Más de 30.000 empleados públicos de la Comunidad Autónoma se ven afectados desde ayer por el vencimiento del contrato que mantenía el sistema de control de su jornada laboral, denominado Sicho (Sistema Integral de Control Horario). La Dirección General de Función Pública se ha visto obligada a lanzar una instrucción para establecer un régimen transitorio en el fichaje de los trabajadores hasta que se resuelva la situación, lo que implica validar a diario la jornada en la entrada y salida mediante una incidencia que después tiene que comprobar el responsable de cada centro o servicio. Los problemas organizativos que provoca esta situación han suscitado malestar entre los empleados afectados, jefes de sección y servicio y en los sindicatos al tratarse de un contrato que ya se sabía que expiraba pero que, sin embargo, no se ha adjudicado.
El Sicho es una aplicación informática que funciona desde 2009 para la gestión de los procedimientos en materia de personal relacionados con vacaciones, permisos, licencias, jornada y horario de trabajo de los empleados públicos. El servicio de mantenimiento del sistema está contratado con una empresa externa cuyo contrato venció el pasado 30 de septiembre y, según Función Pública, el nuevo expediente de contratación se encuentra en fase de preparación y adjudicación.
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El pasado mes de julio el Consejo de Gobierno autorizó un gasto de 3,4 millones de euros para la contratación de este servicio de mantenimiento del Sicho por tres años, prorrogable por dos años más y cuyo inicio estaba previsto para el 1 de octubre. El hecho es que pasó esa fecha y ante los problemas generados para la renovación del contrato la Consejería de Administraciones Públicas se ha visto obligado a realizar cambios en el control de la jornada laboral. El presupuesto de licitación de la nueva contratación se distribuye en las siguientes anualidades: 290.465,10 euros en 2021; un total de 1.161.860,37 euros en cada uno de los años 2022 y 2023; y el resto, 871.395,27 euros, en el año 2024.
Sin embargo, esta renovación del contrato viene después de dos años en los cuales se ha estado prorrogando el anterior contrato en vigor desde octubre de 2015 y que ya no se podía alargar más. En septiembre de 2019 el consejero del área, Julio Pérez, ordenó una primera prórroga de seis meses que después se fue prologando en 2020 hasta llegar a la última que venció definitivamente el 30 de septiembre de 2021. Esta sucesión de prórrogas y el vencimiento del contrato ha sido recibido con estupor por parte de los empleados públicos y dirigentes sindicales, que no entienden cómo se ha llegado a esta situación sin que se le haya buscado una solución en tiempo y forma.
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La instrucción dictada por la Dirección General de Función Pública establece que todos los fichajes de los empleados públicos afectados se realizarán mediante la generación de una incidencia de entrada y otra de salida en la web del Sicho ya que lo que queda invalidado por el vencimiento del contrato son los terminales físicos de control de presencia o las aplicaciones móviles correspondientes que se descargan los empleados para justificar la entrada y salida de su jornada de trabajo.
Preguntas destacadas
¿Qué es el Sicho?
El Sistema Integral de Control Horario (Sicho) es una aplicación informática aprobada en 2009 como sistema auxiliar y complementario del Sirhus para la gestión de los procedimientos en materia de personal. Esta modalidad deriva del decreto 78/2007 por el que se fijaba la jornada y el horario de trabajo del personal al servicio de la Administración Pública de la Comunidad Autónoma y se establecía el sistema de gestión de los mismos.
¿Qué abarca el sistema de control?
Como su propio nombre indica el Sicho es un sistema integral, por lo que no solo registra el control de entrada y salida diaria de la jornada laboral sino también el resto de procedimientos que afectan al personal de la Administración, en este caso vacaciones, permisos, licencias, jornada y horario de trabajo. Además de fichar, los empleados tienen que validar sus vacaciones o licencias a través de la aplicación para que queden debidamente registrados.
¿Qué se está pendiente de licitar?
El acuerdo del Consejo de Gobierno del pasado 15 de julio autorizaba un gasto de 3,4 millones de euros para el contrato del servicio de mantenimiento del Sicho. Según la Consejería de Administraciones Públicas, la nueva licitación difiere del contrato actualmente vigente, ahora lo que se necesita es el mantenimiento del Sicho dado que el mismo ya es propiedad de la Comunidad Autónoma. Esta circunstancia afecta al control de los terminales físicos de control de presencia y a la aplicación móvil. Desde 2019 se estuvo prorrogando el contrato adjudicado en 2015 pero el Ejecutivo ya no lo podía ampliarlo más.
¿Quiénes están afectados?
Los principales perjudicados son los empleados de la Administración General, alrededor de 12.000 trabajadores de las Consejerías, servicios centrales, organismos autónomos y otros departamentos de la Comunidad Autónoma. En el ámbito de la Sanidad el Sicho está en unas islas más implantado que en otras, si bien este sistema se utiliza por los trabajadores sanitarios para la gestión de los permisos, licencias y vacaciones. En el caso del vencimiento del contrato, Función Pública excluye a los trabajadores sanitarios y de la Administración de Justicia en el caso de los fichajes de entrada y salida de la jornada laboral diaria. En este caso cada departamento dará las instrucciones específicas para el control de estos centros directivos.