El presidente del Parlamento, Antonio Castro, ha decidido suspender la sesión plenaria por un tiempo de diez minutos ante la imposibilidad de acallar las airadas protestas del diputado del PP, Manuel Fernández, que exigía intervenir por alusiones para contestar a la socialista Francisca Luengo.

Luengo se había dirigido a Castro, tras intervenir durante el debate de la puesta en marcha de la planta de biometanol de Salto del Negro, pidiendo "respeto" hacia su persona, ya que "cada vez que intervengo debo volver por otro lado a mi escaño porque siempre recibo insultos de los diputados del PP, que no sé que les pasa con esta diputada".

"Yo me valgo a los intereses de mi Grupo y hago mis intervenciones defendiendo esos intereses, por lo que pido respeto", afirmó Luengo.

Tras estas palabras, Fernández pidió intervenir para defender el honor del Grupo Popular ante las "mentiras" de la diputada socialista y aclarar lo que él estaba diciendo durante la intervención de Luengo, pero Castro no le quiso dar la palabra por entender que no había lugar al debate, pues la diputada solo había pedido "que todos aprendamos a ser más respetuosos".

Las protestas airadas de Fernández, a micrófono cerrado y de pie en su escaño, no terminaron e increpó a Castro sobre su mala dirección en los debates, recordándole que él había sido miembro de la Mesa y que éste era un flagrante caso de alusiones y que el presidente del Parlamento estaba dejando en indefensión a los diputados conservadores.

"No me queda más remedio que suspender por diez minutos la sesión, y usted puede presentar a la Mesa una queja por escrito, pues es la Presidencia quien dice como se establecen los debates y usted no es nadie para decirle lo que debe hacer", culminó Castro.

Tras la reanudación, el presidente del Parlamento si dio la palabra a la portavoz del PP, María Australia Navarro, quien pidió a Luengo que "retire del orden del día que los diputados del PP la insultamos".

"Esta no es la primera vez, puede ser la tercera o la cuarta, pues siempre me increpan con insultos cuando intervengo, hasta el punto de que he tenido que pedir a la Mesa que me cambien de escaño. Así que no lo voy a retirar", terminó Luengo.