El Gobierno de Canarias se reunió este jueves, y como cada semana evaluó la evolución de la pandemia de coronavirus. En rueda de prensa posterior, el portavoz del Ejecutivo, Julio Pérez, explicó que en esta ocasión no había cambios en los niveles de alerta por islas. De modo que Tenerife, Lanzarote y La Graciosa siguen en nivel 2, y el resto de islas en el 1.
Tampoco hay modificaciones en las medidas anticovid de momento, pero sí se espera que las haya la semana que viene. El Gobierno tiene previsto adaptar la normativa a lo acordado este miércoles por el Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Las aprobadas ayer para el conjunto de España eran medidas para la nueva normalidad que afectan a sectores como la hostelería y el ocio nocturno. Todavía es pronto para adelantar cómo se adaptarán en el Archipiélago, pero como recordó Pérez, "vamos poco a poco hacia un momento en que algunas de las medidas se relajarán".
En lo que se refiere al ocio nocturno, el portavoz explicó que el Gobierno canario tendrá en cuenta las directrices con carácter nacional, y también las demandas del propio sector.
Vacunación
Julio Pérez destacó que más de 800.000 personas han recibido al menos una dosis de las vacunas que han sido autorizadas y 360.000 la vacunación completa, lo cual significa que se han administrado más de 1,1 millones de dosis.
Según el portavoz, estas cifras, junto a la evolución favorable de la enfermedad y al aprovechamiento de las dosis, concuerdan con la previsión de que en algún momento del verano el 70% de la población canaria estará vacunada.
Informe del SCS
La decisión de mantener los niveles de alerta por islas se sustenta en el último informe emitido por la Dirección General de Salud Pública del Servicio Canario de la Salud (SCS). Ahí se recoge que en el caso de Tenerife la incidencia acumulada a siete días ha ido descendiendo muy discretamente desde finales de abril. Ese descenso se había estancado en valores de 51 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que esta última semana la evolución se sitúa en un promedio de 44,7 casos por cada 100.000 habitantes. Los promedios de ocupación de camas convencionales y en UCI también han variado situándose ambos en nivel de riesgo bajo. Sin embargo, aunque en conjunto los indicadores apuntan a una evolución positiva, el valor de la incidencia a 7 días aún no se encuentra en un descenso estable hacia el riesgo bajo, por lo que se propuso que la isla continúe en nivel de alerta 2.
El resto de islas mantienen la misma tendencia de estabilización o bajada, si bien en el caso de Lanzarote, pese a que los indicadores muestran cifras inferiores a la última evaluación, la tasa de incidencia acumulada se mantiene en un promedio de 81,9 casos por cada 100.000 habitantes en la última semana (riesgo alto). Debido a la alta trazabilidad de los casos y a que los valores de incidencia no han representado un alto impacto sobre el sistema hospitalario asistencial, ni sobre el grupo de personas mayores, el Servicio Canario de Salud propuso que la isla permanezca en nivel de alerta 2 y en estrecha vigilancia de lo que suceda los próximos días.
Puede ver la rueda de prensa a través de esta retransmisión:
