La portavoz parlamentaria del PP, Australia Navarro, ha acusado al presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, de "jugar con fuego" en el control sanitario de los visitantes que llegan a las islas y ha asegurado que el decreto de los test es una medida insuficiente que entrará en vigor demasiado tarde.
El decreto "no garantiza la salud de los canarios ni de quienes llegan a nuestras islas”, afirma la también presidenta del PP de Canarias en un comunicado, pues una semana después de la reapertura de los mercados británico y alemán, no se ha publicado en el Boletín Oficial de Canarias y sus medidas no entrarán en vigor hasta diez días hábiles después de su publicación.
“En la práctica, esto supone que durante un período de unos veinte días las islas habrán recibido a miles de visitantes de zonas donde el contagio está descontrolado, moviéndose por el archipiélago sin ningún tipo de control sanitario”, avisa Navarro.
A su juicio, esto representa “una absoluta irresponsabilidad y un serio riesgo epidemiológico, porque la pandemia nos ha demostrado que bastan un par de días para que todo cambie y los buenos resultados se vengan abajo”.
Los populares canarios recuerdan que en Alemania la incidencia acumulada de casos prácticamente duplica a la de las islas, con 148 casos por cada cien mil habitantes, mientras en Reino Unido la tasa se multiplica por cinco con respecto a la canaria, con 394 casos, y en la Península se supera los 450 casos.
“No parece muy sensato ni prudente que mientras en el continente europeo todas las regiones y países blindan sus territorios ante el descontrol de los contagios, aquí nos dediquemos a recibir a miles de visitantes procedentes de esas zonas sin ningún tipo de garantía, porque el Gobierno de Torres no hizo los deberes correctamente en su momento”, añade Australia Navarro.
El Partido Popular considera un acierto exigir los test en origen antes de viajar a las islas, pero no comparten la decisión de trasladar la responsabilidad de su control a los empresarios y trabajadores del sector turístico, pues no es su competencia ni tienen los medios para verificar la autenticidad o calidad de los resultados de un test.
Además, advierten de que los visitantes que no utilizan un alojamiento turístico seguirán estando fuera de control.
“Además del riesgo sanitario, la apertura de los mercados turísticos de la que tanto presume el presidente Torres puede convertirse también en una trampa para el propio sector, al que terminará de arruinar si vuelven a aumentar los contagios y nos obligan a un nuevo aislamiento del archipiélago”, concluye Australia Navarro.
