¿Qué se espera de la gala?

Locura, diversión, purpurina, color, risas, gritos... Es un poco como yo. Creo que esta es la gala ideal para mi, porque yo soy así. Por fuera soy todo purpurina, color, pero detrás de todo eso hay un trabajo y un tío que ha trabajado muchísimo. ¿Por qué a la gente le gusta tanto esto? Yo creo que el resultado que tu ves es una cosa muy divertida, muy fresca, con mucha purpurina, color, pero detrás hay tanto trabajo, la confección del vestuario, la coreografía, toda la gente que se involucra en esto, que es una cosa que yo noto mucho, que no es el drag solo sino que hay mucha gente detrás. Esto hace que, aunque pueda parecer una tontería, guste tanto.

Estuvo el lunes en la preselección donde incluso le clavó un beso en la boca a Roberto Herrera. ¿Qué impresión se llevó?

Llegué justo, a mitad, y muchos drags de los que vi ya los había visto porque hice un concurso de drags en la Televisión Canaria, Drags Superstar, que hacía de jurado. Y entonces lo que me sorprendió, aunque ya me lo esperaba, es el alto nivel, el como se lo trabajan y apuestan por esto, y al final muchas veces alguien lo puede frivolizar, ¡ay las drags!, incluso hay esa nomenclatura de reinona que es un poco despectivo. Pero yo no veo nada de vulgar a todo esto, al contrario, hay un gran trabajo detrás. Y esa imagen de frivolidad, que también me pasa a mi con mi forma de ser, hace que la gente a veces no sé por qué te respeta menos.

¿Qué va a aportar a la gala?

Descontrol -ríe-. Está todo controlado, pero el miedo que tiene Israel -Reyes, el director- es que me salga del guión, porque tengo mucha facilidad para irme de un lado a otro. Le daré frescura y diversión. Me apetece mucho. Hacía muchos años que hablábamos y nunca habíamos podido coincidir. Este año sí y aquí estoy, porque me apetece, y eso es muy importante, nadie me obliga a estar aquí.

¿Por qué no ha podido antes?

Porque siempre estoy trabajando. De hecho, ahora mismo estoy trabajando. A a las cinco [de ayer para el lector] cojo un avión a Barcelona, pero ahora desde Canarias Radio voy a emitir un programa en directo en Catalunya Ràdio, luego seguiré ensayando aquí, luego me iré a Barcelona, mañana por la mañana tengo radio otra vez, tengo unas cosas que grabar de Tu cara me suena, después tengo el programa en directo hasta las dos y media de la madrugada, y el viernes por la mañana cojo un avión, vengo para aquí, a las cuatro tengo ensayo y luego por la noche gala.

¿Y cómo aguanta todo eso?

¡Pero eso no es nada! Además estoy preparando un musical también, estoy con reuniones... estoy haciendo mogollón de cosas. Yo no sabía que la vida me había hecho hiperactivo, pero me gusta hacer cosas. A veces me miro y digo: 'uhh qué haces'. Pero lo llevo bien, con tranquilidad.

Con tanto trasiego, ¿cómo llegará al viernes?

El viernes es el peor día. Cuando me dicen: 'salimos que es viernes', les digo: '¡Pero qué dices, si estoy agotado!'. Pero me gusta mucho mi trabajo, entonces no me cansa. El viernes tengo ganas de que llegue para presentar la gala, eso no me cansa.

Usted es director de teatro. ¿No ha pensado ayudar a Israel Reyes para organizar esta gala?

No, no, con mis teatros y musicales estoy muy bien, la gala que la haga Israel y yo de cara a la galería.

¿Cuánto tiene de teatro una gala drag?

Yo creo que mucho porque tiene mucha preparación. El teatro es una arte que necesita mucho trabajo detrás, yo creo que un concurso como este también lo tiene.

De cara al futuro, ¿qué proyectos tiene en mente?

El futuro es el viernes. De ahí para adelante estoy preparando un musical y seguir con Tu cara me suena e ir viviendo. Y me he comprado un coche.

¿Cuál?

No te lo voy a decir, pero estoy muy ilusionado.