El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) acordó ayer dar carta blanca a las comunidades autónomas para establecer sus propios matices a la hora de fijar su techo de gasto para los próximos años. Eso sí, tendrán que incorporar unos criterios generales comunes. Para ello, cada comunidad aprobará una ley autonómica, en el plazo de seis meses, partiendo de los fundamentos que establecerá el propio CPFF en septiembre. Gracias a esta fórmula, Canarias podrá flexibilizar los criterios por su bajo nivel de endeudamiento, según aclaró ayer el consejero de Economía y Hacienda, Javier González Ortiz.
El consejero defendió que "Canarias ha hecho sus deberes en los últimos meses y, por tanto, el Estado debe ser sensible con Canarias en cuanto a la fijación del establecimiento del objetivo de déficit para los años venideros". Consideró que la reclamación fue aceptada con este acuerdo "de llevar una ley" a cada parlamento autonómico "donde se fije una regla de gasto que defina cuáles son los crecimientos máximos de los presupuestos en los años venideros".
González Ortiz resaltó que "hay consenso en que deben contabilizarse más periodos de pasado que de futuro, y en que puede haber excepciones en el destino de los crecimientos futuros de fondos, que es lo planteado por Canarias".
El consejero recalcó que con esta fórmula se pueden "tener ciclos económicos más expansivos y destinar una parte de esos recursos adicionales no sólo a la devolución de la deuda, sino a la financiación de los servicios e incluso actuar de forma anticíclica".
El bajo endeudamiento y las altas tasas de desempleo deberán tenerse en cuenta a la hora de fijar la regla de gasto, según el consejero. Para González Ortiz, "el mensaje fundamental de hoy [por ayer]" es que se apuesta por "el control de las finanzas públicas. Es un acuerdo unánime del CPFF que debe transmitir la necesidad de tranquilidad al conjunto de los mercados".
El consejero de Hacienda aseguró que aún no se pueden definir los elementos fundamentales de los presupuestos regionales de 2012, que perseguirán el objetivo de mantener el déficit en un 1,3% del PIB.
"Habrá que cerrar el presupuesto de 2011 y ver qué medidas hay que tomar de aquí a final de año, porque si no tendríamos dificultades de acudir al endeudamiento en el próximo año", resaltó y emplazó al final del mes de agosto para conocer el techo de gasto.
