El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, el nacionalista José Manuel Bermúdez, exige al Estado la apertura urgente de una ruta aérea entre Canarias y la Península para el traslado de los migrantes que llegan a las costas del Archipiélago. El regidor señala que se les debe permitir continuar con su tránsito migratorio "pues el 99% quieren llegar a Europa continental". Para Bermúdez, es inhumano que se les condene a quedarse en Canarias, "sin oportunidades de trabajo ni posibilidad de poder enviar a sus familias dinero", por lo que el Gobierno central "debe dar una respuesta ya".

El primer edil explica que en estos momentos en la capital tinerfeña hay acogidos unos 500 migrantes en diferentes centros, como la antigua cárcel y el albergue municipal, y desde el viernes también en el céntrico hotel Adonis Pelinor, situado en la calle San José. Precisamente, ayer el Ministerio del Interior trasladó a este establecimiento, que permanecía cerrado desde la declaración del estado de alarma por el coronavirus, a otras 21 personas. En este complejo ya se encontraban, desde el viernes por la noche, 35 migrantes subsaharianos, atendidos por personal de Cruz Roja. Todos estos ciudadanos llegaron al sur de Tenerife en patera entre el martes y el miércoles pasado, y todos ellos se encuentran en óptimas condiciones de salud, según las pruebas médicas realizadas.

Sin embargo, para el alcalde la solución no está en habilitar hoteles de la capital para acogerlos. "Eso no es lo humano y, además, los recursos en Canarias, y en concreto en la capital tinerfeña, están desbordados y la situación ya es insostenible, pues no parece que la inmigración irregular a través de cayucos vaya a disminuir, sino todo lo contrario", agrega. Lo que tiene que hacer el Estado, insiste Bermúdez, es abrir una ruta área para permitir el traslado de los migrantes hacia la Península y el resto de Europa, que "es donde ellos quieren estar".

"Lo que no es lógico es que si las pateras llegan al territorio peninsular, ellos allí puedan moverse libremente y trasladarse al resto países europeos. Pero si llegan a Canarias, que también somos España y Europa, se queden encerrados aquí, sin oportunidades. Y está claro que la repatriación no funciona. Por eso, se les debe facilitar que continúen su camino. La mayoría no quiere quedarse en las Islas, porque es en Europa continental donde tienen su proyecto de vida e, incluso, familiares. No se les puede condenar, contra su voluntad, a quedarse aquí", comenta el regidor.

Incluso, Bermúdez anuncia que el Ayuntamiento está dispuesto, "lo que también deberían hacer los cabildos", a colaborar con los costes de los traslados de los migrantes a la Península. "Y el Estado", agrega, sin ocultar su enfado, "tiene que habilitar los aviones y así se lo pediré al ministro". "No entiendo la falta de respuesta por parte del Gobierno de España. La presión de Canarias, que no es buena ni para los migrantes ni para el territorio canario, debe distribuirse", manifiesta.

Por otro lado, desde la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) aseguran que los hoteles están para colaborar en la medida en la que puedan ante esta complicada situación porque lo principal es que "estas personas reciban una atención digna". Pero, y según señala su presidente, Jorge Marichal, el Gobierno de España "tiene instalaciones suficientes para acoger a los migrantes antes de recurrir a instalaciones privadas".