Un par de días de relax después de tres años de desgracias. El presidente del Gobierno canario, Ángel Víctor Torres, se ha tomado un descanso «relámpago» en la isla de La Graciosa, en Lanzarote, junto a su esposa Ivana Hernández y su pequeño hijo Miguel. Entre el incendio en Gran Canaria del año 2019, el coronavirus en 2020 -con el primer caso en la Gomera y el cierre del primer hotel en Tenerife-, la erupción del volcán de La Palma en septiembre de 2021, y ahora la guerra de Ucrania y el alto nivel de inflación, Torres está sin resuello. Le ha sido «imposible descansar», comenta, para hacer frente a tantas vicisitudes en los casi tres años desde que en julio de 2019 fue designado presidente por el Parlamento canario.
Dice su mujer Ivana que no ha tenido vacaciones desde entonces. Él recalca que con todo lo que ha pasado en las Islas, y pese a «la guerra y la inflación», tenía que «descansar un par de días», anticipando así las vacaciones de Semana Santa. Llegaron a la más chinija de las Islas el pasado sábado y ayer regresaron a Gran Canaria, donde hoy volverá a presidir el Consejo de Gobierno, que se adelanta precisamente por la Semana Santa.
La Graciosa prevé colgar el cartel de completo en estos días, sobre todo a partir de este Jueves Santo. A día de hoy es prácticamente imposible encontrar un apartamento libre en la octava isla canaria, señalan desde Caleta de Sebo. Es uno de los destinos preferidos por los residentes en el Archipiélago y también de la Península para pasar unos días de descanso. «Es una isla preciosa», remarcó ayer el presidente del Gobierno desde la Graciosa, quien aprovechó un viaje a Lanzarote para darse un salto a esta isla el sábado, y donde se le ha podido ver relajado disfrutando de su descanso, con ropa informal y en muy buena sintonía con sus habitantes.
De hecho, el presidente canario tiene muy buenas amistades desde hace décadas en La Graciosa, especialmente con una docente graciosera residente desde hace años en Arucas, municipio del que fue alcalde Ángel Víctor Torres antes de convertirse en el jefe del Ejecutivo regional. La pareja de la profesora es de Arucas y muy amigo del presidente.
Torres fue obsequiado con el libro Escrito en la arena, del graciosero Jesús Manuel Páez. La publicación reúne relatos de la octava isla y sus habitantes más conocidos.
La Graciosa ha sido desde antaño una isla muy visitada por los dirigentes socialistas, tanto canarios como de España, porque en ella tenía una casa la política isleña María Dolores Palliser. Por La Graciosa han pasado exministros como Joaquín Almunia, Rosa Conde, la desaparecida Carme Chacón o el propio expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.
La isla además se ha convertido en un lugar muy popular para la celebración de bodas de personajes famosos.
El presidente canario vuelve de este pequeño descanso para presidir el Consejo de Gobierno de hoy, con espinosos conflictos en el aire generados paradójicamente por el jefe del Ejecutivo de España y secretario general del PSOE ,Pedro Sánchez, que han tenido una alta repercusión en las Islas y han colocado a Torres en una situación muy incómoda, incluso, con sus socios de Gobierno.
Entre estos asuntos, se encuentran el giro del dirigente nacional sobre el Sáhara Occidental y la negociación sobre la delimitación de espacios marítimos en la fachada atlántica, o la propuesta de introducir el gas en las Islas en el real decreto para paliar las consecuencias de la invasión de Rusia sobre Ucrania.
En el Consejo de Gobierno de hoy se hablará previsiblemente de estos temas para fijar la posición del Gobierno de Canarias. El presidente canario ha manifestado en el Parlamento al respecto que pedirá a Sánchez que dé explicaciones en las Islas sobre su apoyo al plan autonomista de Marruecos sobre el Sáhara Occidental. En cuanto a las aguas ha valorado positivamente que Canarias tenga voz en la comisión de estudio en la que se fijará el límite de la frontera marítima con Marruecos, como uno de los grandes acuerdos de la nueva relación abierta entre ambos países. Torres ha recalcado que en esa comisión existe un representante canario desde su creación en 2003 y espera que, de esta forma, «queden las cosas claras y se eliminen de manera definitiva las decisiones unilaterales que tomó Marruecos», para que siempre estén dentro del marco de Naciones Unidas y del derecho internacional del mar.
Pero también quedan pendientes otros asuntos inmediatos, como que el Gobierno de España exprese que en Canarias no se introducirá el gas o medidas específicas para las Islas para controlar la alta inflación y que no han sido recogidas en el real decreto del Estado.
