Gran Canaria sigue de Carnavales y con ello continúa el ingenio y creatividad en sus fiestas. Y es que las carnestolendas son un reflejo de lo que está viviendo la sociedad.

De las miles de mascaritas que llenaron el pasado sábado el casco histórico de la capital grancanaria en el Carnaval de Día, un grupo de amigos destacaron sobre el resto al ir ataviados de operarios de obras que instalaron en la calle Obispo Codina un improvisado carril bici en miniatura que atrajo todas las miradas y humor de los asistentes.