¿Cómo está viviendo su tercera temporada en Burgos?
Muy contento, adaptado ya a la ciudad y muy contento con el club, que parece que sigue creciendo. Quitando el mal tiempo que hay por aquí para un canario, todo va bien [ríe].
En esa línea de crecimiento que se percibe por parte del Burgos, ¿dónde cree que está el techo del club?
El objetivo principal de cada año es el de la salvación. Es nuestra segunda temporada en la ACB y ojalá pueda llegar una oportunidad de luchar por el Playoff, pero la verdad es que no pensamos en eso. Vamos partido a partido.
6,4 puntos, 1,6 asistencias por partido ¿contento con su números?
Igual que el año pasado fue mi primera temporada ACB, yo me contento con poder ayudar al equipo en lo que pueda. Estoy cumpliendo un sueño y cada año intento hacer más cosas. No pierdo la perspectiva tampoco. He luchado mucho por llegar aquí y disfruto de cada momento en la pista.
El Burgos acumula 8-12 de balance y se sitúan duodécimos en la clasificación. ¿Esperaba estar a esta altura de campeonato en esa zona tranquila?
Cada temporada es diferente y los equipos se refuerzan muy bien. También hay equipos revelación y otros que piensas que pueden estar más arriba y no llegan... Con nuestro inicio liguero se nos puso una expectativa muy alta para un equipo con un año de experiencia en la ACB. La Liga al final pone a cada uno en su sitio. Hay partidos que nos hemos ido dejando, entre comillas, y al final los hemos recuperado. Ahora estamos bien con la situación en la que estamos.
Llegan de dos victorias consecutivas frente al Delteco en casa por 96-73 y la última contra el Tenerife 83-88 en el Santiago Martín. ¿Cómo es el estado de ánimo del vestuario?
Esa racha ha llegado justo antes del parón de Copa y Ventanas... hubiéramos preferido que fuese en otro momento, la verdad [ríe]. También eso ha implicado que algunos de nuestros jugadores hayan tenido que viajar con sus selecciones, pero a todos les afecta. Ganar en Tenerife fue bastante importante para nuestra moral porque es una cancha súper difícil. Ahora vamos a ver cómo nos sincronizamos ya que solo habremos entrenado tres veces todos juntos antes del partido contra el Granca.
Imagino que antes de empezar la temporada, el partido del domingo contra el Granca estaría señalado en rojo en el calendario. Ahora están a dos victorias de ustedes y se antoja de vital importancia para los insulares, ¿qué espera del encuentro?
Será complicado, como todos los de la Liga en realidad. Están en esta situación por tener que combinar las dos competiciones, ya es algo obvio. De todos modos, el Herbalife tiene una muy buena plantilla y encima parece que se ha reforzado bien y están recuperando jugadores. Estoy seguro de que el Granca reconducirá su situación.
Ahora que el Granca atraviesa un desierto entre Euroliga y Liga Endesa, se ha hablado mucho de darle minutos a los canteranos en los encuentros continentales, pero el papel de Javi López, Balcerowski y Kljajic ha sido residual. ¿Qué opina al respecto?
Entiendo que es una situación complicada. Pero conozco a Víctor [García] y pocos habrá mejor que él para confiar en los jóvenes. Ha sido director de cantera y si no lo está llevando a cabo es porque no se han dado las circunstancias o porque ha preferido no exponerlos en la Euroliga, no porque él no quiera. Asimismo, el club tampoco puede tirar esos partidos así como así poniendo a los juniors.
¿ Cómo valoraría el trabajo de cantera del club insular?
Me pillas un poco [ríe]. Sé que el equipo EBA está jugando muy bien, pero más abajo sí que no puedo decir nada porque lo desconozco. Pero solo con que los jugadores del EBA puedan entrenar con el primer equipo se entiende que se está haciendo un buen trabajo.
¿Cree que la desaparición del UB La Palma, en el que usted se forjó, fue un error del club?
No sé si fue un error, pero sí creo que hubiera sido una muy buena solución haberlo mantenido. Que tus jugadores se curtan en la LEB es diferente a que lo hagan en otra categoría y tenga la oportunidad de prosperar mucho más.
De aquel equipo, hoy están en la ACB: Edy Tavares, Fabio Santana, Christian Díaz; Luke Sikma brilló en su día en Valencia y ahora es uno de los líderes del Alba Berlín... se trabajaba bien en La Palma, ¿no?
Al menos diez jugadores de aquellos equipos estamos jugando en la máxima categoría o en segunda, caso como el de Óscar Alvarado [Carramimbre Ciudad de Valladolid de LEB Oro]. Roman Martínez jugó en Andorra, Bakary Konaté fue a Estados Unidos, Roeland Schaftenaar ahora está en Grecia (Larisa-Faros), Juan Palacios... Todos los que pasamos por allí hemos tenido nuestra oportunidad y la estamos aprovechando.
¿Cree que el gran valedor de todos esos jugadores fue Carlos Frade?
Sí, junto a Himar Ojeda, que era el director deportivo del equipo, iban de la mano. Con Carlos estuve algún año por ahí y entrenábamos muy bien. Para los jugadores jóvenes fue muy buena oportunidad y se formaron muy bien. Y además, creo que somos buenas personas.
Por último, ¿se ve algún día teniendo la oportunidad de regresar al Granca?
Ojalá, pero ahora no es algo en lo que piense. Me gustaría porque fui canterano, pero tengo dos años de contrato aquí en Burgos y estoy muy contento.
