Los dos partidos nacionalistas canarios con presencia en el Congreso, CC y NC, emprenden una estrategia común de negociación con el Gobierno central sobre su posible apoyo a los Presupuestos del Estado para 2021. Y lo hacen además reclamando una implicación directa en esa negociación del jefe del Ejecutivo estatal, Pedro Sánchez, a quien ambas formaciones remitieron ayer una carta firmada por sus respectivos líderes orgánicos, José Miguel Barragán y Román Rodríguez, solicitando una reunión “cuanto antes”. La idea de CC y NC es que dicha reunión negociadora se celebre antes de que el Consejo de Ministros apruebe el proyecto que remitirá al Congreso, previsiblemente a lo largo de lo que queda de octubre, y puedan por tanto conocer de manera previa el contenido del mismo sobre la ficha presupuestaria para Canarias, y en su caso poder reclamar los cambios que consideren oportunos.
Los dos partidos nacionalistas de las Islas dejan claro de esta forma que no están dispuestos a condicionar su apoyo en el debate de totalidad a una negociación durante el periodo de tramitación, si el proyecto logra pasar el primer filtro de la Cámara, y que necesitan conocer al menos las grandes partidas de inversiones y ayudas a las Islas, y si se respetan los preceptos contenidos en las reformas del REF y el Estatuto.
Los Presupuestos estatales de 2021 serán los primeros que se tramiten después de que los dos principales fueros canarios se modificaran a finales de 2018, incluyendo en ambos casos importantes compromisos por parte del Estado en materia de financiación y de compensaciones por la lejanía y la insularidad, y que cobran especial relevancia en el actual contexto de crisis económica y social en el Archipiélago consecuencia de la pandemia sanitaria.
En la carta que Barragán y Rodríguez registraron ayer formalmente en La Moncloa reafirman la “predisposición” de los dos partidos nacionalistas “a contribuir a la gobernabilidad del Estado por responsabilidad ante la profunda crisis del coronavirus”, pero reclaman “que se respeten los fueros y derechos de los canarios recogidos en el Estatuto y el REF”.
Este posicionamiento común de CC y NC contrasta con el hecho de que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, responsable ahora de los primeros contactos formales con los grupos parlamentarios, parezca querer separar a los dos partidos nacionalistas canarios en el proceso negociador. Así, la ministra ha cerrado ya una primera reunión con el diputado de NC, Pedro Quevedo, para el próximo lunes, mientras mantiene congelada la negociación con CC, al menos por ahora. Ni Oramas ni ningún otro dirigente de Coalición han sido contactados por el gabinete de la ministra, ni tampoco por el PSOE, para esta negociación. La teoría más plausible es que el Gobierno central priorice en estos momentos conocer la posición de los partidos que apoyaron la investidura de Sánchez intentando completar la mayoría necesaria para rechazar las enmiendas de totalidad que se presenten, y que hablará después con los demás, entre ellos CC.
En la carta remitida ayer a Sánchez, Rodríguez y Barragán insisten en que el cumplimiento del Estatuto y del REF es vital para la comunidad “más alejada, fraccionada territorialmente y con déficits estructurales y problemas sociales anteriores a la pandemia, que ahora se han visto agrandados”. Ambos dirigentes señalan al jefe del Ejecutivo central que, como respuesta a la actual crisis, la implementación del plan canario de reactivación precisa de la “colaboración” del Estado y que una “buena parte de sus elementos esenciales” depende de los Presupuestos estatales, del marco financiero plurianual de la UE, además de los fondos europeos para la reconstrucción post-covid. “Esperamos contar con la sensibilidad que merece una comunidad que ha sufrido el impacto de la crisis de forma especial ya que el 35% del PIB y 40% del empleo dependen del sector más castigado en esta crisis, el turismo”, resaltan los nacionalistas en la misiva, recordando que entre enero y junio est actividad se redujo un 63,67%; el paro registrado en el segundo trimestre subió un 15%, frente al 8% de la media estatal, y que la caída del PIB regional alcanza el 21,6 %, frente al 11,2 de media del país.
