El problema y la solución debe ser común. Es la síntesis del mensaje que el presidente de la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales de la Unión Europea (Calre), Gustavo Matos, trasladó ayer al presidente del Comité Europeo de las Regiones (CdR), Apostolos Tzitzikostas. El Plan de Migración y Asillo a debate en la Comisión Europea, insiste el canario, debe introducir como “elemento ineludible” la obligación de afrontar el fenómeno migratorio como una política común.

“Cuando una persona llega a cualquier territorio de la UE, en este caso a la frontera sur buscado seguridad personal, seguridad sanitaria y huyendo de situaciones humanitarias complicadas, lo hace porque quiere alcanzar un punto del territorio de la Unión”, subrayó Matos en su intervención durante la reunión mantenida con Tzitzikostas y los presidentes de las asociaciones europeas de autoridades locales y regionales –la Conferencia de Regiones Periféricas Marítimas (CRPM), del Consejo de Municipios y Regiones de Europa (CEMR), de la Asamblea de Regiones Europeas (AER), Eurocities, la Asociación de Regiones Fronterizas Europeas (AEBR) y Calre–.

“Si queremos construir un proyecto europeo creíble, donde tengamos claro que nuestra frontera sur forma parte también de lo que significa construir un espacio político, social, económico y cultural, la respuesta al fenómeno migratorio ha de ser global. Por tanto, la soluciones, medios, relaciones internacionales y capacidad de respuesta han de ser globales dentro de ese proyecto”. Matos destacó, asimismo, que esa respuesta conjunta por la que aboga sirva también de “antídoto y receta frente a los tics xenófobos y autoritarios que ponen en riesgo la convivencia”.

En la reunión se abordaron varios asuntos más, entre otros la pandemia, los planes de recuperación de la UE y la necesidad de garantizar recursos adecuados a las comunidades locales y regionales.