Cuenta atrás en la agenda marcada por el Gobierno central para definir y aclarar dos de los elementos básicos sobre las relaciones financieras entre el Estado y las Comunidades Autónomas para los próximos años. Uno tendrá reflejo a corto plazo, como son los Presupuestos estatales para 2022, y otro, la reforma del sistema de financiación autonómica, marcará la senda de esa relaciones y del conjunto del sistema autonómico español para al menos cinco años. En ambos casos, el Gobierno de Pedro Sánchez, a través de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, dará esta semana las primeras pistas sobre dos de los asuntos que marcarán la agenda política para lo que resta de legislatura.
Canarias busca posicionarse en ambas materias en un contexto de nueva dinámica del debate territorial y de urgencias económicas de todas las regiones como consecuencia de la crisis derivada de la pandemia sanitaria, y en la que muchas de ellas buscan una relación de bilateralidad con el Estado.
La apertura de una mesa de negociación entre el Gobierno central y la Generalitat de Cataluña sobre el futuro de esa comunidad autónoma tras el procés independentista es vista con muchos recelos por parte de algunos gobiernos regionales por entender que se le concederán privilegios en materia de financiación y en inversiones en detrimento de otras comunidades. También el País Vasco está logrando cauces de una relación directa con el Ejecutivo en materia presupuestaria y de desarrollo estatutario.
Al abrigo de esta situación, otras comunidades buscan ganar peso en el debate territorial, o deciden una estrategia de claro enfrentamiento político con el Gobierno de Sánchez, como es el caso de la Comunidad de Madrid de la mano de su presidenta, la popular Isabel García Ayuso.
La ministra aclarará el miércoles su hoja de ruta sobre la reforma del sistema de apoyo autonómico
Otros dirigentes autonómicos del PSOE, como el propio presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres; el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig; o la presidenta de Baleares, Francina Armengol, trazan su propia estrategia de buscar complicidades con el Estado y de alianzas entre sí para tratar de llevar el debate territorial a su terreno y a la defensa de los intereses de sus respectivas. Pero todos ellos buscan al mismo tiempo una vía complementaria de relación bilateral con el Estado.
Canarias intenta en este contexto de inicio de negociaciones sobre las cuentas estatales de 2022 y de la futura financiación autonómica colocar algunos mensajes sobre sus singularidades que deben tener reflejo en los dos ámbitos. El cumplimiento del REF en materia de inversiones y ayudas a la insularidad; la necesidad de responder en el reparto de los 69.500 millones de fondos europeos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia al hecho de ser la comunidad más castigada por la crisis económica derivada de la pandemia; y mejorar una financiación que en estos momentos no cubre el coste de sus servicios públicos son los tres grandes objetivos de estas negociaciones que ahora se inician.
Este es el fondo del debate en la semana en que el Gobierno central empieza a moverse para abordar ambos asuntos. La ministra de Hacienda comparecerá el próximo miércoles en el Congreso para explicar sus planes sobre la reforma del sistema de financiación autonómica a cuyo inicio se comprometió el Ejecutivo para antes de acabar este año.
Montero, de hecho, avanzó en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) del pasado que presentaría en noviembre los criterio sobre su propuesta para poner en marcha la negociación propiamente dicha antes de finales de año. Pero la titular de Hacienda no ha sido siempre tan clara y determinante a este respecto y en más de una ocasión se ha referido a la dificultad de llevar a cabo esa reforma en el actual contexto político español, poniendo en duda en algunas ocasiones que dicha reforma pendiente desde el año 2014, se pueda materializar.
Con todo, según el Ministerio en los últimos meses se han ido produciendo contactos con los diversos gobiernos regionales para establecer algunos criterios técnicos básicos sobre los que iniciar la negociación en el seno del CPFF. Previamente, la ministra trató crear un clima a su favor en este debate al decidir condonar a todas las autonomías los 3.900 millones de deuda global por las entregadas a cuenta correspondientes a 2020, 450 en el caso de Canarias, por la crisis de recaudación como consecuencia de la pandemia sanitaria. Pero el hecho de que Montero decidiera prácticamente partir de cero en ese proceso, rechazando hacer uso de los trabajos que ya se habían avanzado durante la última etapa de su predecesor en el ministerio, Cristóbal Montoro, con el Gobierno del PP, siembra dudas sobre sus verdaderas intenciones y la estrategia que está siguiendo para esa reforma que todo el mapa autonómico le reclama.
Atar los Presupuestos
Más urgente le resulta al Gobierno y a la propia Montero la aprobación del proyecto de Presupuestos estatales para el próximo año, que aprobará en Consejo de Ministros y remitirá al Congreso como muy tarde en tres semanas.
El Ejecutivo de Sánchez cree tener asegurados los apoyos necesarios una vez que se ha garantizado el de ERC tras la puesta en marcha de la mencionada mesa sobre el futuro de Cataluña. Pero es consciente de que tiene muchos votos por atar, entre ellos el del diputado de NC, Pedro Quevedo, que precisamente el miércoles hablará con el jefe de gabinete de la ministra, Carlos Moreno, para iniciar la negociación.
El apoyo de NC a los Presupuestos se ha empezado a despejar tras la rectificación por parte del PSOE y del propio Ministerio sobre el recorte al REF del cine producido el pasado mes de junio, y tras recuperar en el proyecto de ley de ayudas culturales, que el jueves será aprobado definitivamente en el Congreso, el 80 % de diferencial fiscal respecto a las producciones realizadas en el resto del Estado. Se decuelga de la norma el 100% que se aplicaba para los rodajes en las llamadas islas verdes.
La aritmética parlamentaria vuelve a ofrecer a Quevedo la posibilidad de que su voto sea decisivo
La aritmética parlamentaria vuelve a ofrecer a Quevedo la posibilidad de que su voto sea decisivo en la aprobación de las nuevas cuentas, piedra de toque de la recuperación económica que pretende el Gobierno y de la propia continuidad de la legislatura.
Más allá del papel que pueda jugar el diputado de NC, el Gobierno de Canarias también está participando del proceso de contactos con el Ministerio sobre la ficha financiera canaria en las nuevas cuentas, lo que ha llevado a señalar al Presidente regional y líder de los socialistas canarios que estas respetarán el REF como, según él, ya lo hicieron las de 2021, y que «van a ser buenas para el Archipiélago y para la recuperación social y económica, pues habrá más fondos para la cohesión social y para leyes como las de Dependencia y Servicios Sociales».
