Hasta el próximo miércoles. El alcalde de la capital grancanaria, Juan José Cardona, se ha dado de plazo hasta ese día para trasladar los mogollones a un sitio alternativo a la trasera del parque Santa Catalina, en el caso de que en esa fecha no haya conseguido alcanzar un acuerdo con los vecinos de del edificio Simón Bolívar, número 5. El regidor no desveló donde está ubicado el lugar elegido como plan b para colocar los chiringuitos y se limitó a garantizar que el Carnaval de Las mil y una Noches tendrá Noches de Carnaval. El alcalde descartó la posibilidad de que la fiesta nocturna se traslade a El Rincón.

Cardona realizó estas declaraciones después de la lectura del pregón del Carnaval y expresó su esperanza de llegar a un acuerdo con los residentes. Al respecto, aseguró que el Ayuntamiento ha recibido la llamada de vecinos del edificio, para dar marcha atrás en su postura de impedir la celebración de los mogollones.

En palabras del alcalde, los vecinos han demandado, para alcanzar un acuerdo, un compromiso del Gobierno municipal para que el próximo año no se celebren los mogollones en la trasera del parque Santa Catalina.

"Seguimos trabajando", dijo, "en distintas iniciativas jurídicas para hacer valer lo que yo creo que es un derecho. Sigo sin entender que después de haber celebrado un carnaval tranquilo como el de 2014, esta comunidad de propietarios interpusiera un recurso y la juez suspendiera cautelarmente pocos días antes de comenzar la fiesta, algo que en mi opinión debería ser revisado".

Añadió que se va a "intentar mantener el diálogo con la comunidad de propietarios. El Ayuntamiento siempre está dispuesto al diálogo y a llegar a un acuerdo que posibilite el derecho al descanso".

A su juicio, tras las "medidas correctoras" relacionadas con el ruido y la limpieza, consideró que ahora "sí se dan las condiciones para que esa conciliación entre la fiesta y el derecho al descanso sea compatible".

"El problema", sostuvo, "es que los vecinos plantean que permitirían que el Carnaval se celebre este año si el Ayuntamiento les garantiza que los siguientes no se harán en la trasera de Santa Catalina y yo creo que es una posición de máximos que el alcalde no va a admitir. Yo admito que nos sentemos y que veamos qué medidas podemos introducir para corregir todo lo que sea necesario, pero si la contrapartida es que un juez ratifique que en los próximos años no se van a celebrar los carnavales en la trasera de parque, yo por ahí no voy a pasar. No lo voy a aceptar".

El alcalde aseguró que hay vecinos del edificio que se han desmarcado de la posición de la comunidad. "Cada día estamos recibiendo llamadas de residentes que me dicen que ellos defienden el Carnaval y que no se niegan a que la fiesta se celebre allí. La situación se mantiene porque la presidenta de la comunidad es más beligerante".