El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, recalcó ayer que el Presupuesto de la Comunidad Autónoma para 2012 será "complicado, difícil, austero, exigente y restrictivo porque los ingresos son menores". El líder del ejecutivo regional explicó que las primeras previsiones sobre las líneas maestras de las futuras cuentas regionales deberán esperar al mes de agosto, cuando se empezarán a conocer a su vez las expectativas del Gobierno del Estado de cara al siguiente ejercicio económico.
"En el caso de los presupuestos de las comunidades autónomas, y en este caso el de Canarias, resulta muy importante ver el presupuesto general del Estado y conocer qué cantidades va a transferir para la financiación de aquellas competencias que en su día fueron transferidas y que el Estado tiene la obligación de financiar, en especial las que tienen que ver con la sanidad, la educación o las políticas sociales", comentó Rivero. "Hay que esperar por tanto al marco estatal, que normalmente se conoce a finales de agosto, para el función del ámbito presupuestario del Estado poder encajar el de nuestra comunidad autónoma".
Prioridades
El presidente del Gobierno de Canarias subrayó, una vez más, que "dentro de ese presupuesto restrictivo y exigente como el que sin duda nos vamos a encontrar la prioridad de las administraciones públicas es mantener el nivel de calidad necesario en los servicios esenciales que se prestan a los ciudadanos, que son precisamente los que ayudan en mayor medida a igualar la calidad de vida de todos los canarios", donde volvió a situar a los servicios sanitarios, educativos y los servicios de atención social.
Rivero, que hizo estas declaraciones al término de la presentación del plan de rehabilitación urbana de la zona Puerto-Canteras en el Real Club Victoria, transmite este mensaje como un mantra desde que arrancó la octava legislatura canaria, la segunda con él como presidente. En la presentación de sus consejeros en el edificio de Presidencia lanzó un mensaje general de austeridad, centrado especialmente en departamentos como el de Sanidad, donde instó a la consejera del área, Brígida Mendoza, a "hacer más con menos".
