Plumas, brillo y mucho ritmo inundaron el escenario del Carnaval de Érase una vez... que anoche pusieron patas arriba las decenas de componentes de las comparsas adultas. Baracoa fue la encargada de abrir la competición que fue presentada por la periodista Marian Álvarez. Lianceiros, Chiramay y Cubatao les siguieron sobre las tablas de Santa Catalina sobre las que los diferentes grupos hicieron un despliegue de coloridas coregorafías en las que no faltaron la originalidad ni el talento. La segunda parte del concurso comenzó de la mano de Yoruba, a cuyos bailarines siguieron los de Nuevo Estilo, Kisamba y Bahía Tropical. Ninguna de ellas había actuado al cierre de este periódico al igual que el jurado tampoco había dado el veredicto con el nombre de la ganadora de esta edición.

La velada de cuentos más movida arrancó con los de Jinámar. Ante un abarrotado parque, la treintena de comparseros de Baracoa transformaron el proscenio en una sabana presidida por una pantera gigante con la que dieron el pistoletazo de salida a su show Existen guerras perdidas, pero no existe razón para rendirse.

El animal print y los sonidos de la selva dieron paso a los colores, las frutas tropicales en la cabeza y las letras de la carnavalera por excelencia, Celia Cruz que con temas como La Pachanga llenaron de ritmo y 'sabor' la actuación que culminó con una gran fiesta, tal y como canta Olga Tañón. Los de Jinámar se despidieron a ritmo de samba antes de dar paso a sus compañeros -y vecinos-.

Los de Lianceiros viajaron hasta los años 70, la década de Grease, película que protagonizó su obertura en la que, por supuesto, estuvieron Danny Zuko y Sandy. Las canciones más icónica de la famosa producción cinematográfica sonaron sobre las tablas del carnaval de los cuentos antes de pasar a la salsa en el espectáculo Nosotros podemos.

Los comparseros hicieron vibrar al parque con voces conocidas como la de Carlos Vives, entre plumas que iban cambiando de tonalidades según la rumba o el merengue que también se iban alternando durante la puesta en escena en la que tampoco faltó la música brasileña con la que también acabó la actuación.

Desde San Cristóbal llegó en tercera posición Chiramay que comenzó su número en pleno océnano, donde sus bailarines y bailarinas agasajaron a los reyes del mar con bailes y vestuario de fantasía. La explosión de color llegó tras la obertura, al son de Cachondea, la canción a la que sucedieron diferentes ritmos y cambios de vestuario, uno de los más espectáculares insipirados en México.

Jennifer Lopez y su conocido Let´s get loud animaron el ambiente del parque que vivió su noche más sandunguera gracias a la decenas de hombres y mujeres que integran las ocho comparsas. Los del polígono homenajearon al Archipiélago con Canarias de Lennis Rodríguez, si bien el broche de oro llegó con Rumba de la buena de Aymee Nuviola, " pa' soltarlo ".

También desde Jinámar llegaron los de Cubatao que arrancaron su actuación al puro estilo de las Mil y una noches, con trajes y danzas orientales que dieron paso en cuestión de segundos a los ritmos más latinos que hicieron de Just dance and dream un colorido y alegre espectáculo.

Bomba que bomba de Huracán de Fuego son algunas de las letras que suenan durante la interpretación en la que un enorme cartel con el nombre de la agrupación presidió durante un rato las tablas del Carnaval. Amarillas, negras, naranjas, rojas, rosas, blancas, azules, los comparseros pusieron a 'volar' las plumas, tal y como aconseja Ninetoes. Los de Cubatao también acabaron su número al puro estilo de Río de Janeiro con plataforma incluida a lo sambódromo sobre el que una de las componentes puso el broche de oro.

Tras ellos, llegó el turno de Yoruba, Nuevo Estilo, Kisamba y Bahía Tropical que, al cierre de este periódico, aún no habían actuado para el público de Santa Catalina. Del mismo modo, tampoco el jurado había desvelado su veredicto con el nombre de la comparsa ganadora del concurso en el que el público también pudo disfrutar de las actuaciones musicales de Mister Mimon y Grupo Acuarela.