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La Graciosa busca su sitio en el himno de Canarias: CC pide cambiar “siete peñas” por “ocho”

Los nacionalistas piden cambiar la letra mediante una ley y se unen a la iniciativa civil para que el escudo oficial de la Comunidad Autónoma represente también a La Graciosa

Vecinos de Caleta del Sebo, el principal núcleo poblacional en la isla de La Graciosa.

Vecinos de Caleta del Sebo, el principal núcleo poblacional en la isla de La Graciosa. / José Carlos Guerra

Salvador Lachica

Salvador Lachica

Santa Cruz de Tenerife

"Soy la sombra de un almendro, soy volcán, salitre y lava. Repartido en siete peñas late el pulso de mi alma".

Los versos del himno oficial de Canarias, que salieron de la mente del conocido músico Benito Cabrera en 2003, constan de 72 palabras y solo una de ellas podría considerarse antiestatutaria. Desde 2018, la Carta Magna canaria consagra que la Comunidad Autónoma la conforman ocho islas, incluida La Graciosa, pero en el himno ­–compuesto 15 años antes–, concretamente en el tercer verso del poema, se refiere a "siete peñas".

Y ese anacronismo es el que quiere cambiar CC, que ha presentado una iniciativa, que el 21 de octubre toma en consideración la Mesa del Parlamento, para promover una modificación de la ley de 2003 que hizo oficial la música del Arroró de los Cantos canarios de Teobaldo Power –con varios arreglos– y la letra de Cabrera para proceder a cambiar las "siete peñas" por "ocho peñas" y visibilizar así a La Graciosa.

Una propuesta legislativa que, aunque impulsada por CC, los nacionalistas quieren que la totalidad del arco parlamentario la asuma como propia para presentarla de forma conjunta. Solo Vox ha declinado pronunciarse al respecto, y el texto de los nacionalistas ya cuenta con el apoyo del PP, AHI, ASG, PSOE y NC-Bc.

Coherencia

"La realidad la van marcando la sociedad y los momentos históricos y, por coherencia, es lógico que los símbolos de la Comunidad Autónoma reflejen lo que dice el Estatuto de 2018", argumenta el portavoz y líder del NC-Bc, Luis Campos.

Por su parte, el conservador Carlos Ester confirma que "los grupos que apoyamos al Gobierno llevamos tiempo mirando la posibilidad de cambiar la letra del himno para adaptarlo al Estatuto con el que empezamos a ser ocho islas en lugar de siete"

No romper el consenso

El propio Cabrera reconoció a este periódico que "me han llamado para preguntarme si cambiar la letra implicaba transformar la melodía, y yo contesté que no", por lo que su respuesta dio vía libre a la iniciativa, ya que como se asegura en la exposición de motivos de la propuesta, "se mantiene inalterado el resto del texto y se preserva la integridad literaria del himno, sin alterar la partitura y evitando reabrir un debate estético o musical que ya fue resuelto por amplísimo consenso parlamentario" cuando se aprobó la ley de 2003.

La apelación a no reabrir un debate no es baladí, ya que el proceso de creación del himno oficial por iniciativa parlamentaria fue un proceso bastante largo y no exento de polémicas. En 1999 los grupos parlamentarios crearon una comisión de estudio por la que pasaron 47 expertos, entre ellos los directores de las dos grandes orquestas de las Islas y el propio Cabrera para opinar qué melodía representaba mejor a todos los canarios. En la terna final estuvieron, además del Arroró de Power, el popular pasodoble Islas Canarias y el Himno a Canarias del compositor grancanario Juan José Falcón Sanabria, con letra del poeta tinerfeño Fernando García Ramos.

Concurso desierto

Al final se adoptó la actual melodía y se pusieron manos a la obra para buscar un texto que la acompañara, para lo que se convocó un concurso público al que se presentaron 82 propuestas y que el jurado declaró desierto. Tras este fracaso, se encargó a varios letristas de prestigio crear unos versos acordes al Arroró y al final los escritos por Cabrera fueron los elegidos.

En abril de 2003 el Parlamento aprobó por unanimidad la ley del himno, que desde entonces permanece inalterada.

Reforma simbólica

La reforma que se propone, según explican desde CC, "es estrictamente simbólica y técnico-jurídica" con el fin de "alinear un símbolo oficial de alta proyección pública con el Estatuto de Autonomía vigente, favoreciendo la coherencia entre los emblemas institucionales y reconociendo a La Graciosa en el imaginario colectivo que el himno proyecta".

Además, CC defiende que su modificación «no afecta al escudo ni a la bandera de Canarias», aunque esta posibilidad –que implica modificar en el Parlamento el Estatuto de Autonomía y su posterior convalidación por las Cortes– puede quedar abierta, ya que el portavoz del PSOE, Sebastián Franquis, planteará el martes en la Junta de Portavoces, «aprovechar la coyuntura de modificar el himno para también cambiar el artículo 7.2 del Estatuto con el fin de que en el escudo se representen ocho islas y no solo siete, como sucede ahora».

Pacto de caballeros

Eso sí, la propuesta de Franquis debe ir acompañada de "suscribir un pacto de caballeros entre todas las fuerzas parlamentarias y no aprovechar esa reforma para abrir el melón de otras modificaciones, como puede ser el sistema electoral o cuestiones competenciales".

De esta manera, los socialistas se alinean con la iniciativa civil que impulsa la empresa Cumbre 8 Islas, de la que es fundador Marcos Cohen, para que el Cabildo de Lanzarote promueva la modificación estatutaria. Es más, el propio presidente de la corporación insular y diputado de CC, Oswaldo Betancort, se ha comprometido a que un experto en heráldica comparezca en el Parlamento para que explique si es viable la iniciativa y, de ser así, presentar una propuesta de modificación estatutaria que, por los tiempos de tramitación, sería complicado que estuviera aprobada antes de que concluya la presente legislatura.

La propuesta de Franquis podría servir para acelerar el cambio.

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