Llevan el Carnaval en los genes y el pasado domingo volvieron a demostrar que A ritmo de Carnaval nadie les gana. Se trata de la comparsa Aragüimé, ganadora un año más del primer premio de interpretación y de vestuario. Entre una y otra modalidad, la comparsa, nacida en el municipio de Agüimes hace doce años, tiene ya en su haber 15 premios en el Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria.

Los que no tuvieron la oportunidad de disfrutar de su actuación, en la que compitieron con otras ocho comparsas además del frío y de la lluvia que inundó esa noche Santa Catalina, tendrán una nueva ocasión en la gala de elección de la Reina, que se celebrará este viernes y que será retransmitida en directo por la Televisión Canaria.

Es una de sus primeras actuaciones tras ganar el concurso de comparsas adultas, aunque la agenda ya la tienen "a tope", explicaba esta semana su director, Francisco Macías Ortega, coordinador de festejos de Agüimes, orgulloso de que aquel proyecto que se creó hace más de una década en el municipio de forma espontánea en el mismo Carnaval de Agüimes haya cosechado tantos premios en los festejos de la capital y de que a algunas personas "se les haya solucionado la vida" en referencia a que la comparsa Aragüimé, dirigida artísticamente por Tony Espino, haya servido también para que muchas personas se encarrilaran por el camino correcto.

"Aquí a la gente se le lee la cartilla cuando llega, no se les echa porque bailen bien o mal sino por otras cosas. Queremos un equipo con buen rollo y no podemos dejar que un garbanzo negro nos estropee la hoya", añadía Macías en relación al compromiso que se exige a quien quiera entrar en la comparsa.

Ayuda municipal

Sus éxitos se han conseguido gracias a esa disciplina y al esfuerzo de sus componentes y, por supuesto, de los 1.800 euros de ayuda del propio Consistorio de Agüimes, que incluso les presta una nave de 500 metros cuadrados para que ensayen ellos y el resto de los grupos de Carnaval, las pequeñas cuotas mensuales y alguna que otra subvención. Un dinero que tampoco les da para contratar a un grupo musical que les acompañe en directo como ocurre a las comparsas en los Carnavales de Santa Cruz de Tenerife.

En este sentido, su responsable criticaba "en plan positivo" que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria no contribuya a su sostenimiento cuando son una pieza clave en el espectáculo de las galas y de la promoción de los festejos porque no se entiende un Carnaval en Las Palmas de Gran Canaria sin el ritmo y las plumas que ponen en marcha los comparseros.

"El nivel de las comparsas adultas ha subido en los dos últimos años en la capital", reconocía el director días después del concurso en clara referencia al espectáculo visual y musical que se ofrece gratuitamente en el Parque de Santa Catalina cada año.

En esta edición, a punto estuvieron de tener un contratiempo con una chica que se resbaló antes de subir al escenario. Y es que las caídas es lo peor que le puede ocurrir a un comparsero y a la propia agrupación, compuesta mayoritariamente por jóvenes entre 17 y 30 años, la mayoría mujeres.

El vestuario es otro de los elementos fundamentales de su puesta en escena. Para esta edición se han gastado unos 12.000 euros en que las costureras dieran vida a Amanecer en Arabia.

La comparsa Aragüimé contó durante cinco años con una agrupación infantil pero las dificultades que ponían los padres echaron marcha atrás el proyecto en el que se hacía cantera. "El proyecto era muy bonito pero los padres eran peor que los niños y había que tener mucho compromiso porque se trataba de menores".