La candidata Míriam Silva Sánchez abrirá la gala de la Reina del Carnaval el próximo 21 de febrero. Algo que su abuelo, Domingo Sánchez Martel, agradece mucho, ya que, al ser la primera en desfilar, no tendrá que quedarse tantas horas pendiente de ver a su su nieta por la televisión. La aspirante que saldrá en primer lugar tiene 31 años y es natural del municipio de Telde. Con el patrocinio de Airvema Insular y un diseño de Samuel Castellano, presentará la fantasía Hija de la profecía.

¿Cómo le dio por presentarse a Reina del Carnaval?

Fue a través de Samuel Castellano, que, además de mi diseñador, es mi primo. En 2018 me propuso ser su candidata, pero ese año yo trabajaba mucho y no tenía tiempo. Estaba en un puesto de responsabilidad y trabajaba seis días a la semana, así que le dije que no. Este año me lo volvió a proponer y ya no podía rechazarlo. Las segundas oportunidades hay que aprovecharlas. Hay que subirse al tren y tirar para adelante.

¿Cómo lo está compaginando con su trabajo?

He pedido esta semana de vacaciones porque si no me era imposible: trabajo de lunes a sábado. No te voy a negar que al principio sí que estaba un poco agobiada. Porque me vi de repente entre el trabajo, ir al taller a ayudar al equipo, visitar a mi abuelo que está en el hospital y otras cosas de la vida diaria, como poner lavadoras... Me agobié un poco. Pero ahora se está acercando el día y es cuando más ilusionada me veo, cuando más ganas tengo de que llegue ese día.

Ya no queda nada...

No... De hecho ayer ya lo viví con la Reina Infantil.Vi a las niñas, todas preciosas, nerviosas, y me imaginé allí como ellas. Pensé "así me voy a ver yo" y me empecé a poner nerviosa y hasta lloré. Ellas lloraban y yo con ellas. Tengo muchísimas ganas de vivir la experiencia.

¿Se había subido antes al escenario del Carnaval?

A Reina es la primera vez que me presento. Pero en 2014 participé en la Fashion World, también con diseño de Samuel Castellano, y en 2016 en el concurso de maquillaje corporal con mi amiga Sara Montesdeoca. Me encantó todo. Fue una experiencia inolvidable.

¿Se ha dedicado al modelaje?

No he ejercido de modelo, pero siempre me ha gustado el mundo de la moda y la fotografía. Nunca me he dedicado a ello profesionalmente. Trabajo en una empresa textil desde hace años y ahora soy encargada, con lo que tengo más responsabilidad y más horas.

¿Cómo llevan sus compañeras trabajar con una aspirante a Reina carnavalera?

Están supercontentas, cada vez que pasa alguien le dicen: "Mira, mi compañera se presenta a Reina del carnaval". Y les dicen mi número para que voten.

¿Qué significaría para usted recibir el cetro?

Sería una ilusión tremenda y una responsabilidad también muy grande. Porque conlleva ser la imagen de Las Palmas de Gran Canaria allá donde vayas. Sería llevar a tu isla y representarla fuera. Me sentiría muy orgullosa

Ya que este año va de cuentos... ¿Qué deseos pediría al genio de la lámpara?

El más importante es que mi abuelo me pudiera ver en el parque. Y por supuesto dejar a mi diseñador y a mi patrocinador, Ovidio, en buen lugar. Airvema ha apostado por mí desde el minuto numero uno y se lo agradezco mucho porque, si no, no estaría aquí. Me gustaría que se sienta orgulloso de mí.

¿Quién sería su hada ma- drina?

Mi abuela, que fue la que me crio.

¿Y su Pepito Grillo?

Mi madre. Aunque no nos veamos mucho, siempre está ahí.

¿En su familia hay sangre carnavalera?

Mucha. Hacemos disfraces toda la familia, desde el día número uno e incluso desde varios meses antes estamos ya planeando y preparando los disfraces.

¿Son de hacerlos a mano o comprarlos?

De hacerlos. El año pasado nos disfrazamos todos de duendes. Lo hicimos todo nosotros, con goma eva, montón de purpurina, cola y pistolas para un lado y para otro... La noche previa fue cuando mejor lo pasamos, porque nos quedamos hasta las tantas de la madrugada para terminar el disfraz. Siempre nos vemos a última hora pegando alguna cosilla...

¿Es más de Carnaval de día o de noche?

Donde más disfruto es en el Carnaval de día. El ambiente es más sano, no tiene nada que ver con el de noche. Van también familias, padres con sus hijos... Yo lo disfruto mucho más. Según llega la noche todo el mundo se vuelve un poco más loco, ya ni siquiera van pintados igual, ni tienen las mismas caras...

¿Con qué personaje de cuento se identifica?

Yo diría que con la Cenicienta. Porque me he criado en una casa muy humilde y he carecido de muchas cosas. Siempre me he dedicado a trabajar para salir adelante y al final, poco a poco, esas experiencias me han llevado a crecer como persona. Y ser feliz, que es lo más importante.