La confluencia de izquierda que ha estado fraguando Podemos se queda prácticamente sin aliados. En estos momentos solo la formación morada e IU han expresado un acuerdo formal en Canarias para acudir conjuntamente a las elecciones autonómicas, insulares y locales del 28 de mayo. En el camino de las negociaciones para hacer una amplia alianza de izquierdas pierden a Más Canarias, el partido vinculado al proyecto político de Íñigo Errejón, y Verdes Equo Canarias.
Podemos e IU mantienen la esperanza de que Sí se puede -con potentes plazas electorales en Tenerife como en La Laguna o en Buenavista del Norte- no se escape también de esta confluencia venida a menos.
Sí se puede se reunirá en asamblea el sábado para decidir dónde se posicionan. Caben dos alternativas: o con Podemos e IU, o con la confluencia cada vez más pujante entre el Proyecto Drago, liderado por el exdiputado podemita Alberto Rodríguez, Verdes Equo Canarias, Ahora Canarias y los Verdes Federación Verde.
Mientras, Más Canarias dice estar en un periodo de reflexión tras irse de la mesa de negociación por desavenencias con Podemos, Verdes Equo Canarias no se lo pensó dos veces y tras meses de reuniones optó, al final, por marcharse a la corriente de izquierda "de obediencia canaria" que promueve Rodríguez. Y todo hace pensar que Más Canarias también se unirá a esa alianza, pues no hay que olvidar que el proyecto de Alberto Rodríguez ha entrado a formar parte de los Acuerdos del Turia donde está Más País, junto a Compromís y Verdes Equo. En esa esfera de la confluencia que promueve el Proyecto Drago parece que además orbita Reunir, la formación creada por otros exmiembros de Podemos en la que se encuadra la diputada Meri Pita, adscrita ahora al Grupo Mixto en el Congreso y excompañera de Alberto Rodríguez en la Cámara baja.
Proyecto Drago aglutina ya a tres formaciones verdes y busca captar a más partidos
Por tanto, la confluencia de izquierdas que ha intentado Podemos por todos los medios desde el pasado mayo pierde a dos de sus cinco partidos antes de nacer, y otro de ellos, muy importante para la organización morada, se encuentra en la cuerda floja: Sí se puede.
El pacto Podemos -IU espera a que la asamblea de Sí se puede tenga una respuesta positiva para ellos el sábado y, por ello, aún no han establecido el orden de presentación al Parlamento canario, cabildos y ayuntamientos, porque no es lo mismo dividir posiciones entre dos que entre tres partidos, indica Laura Fuentes, coordinadora general de Podemos.
Desde Sí se puede afirman que todo está abierto, pese a que llevan meses negociando la confluencia con Podemos e IU y a que cogobiernan en ayuntamientos como en La Laguna o en el mismo Parlamento de Canarias Francisco Déniz está inserto en en el grupo parlamentario Sí Podemos Canarias junto a Noemí Santana, la que será la candidata a la Presidencia por la formación morada y sus confluencias.
El mandato de Sí se puede de la asamblea de julio de 2022 es buscar una confluencia lo más amplia posible, precisan fuentes del partido. Así han estado trabajando hasta ahora, pero al desinflarse la confluencia inicial de cinco partidos y tomar fuerza la liderada por el Proyecto Drago requiere «tomar una decisión en otra asamblea», exponen.
En Sí se puede al parecer hay ciertas diferencias porque mientras una facción gira más hacia el Proyecto Drago, otra entiende que el pacto de las flores ha funcionado y, por tanto, hay que aliarse con Podemos ya. En esa línea estarían Francisco Déniz, diputado por Tenerife, y Rubens Ascanio, primer teniente de alcalde y concejal de Bienestar Social y Movilidad Sostenible del Ayuntamiento de La Laguna. La posibilidad de que haya varias papeletas a la izquierda del PSOE en las autonómicas del 28 de mayo es cada día más cercana en Canarias.
Pacto Podemos -IU inédito
En cualquier caso, el pacto entre Podemos e IU es una realidad y es, por ahora, más potente -al menos en votos y representación institucional- que la confluencia del Proyecto Drago, que cuenta con partidos que tienen escasa representación en sufragios. Lo que está por ver es si Rodríguez con su nuevo proyecto moviliza a los 64.000 electores que le votaron por Unidas Podemos en las anteriores elecciones generales.
Según Laura Fuentes, el acuerdo con IU -que es un reflejo del acuerdo nacional- es «inédito» en Canarias. La diferencia con respecto a las elecciones de 2019 es que en esta ocasión concurren juntos al Parlamento canario, a los cabildos y a los ayuntamientos, mientras que en los anteriores comicios se presentaron conjuntamente en La Laguna y otras ciudades de importancia. A juicio de Fuentes, el hecho de que Podemos e IU concurrieran por separado al Parlamento o a los cabildos anteriormente hizo, por ejemplo, perder un diputado por Fuerteventura y un consejero al Cabildo de La Palma.
Según la coordinadora general de Podemos, lo que pretenden en este momento es mostrar que la unidad de la izquierda pervive y que están gestionando bien en ayuntamientos de gran importancia como en La Laguna. De hecho, si antes de que se fueran Equo y Más Canarias pensaban en crear una marca que los diferenciara como confluencia, ahora ya no le ven el sentido y consideran que funciona la fórmula de La Laguna y un buen nombre sería Unidas se puede Canarias.
Laura Fuentes afirma que «hay gente que solo está peleando por matar a Podemos»
Sobre la alianza que está promoviendo su excompañero Alberto Rodríguez con Proyecto Drago por bandera - y que ya le ha birlado, por ahora, a Verdes Equo-, Laura Fuentes expone que Podemos siempre ha estado abierta a que formara parte de la confluencia pero pese a que lo invitaron a distintas reuniones e incluso se habló de que liderara la lista archipielágica el dirigente tinerfeño nunca ha contestado. Es más en su Twitter, Rodríguez expone que «pactar solo para mantener puestos, estatus o dinero es política conservadora de la peor escuela», en clara alusión a Podemos.
A juicio de la coordinadora general de Podemos Canarias, en este momento «hay gente que solo está peleando por hacer desaparecer o matar a Podemos», pero indica que la unidad de la izquierda es su meta y la confluencia tiene vocación de hacerse estable después del 28-M, creando incluso órganos internos de representación que tengan un recorrido de cuatro años y también con la vista puesta en las elecciones generales de final de año.