Nunca había vivido unos carnavales hasta que llegó, hace ya 14 años, a Gran Canaria. De procedencia rusa, esta asesora fiscal e inmobiliaria de 29 años se define a sí misma como una mujer fuerte. Una cualidad que cuenta que también estará presente en la fantasía La guardiana del Fénix diseñada por Willy Jorge que lucirá en poco más de un día sobre el escenario del parque Santa Catalina.

¿Cómo ha llegado a convertirse en candidata a Reina?

Pues la primera vez que vi la gala, que fue a los pocos años de llegar aquí, me impactó y me quedé mirando y dije: algún día tengo que probar esta experiencia, para ver cómo es y qué es lo que se siente. Siempre lo tuve en la mente, pero el que me dio el empujón fue mi novio, que me empezó a decir que me informase y que viese la forma en la que se podía hacer. Y así fue. Empecé a informarme y cada vez me fue gustando más y nada, aquí estoy y espero vivir esta experiencia al máximo y recordarlo para toda la vida.

¿Qué cree que se va a llevar de esta experiencia?

Como nunca me he dedicado a nada relacionado con el modelaje ni he participado en ningún concurso por el estilo, creo que me llevo la experiencia de que me hagan fotos, ir a varios eventos y pasármelo bien. Porque no todo es trabajar [se ríe].

¿Ya ha visto la fantasía que va a llevar?

Sí, la he visto e incluso estoy yendo cuando puedo al taller y para echar una mano. Willy intentó hacer una fantasía más o menos que se asemeje a mi carácter.

¿Prefiere crear sus propios disfraces o comprarlos ya hechos por un hada madrina?

Prefiero hacerlos yo porque soy una manitas. Cuando Willy me da algo, me quedo un buen rato pegando lentejuelas porque me relaja un montón.

¿Se ha hecho algún disfraz del que se sienta orgullosa?

Sí, de geisha. La segunda vez que me disfracé me compré una tela roja y me hice un vestido y luego me hice el peinado y el maquillaje.

¿Le gusta el Carnaval desde siempre o fue algo que conoció al llegar a Gran Canaria?

En Rusia no hay nada parecido y en mi opinión es algo que se pierden. Deberían hacerlo al menos una vez para que la gente intente experimentar lo que se siente en este tipo de fiesta. Así que yo no conocía nada hasta que llegué aquí, hace 14 años. Y fueron mis amigas del colegio las que me dijeron que me fuera con ellas y me hicieron disfrazarme y todo. La verdad es que me sentía un poco rara, pero me gustó.

¿Cuál es el mejor recuerdo que guarda de los carnavales que ha vivido?

Los de la etapa del instituto. Lo pasábamos muy bien porque salíamos con un grupo grande de gente, conocida y no conocida, y cada día nos disfrazábamos aunque fuese con lo primero que encontrabas en casa.

Si pudiera promocionar la fiesta en Rusia, ¿cómo lo haría?

Habría que ir poco a poco porque los rusos son un poco especiales y cerrados. Habría que empezar enseñándoles, por ejemplo, la gala de la Reina del Carnaval, que vean vídeos y mostrarles lo bien que se lo pasa la gente en estas fiestas.

Si se encontrase una lámpara maravillosa, ¿qué tres deseos pediría?

El primer deseo, la salud. Parece muy típico, pero yo tengo hipotiroidismo y me gustaría que se me quitara, porque en mi opinión soy demasiado joven para tenerlo. El segundo, sería la tranquilidad porque últimamente veo a la gente muy estresada, corriendo de un lado para otro, y querría que pudiera relajarse un poco más. Y el tercer deseo sería que me den ya la nacionalidad, porque la estoy tramitando y están tardando demasiado [se ríe].

¿Es más de 'pelazo' como Rapunzel o de estar entre libros como Bella?

Soy de las dos cosas. Me encanta leer, estudio mucho porque mi trabajo me lo exige y siempre estoy en la oficina leyendo o informándome de algo. Y también me gusta arreglarme.

De todos los cuentos, ¿cuál diría que es su favorito?

Además de Maléfica, hay otro que me gusta mucho. Mi nombre completo, con el que me bautizaron, es Vasilisa y en un Rusia hay un cuento que se llama Vasilisa la bella, y me encanta.

¿Qué significaría para usted convertirse en la Reina del Carnaval?

Sería algo increíble. No sé si ganaré, pero para mí participar ya es un orgullo y al no ser de aquí sería doble orgullo.

¿Con qué personaje de cuento se identifica?

Me identifico con Maléfica, aunque hay dos. Una es la del cuento, que es la mala, y otra es la de la película sobre ella, que es una versión diferente en la que es una mujer fuerte y buena de corazón. Y yo me he llevado muchos palos en la vida, pero siempre supe salir, así que Maléfica es lo que más se acerca a mí.