No hay nada peor en el deporte que dejarse engañar por la clasificación. La tabla dice mucho, pero no lo es todo. A veces miente. Y este domingo (12.00 horas, Movistar +), el Herbalife Gran Canaria, que recibe al San Pablo Burgos, uno de los equipos anclados en descenso, podría enfrentarse a una de esas medias verdades de la clasificación. Ocurre que el cuadro de Diego Epifanio ´Epi´ ha levantado el vuelo tras un comienzo de temporada en el que sufrió el mal de altura del recién ascendido. Pero ya han completado el proceso de adaptación y encadenan dos victorias en las tres últimas jornadas, por lo que aterrizan en la Isla en su mejor momento del curso.

El Herbalife Gran Canaria no suele dar pie a estas sorpresas en el Arena. La concentración y buena mentalidad es una de las virtudes en casa del equipo de Luis Casimiro, que debe mantener esa actitud para evitar un pinchazo que no se puede permitir. Y es que el Herbalife recibe al San Pablo en la séptima plaza, superado ya por un Baskonia lanzado desde la llegada de Pedro Martínez, y por las revelaciones Monbus Obradoiro y Montakit Fuenlabrada.

El calendario no da tregua al cuadro claretiano, que antes de cambiar el año tiene que visitar al Barcelona y al Iberostar Tenerife, motivo extra por el que debe hacerse fuerte en el Arena para no perder de vista a los mejores de la Liga Endesa.

El Herbalife viene de cerrar una herida, la que le salió por la derrota de la semana pasada ante el Real Madrid, previsible pero demasiado rotunda, y por las críticas de Shaquielle McKissic a Luis Casimiro. El alero estadounidense acusó por redes sociales al técnico de agredirle físicamente, polémica que tanto el equipo como el club supieron cortar por la vía rápida al rescindir el contrato del jugador y vencer el siguiente duelo.

El momento era delicado porque tocaba recibir al Tofas Bursa con el futuro de la Eurocup en juego y sin Rabaseda ni Pablo Aguilar, ambos lesionados. Pero con nueve jugadores del primer equipo el plantel mostró su compromiso y su orgullo para sacar adelante el encuentro. Además, el duelo se coronó con el debut en casa de los jóvenes Jovan Kljajic y Olek Balcerowski. Lo que podía ser un drama lo convirtió el equipo amarillo en una fiesta.

Tras ese respiro llega la cita frente al Burgos. El triunfo ante el Tofas Bursa no es la única alegría desde entonces. Y es que Xavi Rabaseda ya se encuentra recuperado de la lesión que sufrió durante las ventanas FIBA y volverá a jugar aunque no esté al cien por cien. Quien todavía no está apto es Pablo Aguilar, por lo que los más jóvenes seguirán teniendo oportunidades para jugar.

Casimiro pide mentalidad

Luis Casimiro, consciente de que afronta una trampa, avisó al equipo de que necesitan tener todos los sentidos puestos en el partido: "Es complicado ganar cualquier partido de Liga y siempre es fundamental mirarnos a nosotros mismos. Si salimos con la concentración máxima en el esfuerzo a la hora de realizar cualquier pequeño detalle que tenemos preparado, haciéndolo al 100%, estas cosas nos van a ayudar", indicó.

En este sentido, recordó los últimos resultados del Burgos: "Viene de vencer en Bilbao y ha sumado sus dos victorias en sus partidos más recientes. Deon Thompson es su mayor baluarte, sin olvidar a Corey Fisher, a Jenkins, a Huskic, es un equipo peligroso, como ya lo demostraron el otro día en Bilbao, donde llevaron todo el peso del partido". "Deberemos tener en cuenta que ellos tienen buenos tiradores y dos bases con mucha experiencia", reiteró.

"No se puede dudar de la implicación que tienen mis jugadores. Poseemos un núcleo duro muy bueno que nos otorga un extra. Ellos eran conscientes de que ganando a Tofas podríamos vernos primeros de grupo y que si perdíamos se nos complicaba mucho nuestra clasificación", comentó al respecto del duelo del miércoles.

Por último, se alegró de la recuperación de Rabaseda: "Aunque aún no se encuentra al 100%, si todo transcurre con normalidad estará en disposición de poder ayudar al equipo", concluyó.