Canarias está en una situación “límite”. Así lo reconoció ayer en el Parlamento regional el secretario de Estado para la Unión Europea (UE), Juan González-Barba, para quien la llegada de miles de personas a las costas del Archipiélago a bordo de pateras está poniendo a las Islas en una situación de “especial gravedad”. González-Barba calificó las circunstancias actuales como una “tormenta perfecta”, al unirse en Canarias los efectos de la crisis socioeconómica derivada de la pandemia con la dificultad de hacer frente a una crisis migratoria.
Con las repatriaciones y derivaciones a la Península reducidas a la mínima expresión, el Archipiélago ha tenido que hacer frente a la acogida de estas personas, que siguen llegando de forma irregular por vía marítima, favorecidos por el buen tiempo y empujados por los efectos que la pandemia también está causando en los países de origen y tránsito de estas personas. “Un desempleo sobrevenido que hace que jóvenes que en otras circunstancias tendrían medios, ahora estén decidiendo subirse a pateras como no lo habían hecho desde el año 2006”, argumentó.
Solo el año pasado las Islas recibieron a 23.000 migrantes, entre los que viajaban también mujeres y niños. Lo que significa que este tipo de migración irregular se ha incrementado casi un mil por cien y lejos de disminuir, las llegadas no cesan. En lo que llevamos de año ya han arribado a las costas canarias alrededor de 1.300 personas a bordo de estas precarias embarcaciones
Algo que González-Barba aseguró que preocupa al Gobierno de España y señaló que afrontar el problema de la migración en Canarias está “entre las grandes prioridades” del Ejecutivo de Pedro Sánchez. El secretario de Estado para la UE sostuvo que el Gobierno es consciente de la situación de “extrema urgencia” que están viviendo tanto la población canaria como las administraciones del Archipiélago e incidió en que es de admiración el comportamiento que están teniendo los canarios, que “a pesar de las circunstancias muy difíciles de paralización de la economía y de crisis sanitaria los está acogiendo de manera humanitaria”, aunque subrayó que el Ejecutivo central seguirá dando a esta crisis “la máxima importancia” para que dure “el menor tiempo posible”.
El presidente del Gobierno canario, Ángel Víctor Torres, volvió a demandar esta semana a Bruselas mayor solidaridad frente a la situación migratoria que atraviesa Canarias y reclamó que los diferentes territorios se repartan la responsabilidad de dar acogida a estas personas.
Sin embargo, González-Barba manifestó ayer que la situación en la Unión Europea tampoco es fácil, ya que la política de migración y asilo europeo está todavía “por hacer”. Aunque en el último semestre se ha presentado una propuesta, esta se encuentra ahora mismo en un proceso de negociación. El responsable nacional aseguró que el Ejecutivo considera que este borrador debe “reequilibrarse”, sobre todo en lo que respecta al aspecto de la solidaridad, ya que “es demasiado difuso”, mientras que las responsabilidades que debe cumplir el país de primera entrada “sí aparecen bien detalladas”, algo que “generaría un desequilibrio si no se corrige”.
Además, la gestión de la crisis migratoria se ha encontrado con otra dificultad para hacerle frente, la capacidad operativa del Frontex, mermadas hasta que se materialicen los acuerdos que permitan su despliegue en países de origen migratorio, como los que se encuentran en la costa africana cercana a Canarias.
Sin embargo, González-Barba sostuvo que a pesar de las complicaciones, en el ámbito europeo existe “máxima concienciación” y recordó el viaje que la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, realizó a Canarias el pasado mes de noviembre y recalcó que otros representantes tanto europeos como del Gobierno español se han trasladado a países de origen o de tránsito de migrantes para abordar el problema desde la vía diplomática. Asimismo, también recordó la ayuda extraordinaria de 42,3 millones de euros que desbloqueó Bruselas para hacer frente a esta crisis migratoria. Aún así, quiso resaltar que se debe “ver la luz al final del túnel”, ya que gracias la campaña de vacunación la movilidad se va a recuperar en pocos meses.
Mientras tanto en Canarias crecen las demandas para que se permita a los migrantes que arriban a las Islas continuar su camino hacia la Península y el resto de Europa. El Plan Canarias de Inmigración del Gobierno de Sánchez, a través del que se quieren habilitar centros de acogida con capacidad para 7.000 migrantes, no puede ser la solución, ya que estas personas reclaman poder trasladarse a otros territorios, en ocasiones, para reunirse con sus familiares.
Los propios migrantes ya han demostrado su hartazgo por permanecer confinados en los hoteles de las Islas y no poder seguir su camino. A la huelga de hambre que iniciaron un grupo de senegaleses en Tenerife la pasada semana, –aunque solo se extendió durante un día–, se unió otro intento de otro grupo en un hotel de Mogán, que finalmente tampoco se alargó demasiado.
Además, las continuas quejas acerca de actos delictivos presuntamente cometidos por migrantes irregulares están haciendo aflorar actuaciones y comentarios xenófobos. Por eso, agentes de la Policía y la Guardia Civil realizan un seguimiento de los mensajes de incitación al odio contra los inmigrantes que circulan estos días por las redes sociales, en los que incluso se amaga con organizar actos de violencia en grupo.
brexit
La vacuna permitirá salvar el verano turístico
El secretario de Estado para la Unión Europea, Juan González-Barba Pera, aseguró ayer en su visita a Canarias que la actual crisis económica y social será “transitoria” una vez se empiecen a desplegar con toda su intensidad la campaña de vacunación y los fondos comunitarios para la reconstrucción, que todavía están pendientes de la aprobación del plan. Tras su encuentro con el presidente del Parlamento regional, Gustavo Matos, y con los miembros de la Mesa de la Cámara, y representantes de los grupos parlamentarios apuntó que “gracias a la Unión Europea hay luz al final del túnel” pues la campaña de vacunación, por ejemplo, permitirá mejorar la movilidad de los ciudadanos y “salvar” la temporada turística de verano, por lo que consideró que “el final de 2021 será más halagüeño”.
Además, comentó que las restricciones a la movilidad han afectado “desproporcionadamente” a Canarias, debido al peso del turismo en su economía, a lo que se añaden las consecuencias del
, por lo que ha defendido la mejora presupuestaria obtenida para las Regiones Ultraperiféricas (RUP) en el nuevo marco presupuestario hasta 2027 que dejarán en las Islas 660 millones.
El presidente del Parlamento de Canarias, Gustavo Matos, agradeció la visita del secretario de Estado en estos momentos y señaló que sin la ayuda europea el Archipiélago estaría en una situación muy difícil. González-Barba también se reunió durante su primera visita a Canarias con el presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, y con el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez.| D.G.
