecutivo canario se había marcado como meta inicial la búsqueda de suelo para levantar unas 800 viviendas, pero finalmente ofrece espacio para casi mil. Los terrenos están distribuidos en cuatro islas: Gran Canaria, Tenerife, Fuerteventura y Lanzarote. Estas islas cuentan con zonas, según expone la Consejería de Vivienda en un comunicado, "especialmente tensionadas por los precios del alquiler".
Los municipios que se han sumado a este plan tras la petición realizada por el Gobierno de Canarias han sido Santa Cruz de Tenerife, donde se construirán 92 viviendas; Candelaria, que contará con 22; Guía de Isora, que tendrá otras 24; y San Miguel de Abona, con espacio para 76, en la isla de Tenerife. En Gran Canaria entran dentro del citado programa Las Palmas de Gran Canaria, que ofrece suelo para levantar 249 viviendas; Arucas, que podrá contar con 85; y Mogán, que tendrá otras 35. En Arrecife y Yaiza, municipios de Lanzarote, se construirán 96 y 226 hogares, respectivamente, mientras que en Puerto del Rosario y La Oliva, localidades de Fuerteventura, contarán, a su vez, con 24 y 68 viviendas para el alquiler social.
Todo los terrenos que están dispuesto a cederse son de propiedad municipal, salvo los 1.184 metros cuadrados para el levantamiento de 24 viviendas en Guía de Isora y los 1.283 y 2.872,81 metros cuadrados para la construcción de 24 y 68 casas en Puerto del Rosario y La Oliva, que pertenecen a la Comunidad Autónoma. La distribución de los casi 93.000 metros cuadrados por isla queda, en cualquier caso, de la siguiente forma: 11.918,44 metros cuadrados en Tenerife; 21.243,5 en Gran Canaria; 55.579,5 en Lanzarote y 4.155,81 en Fuerteventura.
El Plan 20.000 prevé contar con suelo público suficiente para ceder el derecho a la superficie para que las empresas privadas interesadas construyan las viviendas previstas con sus propios recursos a cambio de cobrar los alquileres durante un tiempo determinado. Sin embargo, al tener consideración de viviendas protegidas, esos alquileres estarán tasados y controlados en todo momento por la Administración, lo que garantiza, según recoge el comunicado, que los alquileres se ofrezcan a precios asequibles para las familias con menos rentas.
Franquis sostiene que para Canarias es primordial formar parte del Plan 20.000 del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. "De ahí el enorme esfuerzo que hemos realizado poniendo suelo a disposición para la construcción de 997 viviendas e impulsar el mercado del alquiler social en Canarias", mantiene, ya que se trata de, "un mercado clave para garantizar el derecho de acceso a la vivienda de las familias con menos ingresos, de los jóvenes y de personas en situaciones de vulnerabilidad". El titular de Vivienda considera, además, que el Archipiélago "necesita contar con un parque suficiente de vivienda asequible en régimen de alquiler".
Atendiendo a los criterios establecidos para formar parte del Plan 20.000, este millar de nuevas viviendas se edificarán principalmente en las ciudades más grandes que, además, son capitales insulares, y en los municipios turísticos de las Islas, núcleos urbanos que sus ayuntamientos han identificado como tensionados en cuanto a los precios del alquiler. Por eso se incluyen en el Plan 20.000 zonas turísticas como Corralejo (La Oliva), Playa Blanca (Yaiza), Puerto Rico (Mogán), San Miguel de Abona, Guía de Isora o Candelaria.
Con esta iniciativa no solo se busca que los ciudadanos con menos rentas tengan acceso a una vivienda, sino también que la población con menos recursos no tengan que desplazarse fuera de sus barrios o permanecer alejados de sus puestos de trabajo.
Este programa estatal se suma al nuevo Plan de Vivienda de Canarias que impulsa el Ejecutivo regional para la construcción y rehabilitación de más de 16.000 viviendas en toda Canarias en los próximos seis años. Con él se pretende ejecutar 664 millones de euros de inversión para el periodo 2020-2025.
Dicho plan contempla entre sus objetivos la construcción y puesta en servicio de 5.971 nuevas viviendas protegidas en régimen de alquiler (público o privado), la rehabilitación de otras 10.227 casas, y la tramitación de subvenciones que beneficiarán a 71.984 perceptores de ayudas al alquiler. La Consejería dirigida por Franquis estima que el nuevo Plan de Vivienda del Archipiélago contempla 88.195 actuaciones se seis años para el fomento y promoción de la vivienda dirigido a combatir la emergencia habitacional de las Islas y pensado para aliviar la situación de los más vulnerables.
