La dirección federal del PSOE aceptó ayer una solución intermedia sobre el futuro de Casimiro Curbelo en el seno del partido y consideró su dimisión como senador un precio suficiente al tamaño de su error al menos hasta que haya un pronunciamiento de los jueces. La cúpula de la calle Ferraz mantiene que Curbelo será expulsado del partido si no es capaz de demostrar su inocencia respecto de la agresión a varios agentes de la Policía Nacional tras un altercado en un local de alterne de Madrid, pero le da la oportunidad de defenderse y por ahora no le reclamará que abandone también su cargo como presidente del cabildo de La Gomera.

Eso sí, si antes de que el PSOE inicie el proceso de elaboración de las listas a las próximas generales no hay sentencia absolutoria para él, no será de ninguna forma incluido en ellas.

El PSOE federal ha decidido relajar algo la presión sobre el político gomero una vez que éste había aceptado en la tarde del lunes presentar su dimisión como senador, lo que hizo efectivo ayer presentándose personalmente en el registro de la Cámara hacia el mediodía presentando un escrito de renuncia.

De esta forma, el anunció del día anterior de Elena Valenciano, destacada dirigente federal, sobre la intención de abrir un expediente de expulsión queda "aplazado" considerando que "él mantiene que es inocente y debemos darle la oportunidad de demostrarlo", según confirmaron fuentes de la dirección federal del Partido Socialista.

El PSOE cree que la dimisión como senador es un primer paso "suficiente" por el momento, que es ya de por sí un "alto precio" en tanto se esclarecen el suceso y se determine la responsabilidad de Curbelo a través de una resolución judicial, si bien aclaran que si lo que señala el atestado policial sobre el altercado en una sauna y posteriores insultos y agresiones a varios agentes se confirma durante el proceso judicial, el socialista gomero será expulsado del partido.

De momento, Curbelo fue convencido el lunes por la tarde por el secretario de Política Institucional del partido, Gaspar Zarrías, de que la renuncia al escaño era lo mejor para él y su defensa y lo mejor también para el partido y le prometió que no reclamarían su dimisión como presidente del cabildo de La Gomera, y que frenarían un proceso de expulsión del partido.

Las fuentes consultadas consideran "prácticamente imposible" que Curbelo tenga la oportunidad de ser incluido en las listas electorales porque probablemente no habrá tiempo de que haya una resolución judicial previa, que en todo caso debería ser absolutoria para el ya ex senador.

Además, hay aspectos del altercado protagonizado por Curbelo y por su hijo, Aday, cuya sordidez pueden dañar el debate político y los intereses del PSOE incluso en el caso de que no haya una condena penal expresa hacia el ex senador.

Con todo, en la dirección federal del partido destacaban ayer la contundencia con que Curbelo defendía su inocencia, apelando incluso a una posible grabación de la cámara de seguridad de la comisaría policial en la que supuestamente se produjeron los insultos y agresiones a varios agentes.