Ha pasado tres meses desde el último partido de la pasada temporada. ¿Cómo ha sido el verano?

Lo de siempre. Hice un trabajo individual durante todo el verano, tanto para mi condición física como para recuperarme al 100% de la lesión de tobillo que me lastró la pasada temporada. He intentado mejorar también los conceptos baloncestísticos que puedo adquirir y creo que he aprovechado este tiempo. Estoy listo para la próxima temporada.

¿Estuvo en algún campus específico? ¿Se puso a las órdenes de algún entrenador personal?

Estuve con los preparadores que me han entrenado toda mi vida. Aleksandar Matovic es quien me ha enseñado todo y es en quien confío. Hicimos un buen trabajo físico.

Imagino que todo este tiempo ha estado en Serbia...

Sí, sí. Estaba cansado de tanto viaje durante la temporada, con la Euroliga y todo lo que suponía viajar por Europa. He estado en casa.

Sus derechos en la NBA son propiedad de Denver Nuggets. ¿Ha pensado durante el verano dar el salto a Estados Unidos?

Bueno, no hemos hablado mucho este verano, pero siempre estamos en contacto para saber cómo estoy jugando. Pero no hay muchas opciones.

Hablando ya en clave Granca. Tiene un año más de contrato con el club y, aunque es uno de los descartados por parte de la dirección deportiva, tiene que hacer la pretemporada porque tampoco ha rescindido. ¿Cómo se vive ante esta situación?

El club me dejó claro este verano que no tiene intención de que me quede aquí y tampoco ha salido nada interesante fuera. Hablé con el entrenador y hemos llegado a un acuerdo en el que yo hago la pretemporada para buscar un equipo y él puede contar conmigo en los partidos. Me siento bien porque hay buena relación entre todos y me siento parte del equipo también. Me tratan como al resto de los jugadores. Además, tengo que cumplir con mis obligaciones como jugador. Veremos qué pasa en el futuro.

¿Cuando se refiere a "nada interesante" es que han sido ofertas de equipos menores u ofertas que no se adaptan a lo que espera para su perfil como jugador?

Digamos que nada muy interesante para mí. Quiero esperar a una buena oferta. Así también puedo estar concentrado para dar mi máximo en el Granca y que nos ayudemos mutuamente. También quiero pensar que nunca se sabe lo que puede pasar... Estoy entrenando como si me quedara y jugara aquí la temporada que viene, nunca se sabe.

Quiere decir que si pasa cualquier inconveniente, como por ejemplo la lesión de algún jugador, o que convenza al entrenador de que se quede con usted, ¿le gustaría seguir en el Granca?

Espero que no tenga que lesionarse ningún compañero. Pero todo puede pasar. Esto es deporte y es la vida. No podemos tener planes de futuro muy largos. Tengo que mirar el presente y dar el máximo cada día.

Pero sea, claro, si el club le comunica mañana que se quede, ¿querría?

Hombre, ¿por qué no? Ya he dicho anteriormente que me encanta vivir en la Isla. El club es un buen sitio para un jugador como yo. No tengo ninguna razón para decir que no querría seguir.

Tal y como se ha confeccionado la plantilla, en su puesto está Omar Cook y Fabio Santana. ¿Usted se ve a la altura de estos dos jugadores?

No sé si me van a creer, pero no me he parado a pensar en este tema. Es parte de nuestro trabajo. No podemos pararnos a pensar en cosas que no dependen de nosotros. ¿Eso a que me va a llevar? A tocar fondo, nada más. [Suspira] Es decisión del club, del director deportivo y ellos saben qué es lo mejor para el equipo. No voy a pensar en esto y tampoco me interesa. Estoy aquí y daré el máximo en la cancha que es lo único que depende de mí.

Su objetivo entonces es dar ese máximo durante la pretemporada y usarla como escaparate para que algún equipo de Euroliga o Eurocup le eche el lazo

No tengo ninguna meta. Solo quiero ir a un equipo donde tenga oportunidad de jugar, Euroliga, Eurocup o ACB, me da igual. La temporada pasada después de la lesión creo que no tuve esa oportunidad, a pesar de que antes de ella estaba jugando muy bien. Necesitaba más tiempo para coger ritmo, pero no me dieron esa oportunidad, no jugué mucho.

Esas oportunidades a las que se refiere coincidieron con la llegada de Pedro Martínez al club.

Sí. Es esa etapa. Pero también fue parte del trabajo. Él confió más en Clevin [Hannah] y en Albert [Oliver]. No es algo que me tenga enfadado. Solo me refiero a lo que creo que necesito, una oportunidad para coger la confianza que tenía antes.

¿Cree que la decisión de Martínez fue estrictamente deportiva o había algo más?

Con él tuve una relación buena. Profesional. Sin malas palabras ni malos gestos. Todo bien. Creo que lo hice bien en los entrenamientos y no veo ninguna razón para que tuviéramos mala relación. Supongo que fue cosa de las ideas que él tiene como entrenador. Suelen confiar más en unos jugadores que en otros y no pasa nada. Yo intenté convencerle, pero jugué cuando jugué y ahora solo quiero jugar más.

Ha coincidido con tres plantillas distintas. ¿Qué valoración hace de la actual?

Aun así es mi primera pretemporada [ríe]. Parece un buen grupo de chicos, aunque faltan los del Mundial. Pero claro, la temporada pasada también era buen grupo pero los resultados no acompañaron. Creo que mantienen el nivel del club. Son buenas personas, que mantenemos respeto entre nosotros y al entrenador.

Y de su paso por la Isla, ¿con qué se queda?

De verdad, este estilo de vida aquí me tiene enamorado. Todo tranquilito, el sol, la comida, no hay estrés. Mi novia acaba de venir por primera vez y está encantada con la vida en la Isla.

Y entre todos los compañeros que ha tenido estas tres temporadas, ¿ha habido alguno que le haya sorprendido por encima de los demás?

Suelo ver mucho baloncesto y a muchos les conocía antes de jugar con ellos aquí. Por tanto, de decir alguno sería Jacob Wiley. Nadie sabía nada de él, estaba en Australia, vino, demostró la calidad que tiene y ahora está en Panathinaikos. No he visto nunca a un trabajador como él. Se pasaba todo el día en el gimnasio y entrenaba igual que en los partidos.

¿Y de la actual pretemporada?

Se nota que Omar Cook tiene una clase enorme. Estoy intentando aprender todo de él porque juega en mi misma posición.