La actual ministra de Defensa, Carme Chacón, podría convertirse en unos meses en la primera mujer que entra abierta y directamente en la carrera hacia La Moncloa, reactivando de esta forma el debate sociológico sobre si España está preparada para una presidenta del Gobierno. Pero antes de despejar esa incógnita, el PSOE debe resolver su propio debate interno en torno a la hipotética sucesión del actual Presidente y líder del partido, José Luis Rodríguez Zapatero, de cara a las elecciones generales del próximo año, un proceso con mucho camino aún por recorrer.

En todo caso, ella no tiene duda de España sí está preparada, no ya para una candidatura femenina, sino para que una mujer ocupe la Presidencia. Así lo aseguró recientemente ante una pregunta en un acto público, dando lugar a todo tipo de especulaciones sobre sus intenciones reales a este respecto. Para ella la respuesta era de cajón: lo destacado hubiera sido decir lo contrario. Una idea incomprensible si se tienen en cuenta los apoyos obtenidos por decenas de mujeres en sus respectivas candidaturas en otros ámbitos electorales, como son los casos de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid; o de Rita Barberá en la ciudad de Valencia; o la gran valoración popular de dirigentes como María Teresa Fernández de la Vega como vicepresidenta primera durante casi 7 años.

Ningún dirigente político consultado a este respecto duda en considerar que una mujer podría competir en igualdad de condiciones y con las mismas opciones que un hombre desde la cabecera de un cartel electoral. El problema que surge es que responder ahora a esa pregunta se puede interpretar como un posicionamiento explícito respecto a la candidatura de Chacón. Así lo entienden sobre todo en su partido, donde todo el mundo espera primero a ver qué hace Zapatero.

"Por supuesto que España está preparada para una mujer en la Presidencia del Gobierno", responde por ejemplo la diputada socialista canaria Pilar Grande, quien sin embargo se reserva un "no coment" a la pregunta de si el PSOE está preparado para una mujer como candidata. "Responder a esa pregunta sería entrar en un debate que ahora no toca".

"España está preparada para la persona mejor preparada para dirigir el país independientemente de su sexo, ideología, partido o procedencia geográfica", responde aséptica la diputada de CC Ana Oramas, quien, como la mayoría de los dirigentes consultados, está convencida de que Zapatero no desvelará hasta después de las elecciones autonómicas y locales del 22 de mayo si volverá a ser candidato en las generales del próximo año. Pablo Matos, diputado tinerfeño del PP, asegura que la diferencia de sexos entre candidatos ya no determinaría en España una carrera electoral por la Presidencia. Tanto Oramas como Matos creen que Chacón está moviéndose discretamente para saltar a la palestra si se dan las condiciones, pero dan por hecho que el PSOE presentará en 2012 un candidato de transición que no será otro que Pérez Rubalcaba.

¿Qué intenciones y apoyos tiene ahora realmente la ministra de Defensa? La opinión mayoritaria incluso en el PSOE es que todas las intenciones y, por ahora, pocos apoyos. Pero todo está aún en el aire. Los nacionalistas de CiU están seguros de que tiene diseñada toda una estrategia para hacerse con la candidatura del PSOE, pero el poder y margen de maniobra de los socialistas catalanes en la calle Ferraz es ahora escaso.

Chacón está atenta a los acontecimientos y mientras tanto va dejándose ver y quizá buscando aliados en sectores y dirigentes menos allegados a la actual cúpula de Ferraz, como son los casos del líder madrileño, Tomás Gómez, o el ex secretario general de los socialistas canarios. Juan Fernando López Aguilar.