Esta historia me suena. Eso deben pensar los aficionados del Herbalife en la previa del duelo de la sexta jornada de la Euroliga que mide este jueves en el Gran Canaria Arena al equipo amarillo contra el Anadolu Efes de Estambul (20.45 horas, Movistar +). Y es que la secuencia de que el Granca se agarra a su poderío como local para subsanar su paupérrima imagen fuera de casa se trata de un hecho repetido varias veces en lo poco que se lleva consumido de la actual temporada.

Más que nunca, el cuadro claretiano necesita imperiosamente la victoria para dar un giro contundente a la irregular trayectoria que está describiendo la escuadra grancanaria en la campaña que todos señalan como la más importante en la historia del club, con su participación por vez primera en la máxima competición continental.

La ilusión se ha topado de bruces con el desencanto. Vale que el balance que lleva en la Euroliga no resulte sorpresivo por todo lo que conlleva actuar como principiante ante los mejores conjuntos del baloncesto europeo. Lo menos previsible, en un principio, era lo de la Liga Endesa, donde los de Salva Maldonado notan en demasía las exigencias del calendario, sobre todo cuando toca actuar lejos del fortín de Siete Palmas, cancha donde el Granca continúa manteniendo su histórico papel hegemónico.

En el torneo europeo, las prestaciones de los claretianos ante su público le bastaron para estrenar su casillero de victorias ganándole al FC Barcelona en un apretado final remontando. Luego llegaba el coco CSKA de Moscú y el Herbalife sorprendió al panorama baloncestístico del Viejo Continente plantándole cara a uno de los señalados a pelear por el título. Pero al final le faltó fuelle para rubricar la gesta.

A ese espíritu se encomienda el Granca ante la visita de este jueves del Anadolu Efes para mejorar su bagaje de una victoria y cuatro derrotas en la Euroliga, que lo colocan en el furgón de cola de la tabla clasificatoria.

Los jugadores apelan a la unidad y al apoyo de su afición, bastante descontenta con la imagen mostrada por el equipo en sus últimas apariciones; quemada no sólo por los resultados desfavorables, sino también por las sensaciones transmitidas sobre todo en los tres encuentros pasados tras el buen sabor de boca que dejaban los amarillos en Siete Palmas frente al CSKA a pesar de perder.

Y es que el rendimiento posterior del Herbalife frente al Delteco Gipuzkoa Basket y BAXI Manresa, en la Liga Endesa, y en la pista del Khimki de Moscú, en el torneo continental, ha desesperado a una buena parte de la hinchada.

Esta espera que frente al Anadolu Efes el conjunto que dirige Salva Maldonado vuelva a ilusionar con su juego e implicación, desechando el tono displicente mostrado en muchas fases de los encuentros precedentes.

Anhela la marea amarilla ver de nuevo en todo su apogeo al trío de exteriores americanos, como ocurría ante el Barça y el CSKA; con Clevin Hannah mostrando en su máximo esplendor la fiabilidad a la que ya nos está acostumbrando; con Chris Evans impartiendo magisterio en todas las facetas; y con DJ Strawberry en clave de Euroliga, donde ha exhibido sus momentos más pletóricos hasta el momento.

Pero no sólo con ellos, el resto del plantel deberá rendir al 100% para intentar plantar cara a un rival de relumbrón, con una rotación plagada de estrellas como son los casos de Shane Larkin, Adrien Moerman o Rodrigue Beaubois.

El Anadolu Efes se está caracterizando por sus excelentes prestaciones lejos de Estambul. Séptimo con un balance de tres triunfos y dos derrotas, el cuadro turco únicamente ha caído en uno de sus tres desplazamientos. En la última jornada salía perdedor frente al Armani Milan después de un triplazo sobre la bocina de Mike James.

Antes el equipo otomano, quinto mejor ataque y tercera peor defensa del torneo, daba buena cuenta del Bayern en Alemania y del Khimki en Moscú. En casa, ganaba en el derbi turco al Fenerbahçe y perdía contra el Zalgiris. La victoria del Granca, además, le serviría de rearme moral de cara al choque del sábado en el Arena ante el Iberostar.