Al Granca le queda un mundo aún. Si hay alguien que pensase que la permanencia estaba ya encaminada con el desembarco de Pedro Martínez y la racha de dos victorias que tomó al tumbar a Iberostar Tenerife y Unicaja Málaga, debería esperar antes de respirar sin miedos. La mejoría que ha experimentado el club claretiano desde que el técnico catalán se hizo cargo del equipo es notable, pero ayer firmó su peor partido con Martínez al mando en esta tercera etapa para caer derrotado sin rechistar en Andorra (99-85).
Un tropiezo que, unido a las victorias de Montakit Fuenlabrada, Delteco GBC y UCAM Murcia, deja la Granca solo un triunfo por encima del descenso, en una posición donde se asoma a los puestos de LEB Oro. Las curvas seguirán las próximas semanas, con las visitas de Valencia Basket, Real Madrid y salidas duras como las de Fuenlabrada, Manresa o Estudiantes antes de cerrar el próximo mes de abril. Casi nada.
En el Principado, el conjunto claretiano nunca tuvo opciones. Empezó mal y acabó peor. Siempre por detrás en el marcador, impasible ante el extraordinario acierto del MoraBanc Andorra que quebró la fe del Herbalife, lejos del nivel defensivo que ha mostrado desde la llegada de Martínez -valga como ejemplo el último baile en casa ante Olympiacos-, corto en vigor y falto de claridad en ataque. Se rindió el equipo amarillo frente a la banda de Ibón Navarro, liderado por un Dylan Ennis descomunal, autor de 23 puntos (6/7 en triples), escoltado por Moussa Diagné (15 puntos y 8 rebotes), Andrew Albicy (10 puntos y 11 asistencias) y David Jelinek (15 puntos).
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