El magistrado del Juzgado de Las Palmas con competencias en el CIE de Barranco Seco, Arcadio Díaz Tejera, ha indicado tras la Comisión de Seguridad celebrada en Mogán, que aquellos inmigrantes conflictivos o violentos "deben ser expulsados".

Las personas conflictivas y agresivas "tienen que ser expulsadas y eso hay que tenerlo claro", ha dicho.

Personas con este comportamiento "los hay en todo grupo humano", "el problema es generalizar, porque no todos son iguales, ni los migrantes, ni los marroquíes, ni los subsaharianos, porque hay de todo en todo grupo humano".

El problema de Mogán, que ha sufrido varios incidentes relacionados con los inmigrantes que se alojan en la zona es que "en un municipio pequeño se ha concentrado en varios meses una tensión de convivencia que Mogán no merece" porque la sufre "por razones geográficas y por la cercanía del muelle de Arguineguín".

En relación al muelle, ha declarado el magistrado, "es algo para olvidar o recordar permanentemente para que no se vuelva a repetir" porque es "una realidad al margen del derecho y sin cobertura jurídica, con violación de derechos fundamentales".

Sin embargo, ahora los conflictos son otros y parten "de estas personas concretas a las que hay que expulsar", ha dicho.

A todos los immigrantes de los CIEs, ha recordado Díaz, "se les explica que están en un son de respeto, de cumplimiento de derechos y deberes por ambas partes, así como de las obligaciones y de unas reglas", porque "a quien no las respete se le expulsa".

En cambio, ha destacado la importancia de "no convertir la anécdota en categoría y no satanizar a todo aquel que sea migrante".