Susana Bianca Berry está acostumbrada a la pasarela desde que tenía cuatro añitos. A día de hoy trabaja como modelo de talla grande y ayuda a otras mujeres que se sienten descontentas con su cuerpo o sufren trastornos alimenticios. De 26 años y natural de Maspalomas, presentará la fantasía Mil corazones latiendo, del diseñador Nauzet Afonso y con el patrocinio de Mc Donalds.

¿Cómo llegó a ser modelo curvy?

Yo era modelo de tallas normales desde chiquitita. Pero lo de modelo curvy empezó hace unos seis o siete años.

¿Cómo fue el cambio?

El Corte Inglés estaba buscando modelos de talla grande y fui a probar. Entonces tenía una talla 38 - 40 y no llegaba a ser lo que pedían, pero me presenté y me cogieron. Desde entonces he estado muchos años trabajando con ellos, y sigo a día de hoy. Luego trabajé en Moda Cálida y ahí me di a conocer por ser la primera y la única chica curvy en toda la pasarela.

¿Aún es la única modelo con más talla en la pasarela?

Sí. Ojalá algún día eso cambie y haya más diversidad. No sólo yo, sino muchas modelos de todo tipo de cuerpos. Si miras en el mundo real ves que hay mujeres y hombres de diferentes alturas, razas, pesos, edad... Yo lo que apoyo es que haya de todo. Me encantan las modelos delgadas, pero siempre pido que haya diversidad y que todo el que esté viendo la pasarela se sienta identificado con las modelos.

¿Qué significaría coronarse como Reina del Carnaval?

Significaría muchísimo. Llevo luchando por ser candidata desde pequeñita. Era mi sueño. Me presenté al castin de Willy Díaz en su momento y lo intenté también con Fernando Méndez.

¿Cómo consiguió ser candidata finalmente?

Yo estaba en Madrid, participando en un programa de televisión que aún no se ha emitido, cuando Nauzet me llamó. Aquello al final no salió y cuando volví a la isla quiso hablar conmigo en persona. Yo justo estaba en Conforama comprando y Nauzet vino hasta la tienda y allí mismo me lo dijo, en el aparcamiento. Y, vamos, no me lo podía creer.

¡Qué curioso!

Él suele preparar vídeos informando a sus candidatas, pero fue todo muy rápido. Yo ni me lo pensé. Justo tenía la boda de mi prima el día del pregón, y decidí faltar para asistir a la gala. Nauzet me dijo que si quería ir a la boda que fuera y ya me presentaría el próximo año... Pero yo le dije que no. Las oportunidades pasan una vez y hay que aprovecharlas.

¿Se está preparando físicamente para llevar el traje?

Arrastro muchísimo el traje, miedo me da... Yo tengo muchísima fuerza y no tengo miedo en ese sentido. Es un traje de muchos kilos, pero siempre he hecho deporte y he sido bailarina. Lo único que me pareció que podría ser más complicado es el casco. Pero creo que en el momento de la gala no lo piensas, ni te duele nada. Piensas sólo en comerte el escenario y aprovechar esos tres minutos al máximo.

Este Carnaval va de cuentos... ¿Quién sería su hada madrina?

Mi pareja. Aunque es un hombre, él sería mi hada madrina. Es quien me anima siempre y me apoya cuando lo necesito.

Pues justo ha sido san Valentín...

Yo prefiero que me sorprenda un día que no es nada, que un día que todo el mundo regala flores porque es lo que toca.

¿Qué súper poder le gustaría tener?

Me gustaría teletransportarme o leer los pensamientos de la gente. No en todos los aspectos, que sería muy complicado, más bien para ayudar más fácilmente. A veces, saber lo que piensa la persona es importante para poder ayudar.

¿Cómo ayuda a esas chicas descontentas con sus cuerpos?

En redes sociales inspiro a otras mujeres a que se acepten tal y como son. Desfilando y siendo candidata a Reina del Carnaval sé que motivo a muchas chicas que, por tener un par de kilos de más, no se sienten bien consigo mismas. Muchas veces me he emocionado con mensajes de niñas de 14 o 15 años que están sufriendo, con bulimia, y que me escriben o me preguntan. Me emociono porque son cosas que he vivido y sé lo que duelen.

¿Qué le ayudó a superar la bulimia?

Un día decidí que no quería seguir así, estaba sufriendo mucho y no quería eso para mí. Me pasaba el día entrenando, con dietas, bailando, y encima vomitando... Un día dije o lo paro yo, o al final voy a acabar muy enferma.