El Gobierno regional intenta atajar el impacto de la subida de los precios en las familias con nuevas deducciones fiscales en el tramo autonómico del IRPF e incrementando las ya existentes en un 20% de media. El ajuste fiscal no supone tocar los tipos del gravamen sino introducir bonificaciones para las rentas medias y bajas, que incluyen ingresos por debajo de los 20.000 euros y hasta 40.000 euros, así como la ampliación de los cuatro primeros tramos autonómicos, que deja fuera a las rentas superiores a los 35.000 euros. Según las cifras de Hacienda, la nueva bonificación extraordinaria por el alza de precios beneficia al 85% de los contribuyentes, lo que supone más de 811.000, ya que el último dato oficial eleva a 954.521 los contribuyentes canarios que declaran el Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas.
Se trata de un ajuste fiscal «temporal y selectivo» que supondrá 105 euros de ahorro medio por contribuyente y 100 millones de euros de coste fiscal para las arcas de la Comunidad Autónoma. La nueva deducción extraordinaria por el alza de los precios será de 225 euros para salarios brutos de hasta 23.300 euros; de 175 para los de 28.700 y de 125 para los de 34.000 euros, según explicó el vicepresidente y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, el cual recalcó que duplica al que han aprobado otras comunidades autónomas, como Madrid o Andalucía, con la diferencia de que Canarias «no ha bajado ni bajará impuestos a los ricos», cosa que sí han hecho esas regiones, aseveró, comparando la decisión de la comunidad andaluza –gobernada por el PP– de suprimir el Impuesto del Patrimonio, algo que no hará Canarias.
Rodríguez fue tajante al asegurar que el Ejecutivo no va a «tocar» el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC), como tampoco otros tributos como el de sucesiones y donaciones. Añadió que quienes piden rebajar dos puntos el IGIC «además de unos irresponsables son profundamente incoherentes» ya que si estuvieran gobernando «tampoco lo harían» y se ha preguntado «cuántos alcaldes de CC y PP» apoyarían esta medida. También recordó que a la mayoría de productos básicos de la cesta de la compra se les aplica un tipo de IGIC cero y que Canarias goza de la imposición indirecta «más baja del mundo, un tercio de la española y de la europea».
El Consejo de Gobierno aprobó ayer el proyecto de ley de presupuestos de 2023, que se presentará en el Parlamento en una semana. Las cuentas del próximo año prevén un gasto de 10.180 millones de euros, un 11,9% más que las de este año, de los cuales 7.478 millones van destinados a la financiación de las políticas sociales y de los servicios públicos esenciales, un 9,4% de incremento. En un presupuesto claramente expansivo también hay un aumento significativo de la inversión pública de los capítulos VI y VII, con 1.764 millones y un 27,1% de subida.
Riesgos en el horizonte
Sin embargo la incertidumbre y la espiral inflacionista condicionan cualquier previsión de ingresos y gastos para el próximo año, lo que ha llevado a las consejerías de Economía y Hacienda a realizar unas estimaciones prudentes y a la baja. El escenario que se dibuja es de un 3,3% de crecimiento del PIB que puede caer hasta el 1,3% en un escenario más pesimista, porcentaje en el que también se sitúa la subida de la recaudación. La tasa de paro se mueve entre el 17 y el 19% y la inflación en el 3,7% de media. Pese a que se estimaba en un primer momento que se podría recuperar la actividad económica a los niveles de 2019, el hecho es que en el saldo del cuatrienio 2020-2023. Canarias se va a dejar un 3,4% de PIB por el camino debido al Covid, primero, y ahora a las consecuencias de la guerra de Ucrania y la inflación. En este sentido, la desviación del gasto público debido a la escalada de precios puede alcanzar los 500 millones de euros, que aumentarán en cerca de 50 millones más por el incremento salarial a los empleados públicos pactado para este mismo año. Rodríguez aludió al «esfuerzo extraordinario» que se ha hecho desde el sector público al haber aumentado el Gobierno de Canarias un 29,6% los presupuestos en los últimos cuatro años, de los 7.800 millones del presupuesto inicial de 2020 a los 10.800 millones del próximo ejercicio.
