"Como una chola de parte educativa, como una chola, que es teledirigida, ¡Como una chola!". Lazos grandes de colores, pelucas de pelo rizado tras quitarse los rulos, rebequita de punto y un traje floreado. Nueve madres de lo más particular están callejeando estas semanas por los carnavales de Canarias con la intención de llevar la fiesta fuera de los escenarios. Tras cuatro años en las carnestolendas, la Chirimurga del Timple se ha convertido en todo un clásico.
Con unas letras ácidas de parodia y sátira de la sociedad y la vida cotidiana, los nueve componentes de esta agrupación han creado una mezcla entre las chirigotas andaluzas y las murgas canarias con éxito. Hasta tal punto que este fin de semana saldrán de las fronteras del Archipiélago por primera vez y participarán en el Carnaval de Cádiz, con el apoyo del Ayuntamiento de la capital grancanaria, según ha reseñado uno de sus miembros. Unos días en los que desparramarán sus versos por las calles de esta ciudad del sur de España.
Para los carnavales de 2019, la chirimurga se ha decantado por un disfraz titulado Servicio 24 horas. "Un pequeño homenaje a nuestras madres", señala el cantautor Ardiel Zaya, uno de los componentes de la agrupación. Las nueve señoras, cansadas de tanto limpiar, hicieron acto de presencia por primera vez ante los focos durante el pregón de las fiestas el pasado 15 de febrero. Cada una de ellas lleva al cuello un mini tupperware sonoro, pues en su interior van los pitos de la murga, además de una chola "teledirigida" enganchada al cinturón del vestido.
Sus letras consiguen sacar las carcajadas del público con temas tan recurrentes como saber dónde se encuentran los hijos a altas horas de la noche, , "ya lo cogió un coche", afirman asombradas; denuncian ese afán de los progenitores por dejar al nene con la abuela o "el drama" que se montan esas madres cuando de pronto ven una llamada del vástago tras varios días sin saber de él. No sin antes olvidar el clásico "ponte una rebequita" antes de salir en Carnaval de noche, porque, claro, ellas continuamente avisan y siempre tienen razón.
En estas carnestolendas han podido disfrutar de sus cuplés y pasodobles mascaritas de Gáldar, Arrecife, Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria. Precisamente, cuando su viaje entre estas dos últimas ciudades se ha convertido en viral en las redes sociales. Los nueve de la Chirimurga sacaron las carcajadas de los pasajeros del Fred Olsen a ritmo del "¿Vienes a comer? ¿No? Pues devuélveme los tuperwares". El vídeo publicado en Facebook supera ya las 200.000 reproducciones.
Pero esta no es la primera vez que los nueve músicos se convierten en sensación para los internautas. La canción Por un Carnaval limpio, tema que interpretaron hace un año cual cuadrilla de barrenderos, roza las 750.000 reproducciones en Facebook y supera las 50.000 en Youtube. Todo un fenómeno que ha logrado, incluso, cruzar el charco. "Tenemos constancia de que una empresa de reciclaje de Argentina la ha utilizado como parte de una campaña en redes", señala Zaya.
El tema, el cual utiliza como base la archiconocida Despacito de Luis Fonsi y Daddy Yankee, está siendo utilizado de manera didáctica en colegios en diferentes provincias españolas. Sin contar con las felicitaciones que han recibido desde tierras americanas. "Estamos flipando con toda la repercusión que hemos creado", apunta el cantautor.
Pero, a pesar del éxito de Los que hacen la calle, su fantasía en 2018, los del Timple también han recibido críticas por parte de muchos carnavaleros. Desde impostar el acento andaluz hasta acusarles de traer un género ajeno al Archipiélago. "Realmente no somos una cosa ni la otra", señala Zaya. Su labor "no es la de imitar", reitera, ellos se encargan de adaptar géneros musicales carnavalescos sureños, tales como los pasodobles, a la realidad de las Islas. "Utilizamos timples y cajones, eso en Cádiz sería una aberración en una chirigota", indican.
Víctor Lemes, Luis Quintana, Rubén Rodríguez, Ardiel Zaya, Luis Darias, Ángel Tovar, Félix Aguirre, Gerardo Suárez, José María Raposo y Casper han conseguido hacerse un hueco en el Carnaval de Canarias. "Nuestra filosofía no es subir a los escenarios, lo que hacemos es por y para la calle", subraya, con la intención de recuperar las actuaciones de los grupos carnavaleros fuera de los focos, como ocurría antiguamente. Los espectadores podrán volver a verlos el viernes 15 de marzo en Guía, el domingo 17 en Arucas, el 22 y 23 estarán en Tenerife, el 26 en el Carnaval de Arguineguín y el 29 en el de Santa Brígida.
