El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha decidido, finalmente, readmitir en sus recursos de Gran Canaria a 30 migrantes que duermen en la calle tras ser desalojados de los hoteles del sur de la Isla y negarse a ir al macrocampamento de Las Raíces, en Tenerife, con lo que desde hace meses están sin un techo. El Ministerio ha rechazado que otras cinco personas llegadas en pateras y cayucos en esta crisis migratoria vuelvan a los campamentos de emergencia tras ser expulsados de ellos por un comportamiento violento.
El Ministerio de Migraciones estudió 35 casos de personas que se encontraban durmiendo en la calle en Las Palmas de Gran Canaria después de que la Plataforma Solidaria Somos Red le pasara un listado de 69 migrantes. Según Migraciones, muchas de estas personas ya se han marchado o se repetían nombres. Llegaron a pernoctar en las calles de la ciudad, sobre todo en la playa de Las Alcaravaneras, hasta 200 migrantes. Las 30 personas que han readmitido podrán entrar en el acuartelamiento Canarias 5O o en el antiguo Colegio León, ambos en la capital grancanaria. La normativa estatal impedía que una persona que estuviera 48 horas fuera de los recursos públicos o fuera expulsada volviera a ellos.
«Migraciones toma esta decisión para colaborar con los servicios sociales de la ciudad y devolver la solidaridad de un ayuntamiento ejemplar en su compromiso con el Estado», afirma el Ministerio, que se vio presionado por la plataforma solidaria de ciudadanos para que readmitieran a los migrantes que están en la calle hasta que les permitieran seguir su tránsito a la Península.
Lo cierto es que la situación se ha descongestionado, aunque han seguido llegando pateras, porque día sí día no parten migrantes a distintos puntos de España desde que la Policía, a raíz de una sentencia y a la bajada de nivel de la covid, flexibilizara los viajes de los migrantes al resto del territorio peninsular. De hecho, de los 7.000 migrantes que caben en los campamentos de emergencia del Plan Canarias estatal, que han estado a tope de personas, en Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura solo quedan 1.773 plazas ocupadas.
Según datos del Ministerio, en el Canarias 50 hay 420 migrantes; en el Colegio León, 165, cuando llegaron a ser más de 400; en la nave de El Sebadal, 50 y caben 200. Estos tres centros están en Gran Canaria. En el antiguo acuartelamiento de Las Raíces, en Tenerife, quedan 439 migrantes, asegura el Ministerio. Su ocupación estuvo cerca de las 2.000 personas y tiene capacidad para 2.400. En el cuartel de Las Canteras, también en La Laguna, están alojadas 565 personas, la mitad de las que tenía, y en las instalaciones de El Matorral, en Fuerteventura, 134, cuando llegó a 700. Estos son los recursos de emergencia del Plan Canarias pero contando con los centros de gestión compartida hay un total de 2.180 migrantes en las Islas.
Entre 2020 y 2021 han llegado a Canarias 26.000 personas en pateras y cayucos sin sumar a los 2.700 menores, que son competencia del Gobierno regional.
Tras conversaciones con el Ministerio y la Delegación del Gobierno en las Islas, Somos Red pasó un listado de 69 personas pero, a la espera de la respuesta, algunos de ellos ya se han ido. De hecho quedan pocos durmiendo en Las Alcaravaneras, donde se llegó a concentrar un centenar de migrantes, aunque también se debe a que se produjeron peleas por la dura situación en la que se encontraban y los que siguen en la calle están repartidos en otros puntos de la ciudad. Lo peor es que hay personas que se han dedicado a quemarles sus pertenencias cuando ellos no están presentes. Aún quedan chicos sin techo a la espera de su documentación para viajar. La decisión del Ministerio de readmitir a estas personas es «un gesto de compromiso con la ciudad de Las Palmas», expone, y calcula que podrán instalarse en los centros en estos días.
Goteo diario de viajes a la Península
Cada día viajan a la Península migrantes. La mayoría de ellos tienen documentos o han pedido la protección internacional y la Policía Nacional ya no está poniendo impedimentos para dejarlos pasar en las puertas de los aeropuertos. La Policía alegaba que la negativa a que viajaran era debido al nivel 3 de la covid y el estado de alarma aunque las ONG denunciaban que paraban a los migrantes en los aeropuertos canarios aunque tuvieran documentación y el billete comprado antes de estos niveles máximos. El pasado abril se produjo un fallo judicial determinante para que los migrantes pudieran seguir su tránsito a la Península, que es lo que la gran mayoría quiere cuando llega en pateras o cayucos a Canarias. Un juez de Las Palmas de Gran Canaria dictaminó a raíz de una denuncia de un migrante que cuando estas personas acrediten su identidad con pasaporte o con una “solicitud de protección internacional” (asilo) pueden viajar a la Península desde las islas siempre que cumplan con las restricciones sanitarias anticovid, y que la Policía, por orden lógicamente del Ministerio del Interior, no puede impedírselo. Esta resolución ha sido un antes y un después. Desde que se ha bajado de nivel 3, el tránsito a la Península es continuo. La mayoría van a Bilbao, Madrid o Sevilla, a esta última ciudad para llegar a Almería. A muchos les mandan los billetes los familiares que están en esas comunidades y a otros se los pagan los ciudadanos solidarios de las Islas. | F. M.