El presidente del Gobierno, Ángel Víctor Torres, subrayó que estos presupuestos son «los mejores de los presentados hasta ahora en las Islas» porque, entre otras cuestiones relevantes, van a aportar «certidumbres frente a las incertidumbres internacionales» y además vuelven a dar prioridad a los derechos sociales, la sanidad y la educación públicas, «que son las partidas que más crecen». Torres destacó la estabilidad que ha aportado el cuatripartito en estos años de crisis y escenarios sobrevenidos: «hay la convicción de los cuatro partidos que conforman el Gobierno en afrontar la realidad y los problemas desde respuestas progresistas y con la voluntad de seguir caminando».
En los gastos por capítulos el que más crece porcentualmente es el de las inversiones reales, con una previsión de incremento del 32,2% y 975,2 millones de euros. También hay una subida destacada de las transferencias de capital hasta los 788,8 millones, lo que supone el 21,4% más. También es significativo el aumento del gasto de personal –capítulo I– que supera los 4.000 millones de euros, entre otros motivos por el incremento de las retribuciones pactada a nivel estatal –unos 150 millones más junto a las cotizaciones a la Seguridad Social–, además de la consolidación de los empleados sujetos a procesos selectivos y las contrataciones.
En relación con las políticas sociales y la lucha contra la pobreza, Román Rodríguez remitió al aumento de un 9,46% del gasto social en las cuentas de 2023 y del 46% en el último cuatrienio. «Pido que comparen con otros gobiernos en épocas de vacas gordas», añadió el titular de Hacienda, quien también señaló que en la búsqueda del equilibrio y la cohesión social intervienen otros departamentos como el de Educación, que dedica casi 100 millones a ayudas de transporte, comedores, becas o material escolar.
Previamente a la aprobación del proyecto de ley de presupuestos, los miembros del Ejecutivo regional se reunieron con las patronales y los sindicatos en el Consejo Asesor. Inocencio González (CCOO) y Manuel Navarro (UGT) valoraron positivamente que en el actual contexto de incertidumbre los presupuestos sean «expansivos» y vayan dirigidos a proteger los servicios públicos y a aminorar el impacto de la inflación sobre las rentas medias y bajas, aunque se muestran prudentes hasta conocer los detalles de las cuentas. Por parte de los empresarios, el presidente de la patronal de Las Palmas, Pedro Ortega, valoró el ajuste fiscal realizado por el Ejecutivo «porque así se demuestra que se pueden tocar los impuestos como habíamos dicho», por lo que ahora espera que «se avance más» con el fin de favorecer también a las empresas en el apartado impositivo. También las patronales reclamaron al Ejecutivo que haya mayor agilidad en la concesión de ayudas y subvenciones a las empresas en el primer semestre del año ante el horizonte electoral que se avecina, tanto en mayo como en diciembre, para no llegar a los últimos meses del año como en anteriores ocasiones.
La tuitera Santana
La consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias, Noemí Santana, echó ayer mano de Twitter para anunciar que ha pedido tanto al Ejecutivo de Pedro Sánchez como «a las fuerzas políticas que apoyan el pacto» -es decir, al Partido Socialista y a Unidas Podemos, su partido- que «incrementen los fondos contra la pobreza en Canarias para luchar contra este gran mal». Lo hizo el mismo día en que el presidente y el vicepresidente del Gabinete regional, Ángel Víctor Torres y Román Rodríguez, presentaban los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2023. Y lo hizo, como también dejó claro en la red social de los 280 caracteres, porque «la pobreza no se derrota con palabras bonitas, se hace con fondos» -y con la palabra fondos en mayúsculas para darle mayor intensidad-. Estos dos tuits fueron publicados por la mañana, así que aparecían como una crítica implícita al Gobierno estatal de PSOE-Podemos, que también gobiernan en la Comunidad Autónoma. Cinco horas después, Noemí Santana, en un nuevo mensaje de Twitter, contrapuso la estrategia presupuestaria del Gobierno de Canarias a la del Ejecutivo central, con lo que la crítica a los socialistas y a su propio partido era ya evidente. «Hoy en el Gobierno de Canarias hemos aprobado el presupuesto para el próximo año; desde el 2019 hemos aumentado [en mayúsculas] un 46% la inversión en derechos sociales. Las palabras en política son bonitas, pero se convierten en realidad con presupuestos [también en mayúsculas]», sentenció la consejera autonómica de Derechos Sociales. | LP/DLP
